Su piel blanca como porcelana, sus mejillas rosadas, sus labios carnosos de un color rojo suave, sus ojos marrones con pequeños toques verdes y su cabello oscuro, todo eso le traía loco a Richie Tozier y a Bill Denbrough.
Su piel blanca como porcelana, sus mejillas rosadas, sus labios carnosos de un color rojo suave, sus ojos marrones con pequeños toques verdes y su cabello oscuro, todo eso le traía loco a Richie Tozier y a Bill Denbrough.