El dilema de ser yo

¿SUICIDIO?

He empezado a sentirme peor ahora no son solo mis compañeros los que me maltratan, ahora he llegado hasta el punto de que ni mi familia me quiera, yo con mi altanería he echado todo a perder.
Recuerdo que cada vez que yo respondía o hacia algo indebido, me desian que yo no servía para nada, que nonca hacia nada, en ese instante yo me encerraba en mi cuarto a llorar y escribía notas como esta:

25-06-16
Cada día me estoy sintiendo peor, cada día me duele más el rechazo de las personas, porque ellos solo ven el lado malo de mi y no quieren ver como soy y tengo miedo de llegar un día al limite y tener que morir por mi propia cuenta (suicidarme) tengo miedo esperó no llegar a estos limites y pues ME SIENTO MAL SAD hasta por mi familia.

Y hay fueron destruyendo lo poco de fortaleza que tenia.

Cada día sentía mas ganas de suicidarme de dejar de existir sentía que la vida no servia para nada que yo era una porquería un bicho raro en este mundo, yo no creía en Dios y cuando me daba por creer le rogaba que me dejaran en paz que quitara este sufrimiento de mi corazón si es que tenia porque poco a poco mi corazón fue derrumbándose ya no servía para nada ni siquiera para tener amor por mi llegue hasta sierto punto, pero todo seguía igual y poco a poco fui alejándome de Dios fui tomando un camino sin rumbo, sin fuerzas, sin esperanza.
Cada vez que sentía dolor me cortaba, pues el dolor de las cortadas no era nada comparado con el dolor que cargaba por dentro, ya no tenía amor en mi corazón.
No podía mas cada día me sentía peor y cada vez que intentaba morir algo me lo impedía, y menos mal fui cobarde y lo intente y no lo logre.

Hasta que un día como cualquier otro, un sábado mi tía me llamo, me invitó a la iglesia, yo acepte por no crear más problemas, era una iglesia cristiana se llama *su presencia*
Al momento cuando empezó la alabansa, sentí los latidos de mi corazón, había olvidado que tenía uno, era tanto el dolor que cargaba en mi pecho que solté el llanto las lagrimas caían por mi mejilla, empecé a pedirle perdón a Dios y de repente mi tía se acercó y me dijo al oído *todo va a estar bien* pero lo extraño fue que no era la voz de mi tía, era distinta al oírla se formó una paz en mi Corazón, hace tanto no la había sentido que fue increíble volverla a sentir.
Y así fue como Díos me tocó y todo cambio.