Se encontraba como todas las tardes recluido en la biblioteca, sentado en la mesa más apartada de la puerta para conservar el silencio a su alrededor. Aquel lugar aunque lúgubre era bastante acogedor. Pasaba las páginas con calma mientras resumía todo lo que podría entrar en su próximos exámenes universitarios.
Seokjin o Jin como lo llamabas sus amigos más cercanos, llevaba ya más de dos horas estudiando cuando su amigo de la infancia entró por la puerta, Namjon al contrario que el era un joven despreocupado, se pasaba los días jugando con el resto de su pandilla, aun así cuando se encontraba con Jin la cosas cambiaban.
Se sentó a su lado casi sin hacer ruido, y se percató de que el joven a su lado estaba más concentrado en sus libros que en su presencia. Posó su mano sobre el muslo de esté y ejerció algo de fuerza.
-¡Yah!- Susurró.- ¿Es qué acaso no ves que estoy a tu lado?- continuó entre susurros.
Su amigo se volteó y llevando su mano derecha hasta su boca, y levantando el dedo índice le hizo una señal para que cesase de hablar. –Sshh, hay gente estudiando Nam, no hagas tanto ruido.-
En lugar de comportarse tras ser regañado, el más joven comenzó a subir la mano que se encontraba en el muslo del otro, Jin comenzó a tensarse, pues desde hace unos años él y Namjon habían traspasado la barrera de la amistad y tenían relaciones sexuales con frecuencia, así que conocía las intenciones que este tenía. Aun así, guardó silencio y se dejó hacer.
Nam había comenzado a rozar la entrepierna de Jin bajo el suéter, el cual era lo suficientemente grande como para que nadie se percatase de lo que sucedía. El mayor de los dos no pudo evitar sonrojarse, hacía ya unos minutos que no le prestaba atención a sus apuntes aunque seguía con la vista clavada en ellos. Una vez consiguió lo que quiso, Namjon se levantó y se dirigió a los estantes más cercanos.
Mientras, las palabras de su Hyung rondaban su mente. "Así que hay que guardar silencio" pensó "Veamos si eres capaz de cumplir tus propias reglas". Esos pensamientos evocaron en él una sonrisa un tanto maliciosa, a la vez esa sonrisa sacó a relucir sus hoyuelos perfectamente redondos.
Le hizo gestos al mayor que se encontraba sentado en la mesa para que se acercase hasta él.
-¿Dime Nam?- Preguntó Jin con una voz suave aunque algo agitada a pocos centímetros de él.
-Ayúdame a buscar un libro interesante, dime ¿Qué hay en aquella zona de allí?- lo agarró por la muñeca, y tiró de él con muy poca delicadeza.
-¿Esta zona? No lo sé la verdad, todos estos libros parecen desfasados, y por lo que tengo entendido es más bien una zona para estudiar "en pareja".- recalcó esto último esperando que el menor se percatara de su significado. Lo que el mayor no sabía era que Namjon ya conocía esa esa información.
Tirando de su mayor lo acorralo entre los estantes, Jin se sobre salto e intento liberarse, pues Nam tenía aquella expresión en su cara que decía "Serás mío aquí y ahora".
El más joven repitió el gesto que había hecho el mayor minutos antes y mandándolo a callar acercó sus labios a su oreja derecha. – Hyung, recuerda que no debes hacer ruido, hay gente estudiando aquí.- aquellas palabras provocaron en Jin un gran escalofrío.
Tras aquellas palabras comenzó a morder el lóbulo de Jin, este mordió su labio y trago saliva tratando de que el otro no se diese cuenta de que estaba cayendo en su juego.
-Nam, aquí no, podría vernos alguien.- replicó el mayor de los dos.
Ignoró aquellas palabras, y desde su oreja bajo besando lentamente cada centímetro de su cuello, paró unos segundos y mirando a su amigo a los ojos enarcó una ceja y lo besó con fuerza. Se separó tras unos segundos solo para articular tres palabras.- Me da igual.- y antes de que pudiese contestarle volvió a besar a su hyung.
Mientras Jin dejaba caer las manos sobre los hombros de Namjon este se encontraba ocupado metiendo su mano derecha por su holgado suéter tratando de sentir el tacto de la fina y blanca piel del major de ambos, su mano izquierda por otro lado viajaba en dirección contraria tratando de volver a provocar una erección en Jin.
Solo separaban sus labios cuando la falta de oxígeno era notoria, pero en aquellos escasos segundos que se encontraban separados Jin no podía reprimir los leves gemidos que Namjon le provocaba, cada gemido o resoplido del mayor causaba en el menos una sonrisa maliciosa. –Trata de guardar silencio Hyung.- Repetía una y otra vez con un tono de burla.
Jin por otro lado no podía aguantar más las ganas que tenías de saciar su deseo y en una de esas pequeñas pausas logro decir algo más que un "aa-hh!" entrecortado. –¡Nam haz algo ya!- Suplicó .- Comienza a doler.- Dijo mientras hacía un pequeño puchero.
Esas expresiones hacían que Namjon sacase su lado más perverso, sin dudarlo desabrochó el pantalón del moreno y dejando atrás el bóxer introdujo su mano en la entrepierna de Jin, notó como la erección de Jin literalmente palpitaba, podía notar la fuerza con la que la sangre circulaba a través de su miembro una vez lo agarró con firmeza, el mayor dio un pequeño respingo y comenzó a sentir el vaivén entre sus piernas, el placer que le proporcionaba Namjon, no lo había logrado obtener con otros.
Sus gemidos comenzaban a ser notorios, Namjon trataba de acallarlos con sus labios, mientras jugueteaba con el torso del menor con la mano que le quedaba libre, recorría cada parte de este con las yemas de sus dedos tomándose su tiempo cada vez que se encontraba con uno de sus pezones erectos por la excitación y el roce, se dio cuenta de que Jin comenzaba a respirar a mayor velocidad y que sus piernas comenzaban a flojear, se retiró lo justo para observar la cara sonrojada de su mayor, y los gestos que hacía para contener sus gemidos.
-Nam ...me..e..me..e voy a correr...- gimió en el oído del menor que estaba completamente concentrado en lo que tenía entre manos.
-Princesa, córrete para mí.- Dijo con un tono un poco más autoritario.
Y mientras Jin comenzaba a correrse sobre su propio abdomen, el menor comenzó a succionar su cuello, para dejar en él una marca de color rojizo.
Sacó su mano ligeramente manchada de semen y se la enseño al moreno, el menor de cabellos dorados no necesitó abrir la boca, pues con un simple gesto el mayor ya sabía lo que debía hacer. Abrió su boca, sacó la lengua y como si de un helado se tratase comenzó a lamer la mano del menor, degustando su propio sabor, cuando esta estuvo totalmente limpia se relamió sus propios labios y cerró su boca, dejando en la comisura de aquellos gruesos labios un pequeño resto de sí mismo que el menor no dudo en lamer haciendo sonrojar al mayor.
-Hyung, creo que deberíamos estudiar juntos más a menudo.- Dijo mofándose el menor de los dos mientras se dirigía a la mesa en la que ambos se encontraban antes.
Jin salió tras él, no sin antes acomodarse la ropa y abrochar de nuevo su pantalón, cuando divisó a Namjon este estaba escribiendo algo en sus apuntes, lo observó mientras se acercaba de nuevo a su asiento. El menor le dedicó una sonrisa pícara, y se fue de la biblioteca despidiéndose de él con un leve gesto.
El moreno miró sus apuntes buscando el mensaje que le había dejado su "amigo" en una esquina al final de la página se podía leer. "La próxima vez ven a estudiar a mi casa, así no tendrás que guardar silencio, Hyung.- ".
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¿Estudiamos juntos? +18
FanfictionKim SeokJin y Kim Namjoon son dos jóvenes que traspasan la fina barrera de la amistad entre los estantes de una biblioteca pública. One Shot / Largo/ Contenido adulto/ suave/