✨"BOY ROTTEN GROTESQUE ROMANCE" #CarsAwards2017 ✨

Mio figlio povero

Narra Mcqueen.

Al día siguiente, estaba recostado en la camilla, descansando plácida y tediosamente, hasta que tocan la puerta.

Mcqueen: ¿Quien es?–pregunte.

???: Soy La madre de Francesco, necesitó hablar con usted– Respondió con una voz tranquila.

Mcqueen: Oh, si, pase señora–Respondi amable.

Señora: Oh gracias, ¿Como esta?– Pregunto tranquila y me dio un ramo de flores.

Mcqueen: Bien señora, recuperándome, y no se hubiera molestado– dije apenado por el detalle.

Señora: Tranquilo, lo traje como un presente de cortesía– explicó dulce.

Mcqueen: Gracias señora, y, ¿usted como esta?– pregunte con una sonrisa.

Señora: La verdad, muy triste, por todo lo que ha sucedido, realmente me siento mal por.... –la señora comienza a llorar– Por la perdida de mi hijo y por todas las atrocidades que hizo, esto, me rompe mucho el corazón– Mostraba un rostro tan triste y acabado.

Mcqueen: Señora, tranquila, tome asiento– Señalo el asiento que estaba situado a un lado de la camilla.

Se sienta y se calma de a poco.

Señora: T-todo esto s-sucedio por la dura y violenta infancia de mi hijo– confesó dolorosa.

Mcqueen: A que se refiere señora? A que se refiere con eso? Acaso lo molestaban? Lo golpeaban?– pregunte intrigado, esperando una respuesta.

Señora: Mucho peor, que fueron 3 años de tortura para mi y mi hijo, Francesco– Respondió con tristeza, se paro del asiento y se acercó a la ventana, pronto comenzó a llover.

No entendí bien a que empezaba a referirse, pero algo debió afectarle tanto, solo puse atención a lo que decía la señora por respeto a su persona.

Señora: -Sollozando- M-mi hijo... Cuando el estaba chico, tenia 5 años, era el niño mas alegre, vanidoso, amable y siempre corría rápido por la casa... El siempre decía: "Mamá, un día, seré un famoso corredor de la formula 1" "Mamá, te comprare una casa" "Mamá, te haré la mujer mas feliz de este planeta" "Mamá, te quiero mucho"..... Siempre sonreía y miraba con anhelo a mi pequeño francesco, lamentablemente, el tuvo una infancia muy dura y violenta, al igual que yo. Su padre, un día llego a la casa muy borracho, mas de lo normal, antes, nuestra familia era normal, feliz, contenta y unida... Pero, mi "marido" tuvo muchos problemas en el trabajo, siempre llegaba tarde, no hacia lo que debía hacer, nada, cuando llegaba a casa, siempre llegaba tomado. Cuando algo no le parecía bien, me agarraba del cabello, y me empezaba a golpear repetidas veces, siempre terminaba con moretones, sangre, lágrimas... Pero eso no me dolía, me dolía mas el hecho de que mi niño viera toda esa violencia... O incluso, desgraciadamente lo viviera. El también tenia su cabello largo, siempre se lo amarraba con una trenza, pero el muy bastardo de su padre, también lo golpeaba... Un día, nos fuimos a cortar el cabello, para evitar que nos volviera a golpear, funciono, pero seguía con la misma violencia de siempre– contaba con gran melancolía.

Dentro de mi, siento que debo perdonarlo, pero no del todo, aunque, toda esta historia, es realmente dura.

Señora: Su padre siempre nos traía vergüenza, siempre la gente nos decía: "Señora, su marido se esta peleando" "Ese de ahí no es su marido?" "Que vergüenza!" "Oh señora, por que no se divorcia?" "su esposo esta borracho y desnudó en la calle", recuerdo que eso ultimo, un vecino me ayudo para llevar a mi marido en una carretilla para ir a casa, ya que estaba muy borracho como para levantarse... Realmente muchas cosas pasamos. Muy indignante e imperdonable–  Explicó con odio y asco.

Mcqueen: Señora, entonces ¿porque que permitió humillaciones así?– Pregunte seriamente preocupado.

Señora: Por que nos tenia amenazados, solo por eso, no podía hacer nada, mi marido fue una persona con un carácter fuerte y enfermizo.– Respondió con decepción–Solo hasta aquel días, que nos golpeo, tan fuerte que quede inconsciente, todo fue muy violento y complicado de manejar. Al día siguiente, desperté en un hospital, mi niño estaba a lado de mi, durmiendo en la camilla, con la respiración entrecortada. Paso los días y me contaron que francesco fue abusado sexualmente, el culpable era mas que obvio que su padre. Lo denuncie y le dieron 40 años de prisión. Desde entonces, mi hijo y yo tratamos de vivir mejor, en un lugar estable, hasta que con los años, su trauma cobro gran pesadilla, lo lleve a muchos psiquiatras, poco a poco, lo fueron curando, hasta que 4 años después se recupero, estaba feliz de que se haya rehabilitado, fue duro, pero valió la pena o eso... Es lo que pensé. Años después, se convirtió en el corredor que todo mundo conoce... O conocía. Siempre hablaba de ti, siempre y que un día, me dijo que estaba enamorado de ti, pero no pensé que su amor se volviera tan retorcido, seguro... No estaba tan sano como esperaba... Pero... –suspira aliviada– Mi hijo, seguro ya esta descansando en paz, no quiero que lo recuerden como un asesino, un hombre desequilibrado, solo, como un gran corredor de Italia. Lamento decirte esto, pero, las personas enfermas, son las mas tristes... Espero y puedas comprender esto, Mcqueen, francesco no quería hacerte daño, en el fondo de su corazón –Se acerca a mi y toma mi mano gentilmente– Te amaba con todo su alma, fuiste su primer amor platónico –Me da una pequeña cadena con un corazón que decía: "Love Forever~♥"– Guardalo, el le hubiera gustado dártelo en primer lugar, pero...Nunca se atrevió, por ser rechazado, ahora sabes, que también, el te salvo, tal ves no de la manera que querías, pero te salvo de algo tóxico, querido.

Mi mente estaba muy apagada, mis pensamientos estaban lastimados, por dentro, sentía gran dolor y tristeza inexplicable, pero... Ahora puedes descansar en paz francesco, estas perdonado, ahora entiendo, que tu no fuiste el causante de tu locura... Espero, que ahora estés tranquilo.

Señora: –Se despide de mi con un abrazo y un beso en la mejilla–Hasta luego, cuidate mucho, gracias por escucharme, recuperece, señor Mcqueen, aun tiene mucho que correr, adios – Se separa de mi, llorando, con nostalgia, sale de la habitación–.

Espero que todo esto, se olvide... Pero –Agarre la cadenita– A ti no te olvidare.

Me pongo la cadena en el cuello, miro hacia un lado de la ventana, sigue lloviendo, pero no tan amargamente, simplemente, nostálgico, si estuvieras aquí, ya sentiría tu presencia, también se perdonar.

Francesco Bernoulli.
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