Ƥσιѕση; ﹥Ƥ.נм

Capitulo 1.

El irritante sonido de alguien golpeando la puerta de mi habitación me despertó, ¿quién era el grandísimo hijo de puta que quería morir tan temprano? molesta corrí mis sabanas, levantándome decidida a romperle la cara a quién fuera que se encontrara tras esa puerta. Vaya fue mi sorpresa al encontrarme al mismísimo Min Yoongi ¿cómo demonios había entrado?

— ¿Pensabas saltarte el instituto solo porque tus padres no están? — El tajante vocabulario de Yoongi se hizo presente al instante, el era el menos indicado para regañarme sin embargo aquí lo teníamos, delante de mi puerta exigiendo que vaya al instituto, esto se me hacia muy gracioso.

— ¿Piensas llevarme a la fuerza acaso? — Lo rete, no hacia falta decir que mi personalidad y la de Yoongi al ser parecidas chocaban una con la otra. Una sonrisa algo fingida apareció en sus labios, esto seria tan divertido.

— ¿Estas dudando de que no me atrevería a patear tu lindo trasero? — Se acerco unos pasos haciéndome frente, yo no pensaba retroceder ante este estúpido, imitando su acción me digne a responder con una retadora sonrisa.

— De lo que dudo es que lo pudieras hacer pedazo de pulga. — Yoongi y yo estábamos listos para asesinarnos el uno al otro si no fuera porque alguien nos interrumpido antes de comenzar una masacre.

— Hey hey chicos hasta ahí. — Mi mirada se dirigió a un costado encontrándome con Jungkook mirando divertido la escena, ¿estuvo ahí todo este tiempo y no lo note? rápidamente hice un paso para atrás, alejándome de Yoongi.

— ¿Puedo saber que hacéis los dos aquí? — Me di cuenta que aquella pregunta realmente fue estúpida, esta más que claro que vienen a asegurarse de que vaya al instituto. Yoongi rió burlón, soltando la primer idiotez como siempre.

— Venimos a proponerte un trió ¿qué dices? — Rápidamente lo fulmine con la mirada, cruzándome de brazos. — Es obvio que vinimos a buscarte idiota, así que alístate.

Sin decir más Yoongi se fue, desapareciendo por las escaleras, dejándome a mi y a Jungkook solos, nos mirábamos unos segundos, sin intercambiar alguna palabra me di media vuelta dispuesta a entrar a mi habitación pero su voz me freno al instante.

— Realmente te extraño. — Esas palabras solo lograron que apretara mis puños tan fuertemente que dolía, una risa se escapo de mis labios, voltee totalmente divertida.

— Supongo que no lo hacías mientras te revolcabas con otra. — Jungkook miro hacia otro lado, claro, como siempre, desvía la mirada en vez de enfrentar cuando le echo en cara la verdad.

— Sabes que realmente me arrepiento. — Mordí fuertemente mi labio, tratando de controlar las ganas de partirle su bonita cara de un puñetazo.

— ¿Pero cuando lo hacías donde estaba ese arrepentimiento? ¿Perdido entre las piernas de aquella zorra tal vez? Jungkook, solo cierra la maldita boca de una buena vez. — Y sin mediar más palabras entre a mi habitación, patee mi cama haciéndome daño en el pie. — ¡Maldito hijo de puta! — Solté agarrando mi pie por el dolor, suspire, volviéndome a levantar.

Tarde al menos unos 15 minutos en estar lista, me encontré con los chicos afuera esperándome, Jungkook trato de chocar mirada conmigo pero yo solo lo esquive poniéndome en marcha hacia el instituto. Todo fue callado hasta llegar a las puertas de la inmensa escuela, luego de eso el ruidoso de Taehyung nos abordo.

— ¡Hey chicos! si que es raro verlos a los tres juntos tan temprano. — Ni que lo dijera, el ambiente que desprendíamos era demasiado tenso y sin decir que nadie había dicho una sola palabra hasta ahora.

— La mocosa no pensaba venir. — Pronuncio el imbécil de Yoongi, este chico si sabia como cabrearme.

— No me sorprende para nada, no sé que pensaban sus padres cuando se fueron y la dejaron. — Bueno ni yo lo sabia realmente, pero era algo importante y debían de irse, si un cazador de vampiros era llamado para una misión no podía negarse por más que no quisiera, así siempre seria.

— Eh hola, estoy aquí por si no sabían. — Taehyung al escucharme hablar no pudo evitar embozar una sonrisa de niño pequeño y abrazarme por los hombros para seguir caminando, pude sentir la mirada de alguien fija en nosotros y no tenia que ser adivina para saber que era la de Jungkook, simplemente me limite a ignorarla.

Al entrar al instituto los chicos se separaron de mi, obviamente ya que ellos iban a un curso mayor al mio, saque algunas cosas de mi taquilla para encaminarme hacia mi clase. Al entrar el profesor no estaba aún, por lo que solo me tire sobre mi pupitre para mirar por la ventana. Odiaba venir al instituto, después de todo, pase 8 años entrenando para ser la mejor cazadora de vampiros y lo había logrado, sorprendiendo a todos los cazadores y enorgulleciendo a mis padres por ser una de las mejores y más jóvenes cazadoras de la historia, no tener acción y actuar como una persona normal no era lo mio, tampoco de los chicos que estaban en mi misma situación, Taehyung, Yoongi, Hoseok y Jungkook, nos habíamos conocidos todos a muy corta edad en la academia de cazadores, somos un buen grupo se podría decir.

Luego de unos años había comenzado a salir con Jungkook, todo iba bien o eso creía yo, encontrarlo hace unos meses revolcándose con una zorra de este instituto me había dolido más no lloraría por el, no lloraría por un grandísimo idiota, decidi terminar con el obviamente y nada mejor que terminar una relación dándole una buena paliza, solo le devolví el dolor que el me había causado, así estaríamos a mano. Ese día había dado por muerto a mis sentimientos, pero el no, Jungkook era demasiado persistente, el quería que volviéramos, que lo intentáramos, pero para mi eso ya no tenia sentido, lo que sentí por el se marchito tanto como una hoja en otoño, ya no lo amaba.

Sacándome de mis pensamientos el profesor ordeno silencio en el aula, dirigí mi mirada hacia adelante solo para encontrarme con unos ojos marrones, eran tan hipnotizantes, algo que no podrias olvidar aunque cerraras los ojos, su cabello tan rubio como el sol lo acompañaban muy bien, sus facciones delicadas lo hacían demasiado irresistible como cautivador ¿quién demonios era el? y lo más importante ¿por qué no apartaba su mirada de mi?

— Como verán tenemos un alumno nuevo, su nombre es Park Jimin, espero que se lleven bien con el. — El profesor miro al rededor unos segundos hasta detenerse en mi sitio, "ni siquiera lo pienses maldito cuatro ojos" susurre para mi. — Siéntate al lado de la señorita Han, es la muchacha del fondo.

Siguiendo las indicaciones del profesor, aquel chico se sentó al lado mio, su presencia me incomodaba y no sabia por que. La clase siguió normal para el resto, digo para el resto porque para mi no lo era, el maldito no dejaba de mirarme, lo podía saber sin ni siquiera voltear, su mirada me ponía nerviosa y molesta, ¿acaso no conocía lo que era disimular? con el ceño fruncido gire hacia el y como lo suponía, mis ojos chocaron con aquellos ojos tan cautivadores.

— ¿Acaso tengo algo en la cara idiota? — Dije con dureza, en su rostro solo se reflejo una sonrisa más no dijo nada, estaba ganándose una paliza. — ¿Me escuchaste o eres sordo imbécil? Jur- — Y antes de que pudiera escupir algo más escuche como nombraban mi nombre.

— Señorita Han ¿puede hacerme el favor de ir a la oficina del director? — ¿Era broma o qué? no me lo pensaría dos veces.

— Oh, con gusto profesor, gracias por cumplirme el deseo de salir de esta odiosa clase tan aburrida. — Se escucharon risas por todo el aula y antes de comerme más reproches agarre mis cosas y salí a una velocidad impresionante, todo era mejor que estar en clases con ese chico raro mirándome.

¿Qué les pareció? ¿Interesante? ¿Qué le ocurrirá a Jimin con Han? ¿La conocerá? ¿Tendremos más celos por parte de Jungkook?

Bueno díganme que les pareció y denle mucho amor, nos vemos~.