Elemental

*Capitulo 1*

Mis ojos se abren a medida de que mi cerebro entra en pánico,aire,no hay aire, estoy rodeada de una sustancia viscosa, y todo esta oscuro, empiezo a golpear las paredes elásticas y resistentes que me rodean, intentando hacer alguna ranura por la cual pueda respirar, empiezo a estar al limite, mi vista se emborrona, y para mi alegría un agujero se vislumbra, haciendo que caiga fuera de mi cárcel.
Mi vista de vuelve a aclarar, y mi estomago expulsa el liquido viscoso de dentro.
-Bienvenida -al alzar mi vista me encuentro con la de una mujer, alta, esbelta, con pelo rojo, y una sonrisa amistosa, lleva unas tiras de piel de lobo, tapando los senos y su cintura. Me incorporo bajando la vista a mis manos llenas del liquido viscoso, y seguidamente volviendo a alzarla para observar todo a mi alrededor,los arboles se alzan como gigantes sepultados en un sueño eterno, el canto de los pájaros cantando cientos de historias, solo una cosa me sacó del trance, la mujer que tenía delante mía, a la cual contemplé por unos instantes.
-Mi nombre es Mysha, ven sigue me, puedes caminar?-una sonrisa enorme y amistosa inundó rápidamente el rostro de la chica, haciendo que sus ojos se achinaran, tendiéndome seguidamente la mano, en la cual apoyé la mía, al alzarme era notablemente mas alta que ella y parecía contenta y satisfecha - Vaya.......Esta vez nos hemos superado -giro la cabeza para descubrir mi prisión, la cual estaba compuesta por dos hojas uniformes, las cuales se unían en una trenza a modo de bellota,  en los extremos constan de unas protuberancias que lo unen a los arboles y a la tierra-.  Eso es un tronco de nacimiento, de allí has salido tú, tienes suerte, tu nacimiento estaba previsto para dentro de tres semanas, si no llegase a pasar la guardia no lo contabas- Mysha empiezaba ha hacerme señas para que la siguiera, pero de pronto, el suelo empezó a temblar, haciendo que temiera por cada uno de mis huesos, estos se quejaban al ritmo de un sonido seco y temerario, el cual se hacercaba cada vez mas, al alzar la vista todo mi cuerpo se paralizó, un ser enorme hecho con raíces y ramas me observaba desde una enorme altura, mis hojos se deslizaron a sus manos, escuálidas, las cuales protegían algo sangrante, posé mi mirada en Mysha, la cual estaba temblando desmesuradamente, el ser  soltó un quejido, el cual hizo que las montañas temblasen, a continuación, este se retorció, sin dejar de proteger lo que fuese que tuviera entre sus manos, el ser empezó a desaparecer, volviendo a retorcerse y cayendo en el suelo, este se transformó en un arbol hermoso, grande, con las ramas fuertes y lleno de hojas, a los pies del tronco se encontraba, una muchacha ensangrentada, a la cual le habían cortado los brazos, al posar la vista en la chica mi respiración empezó a acelerarse y mi vista empezó a fallar, en unos instantes no había mas que oscuridad.