#PrimerCapitulo.

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  Me acostumbre a salir de mi casa para ir a la escuela a la misma hora todos los días. Tomar el colectivo a la misma hora, y si tengo suerte sentarme en el mismo lugar de siempre, que es el último asiento doble del lado de la ventana. No soy una persona de muchos hábitos, pero esto siempre lo cumplo, solo porque necesito llegar a tiempo.
Todo eso que les conté, debería de estar sucediendo hoy. Como siempre. Pero no estaría pasando. Ya que la alarma de mi celular no sonó, y mi pequeño hábito se vio interrumpido. Así que ahora estoy corriendo para no llegar tarde a tomar el colectivo.

  Desde el interior de mi corazón siento que el día no está yendo a mi favor. Y no lo digo solo por que no haya sonado la alarma, sino por como va la primera hora de este día. Para que puedan entender les voy a contar con más detalle. No desayune, horrible. Tampoco me arregle como quería, una tragedia. No pude terminar mi tarea para hoy, porque me quede dormido y no puse a cargar mi teléfono, razón por la que no sonó la alarma. Y sólo para empeorar las cosas hoy es un día horrible. Hace calor. Solo el calor puede arruinar un día ya arruinado. El pronóstico dice que "La temperatura seguirá subiendo y se esperan lloviznas aisladas". Básicamente, va a hacer calor y puede llover cuando menos lo esperes ¡Cuidado!

  Contrario a lo que pueden pensar, me gustan mucho los días de lluvia, pero no soy muy fan de la humedad. Arruina mi pelo, y hace más pesado cualquier cosa. Se que estamos a mediados de primavera y que es normal que llueva. Pero, ¿es necesario que haya húmeda? Días así quisiera encerrarme en casa con en aire acondicionado y ser feliz. Ahora imagínate viajar en colectivo. Da ganas de agarrar el martillo de emergencias, romper una ventana y tirarse por ahí. Que drama. Creo que ya vi mucha televisión y eso empieza a afectar mi cabeza.

  Ah, claro. Algo que tengo que contar es que la humedad me pone histérico y eso desencadena mi lado dramático. Más de lo normal. Aunque este día no esta ayudando mucho que digamos. Pero no hay que ser tan negativos. Tengo que calmarme. Ver todo con otra perspectiva para que las energías cambien.

  Solo para empeorar, por culpa de mi dramático y extenso monólogo, el colectivo está cruzando frente mis narices como si mis gritos para que se detenga no existieran. De verdad, nada está yendo bien hoy. Ahora llegaré tarde a clases y no voy a poder pedirle ayuda a JeongHan-hyung para mi tarea.

  Respiremos, y pensemos en campos verdes, el mar y cosas que relajan a la gente.
Es obvio que voy a llegar tarde a clases así que solo me queda esperar a que el próximo colectivo se digne a venir. No nos olvidemos de las energías.

🔥

  Lo intento. Juro que intento darle un lado positivo a todo esto y por mas que lo pienso llego a la misma conclusión: Es un día HORRIBLE. No me tuve que haber levantado de mi cama para empezar. No soy una persona que se enoja, pero esto realmente me supera.

  Treinta y cinco minutos debajo del sol sofocante, protegido por el pequeño techo de la parada. Después de eso al fin ir al colegio, pero para mi desgracia mi asiento no estaba vacío. Peor aún, ningún asiento está vacío. Ya son bastantes las personas que están paradas. Quiero llorar. Nada va a ser que este día mejore.

  El colectivo comienza a avanzar con lentitud ya que hay tránsito, lo que atrasa más mi camino. Ya estoy muy frustrado a esta altura del camino, lo único que quiero es poder llegar.
Ahora todo tiene que seguir como de costumbre. Mi mal humor, el calor, el tránsito, el lugar lleno, la gente enojada. Pero de repente, el colectivo frena. Por inercia todos fuimos hacia delante, casi me caigo.
  Se empezaron a escuchar gritos y quejas por parte de los pasajeros, que el colectivero trato de calmar como pudo.
  La puerta de adelante se abre de nuevo dejando entrar a la última persona.

—¿¡Estas loco!? Te pude haber chocado —grita el chofer. Alguien entró agitado.
—Lo siento, lo siento. —Rápido se disculpa.

  Solo falta que un loco se tire en frente del colectivo para que mi horrible día este totalmente completa.

—Ese chico, casi se tira en frente del colectivo —comentó una señora junto a mi.
—La verdad es que los jóvenes siempre van apurados a todo —respondieron.

  El tiene auriculares, razón por la cual seguro casi lo chocan, paso junto a mi y llego al fondo del colectivo.

  Ah. Él es muy lindo. ¿Eso lo dije o lo pensé? Un hombre que estaba junto a mi me miro de forma extraña y se alejó un poco, para nada discreto.
Tal vez mis pensamientos y mis palabras se fueron de control, pero de todas formas no tengo que pensar eso de un chico. Qué vergüenza. Aunque, para mi defensa, solo dije algo que se ve desde lejos, una obviedad. Mi amigo JeongHan-hyung es lindo y se nota y a este chico se le nota también.

El chico.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora