Conozcamonos

13 1 1
                                    

Caminaba por la acera, vivo en una unidad, todo estaba oscuro y tenía un hábito que era ir a un parque que se encontraba a unos cuantos edificios del mío; mientras iba caminando escuchaba música (siempre lo hago) y "al time low" era la perfecta para caminar.
A lo lejos veo una silueta grande muy grande, para ser sincera me asuste un poco pero no le tome mucha importancia. Sentí un cosquilleo en la espalda y escalofríos por todo el cuerpo, levante la mirada y vi que era un chico, uno muy alto y delgado, su ropa era oscura igual que el gorro que tenía en la cabeza, solo cruzamos miradas pero parecieron los segundos más largos de mi vida su mirada era penetrante, lo cual me causó mucha intriga solo sabía que era novio de una vecina y que se llama Jason.
Seguí caminando y llegue a los juegos; me senté en una banca que estaba hasta el final y miré las estrellas, me quité los audífonos para escuchar a los pájaros entre las ramas de los árboles pero no dejaba de pensar en el chico que abarcaba de ver hace un instante; me levanté y fui a casa para saber más de él, gracias a todo esto del internet no me costó mucho trabajo encontrarlo por Facebook y otras redes sociales, después de un rato le envié un mensaje para saber si efectivamente era la persona que vi hace una hora, no tardó en responder con un "hola".
En ese momento supe que ya era un progreso con él y seguí la conversación por qué sé que en un momento llego a ser muy aburrida pero cuando hablaba con él tenía muchos temas de conversación, música, ropa, comida y me facilitaba aún más las cosas de conocerlo a fondo. No me había percatado que ya teníamos 4 días hablando y que ya nos considerábamos amigos. Un día me envió un mensaje estando en clases pidiendo salir esa noche y que nos veríamos en el estacionamiento frente de unas canchas, acepté. Llego la hora determinada para encontrarnos y así fue, él estaba esperando como lo había dicho.

-¿confundida?- me preguntó
-emocionada-respondí
-si, también lo estoy, para serte sincero no creí que me agradaras tanto.

Me sonroje, es inevitable que una persona no lo note pero solo me miraba y sonreía, como si supiera lo que estoy pensando y le causará gracia.

-¿por qué me miras?- pregunte
-me pareces linda e interesante, eres alegría cuando estoy contigo, y me gusta, no lo había sentido antes-respondió
-Gracias, tú también me agradas me siento cómoda estando contigo- respondí y le di un fuerte abrazo de despedida.

En el abrazo mi respiración se aceleró, mi corazón daba vueltas en mi pecho como si quisiera escapar hacia el de él, mis piernas temblaban, y sentía el calor de su cuerpo, su palpitar con el mío sin dudarlo era el mejor abrazo que he y me han dado y el más tierno por que al ser una persona muy alta tuvo que bajar un poco más las brazos para no abaratar mi cabeza y asfixiarme.

-no me gusta que el tiempo pase tan rápido cuando estas con la persona que quieres
-Jason...-interrumpí
-¿si?
-¿nos veremos mañana?
-claro, no dejare de verte
-Gracias
-¿por qué agradecer?
-por estar conmigo
-no hay de que, mañana te aviso en qué lugar, la hora será la misma que la de hoy, no te preocupes jamás te abandonaré.

Buttercup Donde viven las historias. Descúbrelo ahora