Sumiso

capitulo 1)

ATENCION: en esta novela, al personaje Abraham (abraham mateo) se lo vera sometido y sumiso, será castigado y recompensado a mi voluntad ya que YO soy la escritora. si te ofende este tipo de cosa ya sea porque eres abrahamer o porque estas en contra del BDSM por favor no leas y despues pierdas tu tiempo escribiendo mensajes largos, aburridos e insultantes para mi persona, simplemente ignora la historia. en mi perfil hay muchas mas que te pueden interesar.

muchas gracias

atte

MILYLOVER

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Me despierto con un dolor de cabeza que mataría a cualquiera. Miro hacia el otro lado de la cama y contemplo a la belleza que duerme plácidamente junto a mi. debo tratarla bien. Con ella no la había pasado mal. Sonrío mientras recuerdo los besos y las caricias, el sonido de su corazón acelerado cuando me le había acercado. Era una Abrahamer aunque no lo hubiese dicho. Su móvil descansa en mi mesa de noche. Lo tomo y lo activo. ahi esta mi foto que sonríe desde la pantalla. Abro la cámara y me tomo una foto sonriendo y mostrando la mayor parte de mi torso posible, le agrego un par de filtros. Me gusta, se la pongo como fondo de pantalla, luego le agrego mi numero con el nombre de Sexy Señorrito. así me había llamado varias veces mientras hacíamos el amor. 

Dejo el móvil en la mesa de noche nuevamente. la miro. Se llama Carla. tiene 17 años y es de Cataluña, anoche estaba en mi concierto. una tía de verdad preciosa. 

Pero, sin embargo,  yo sigo insatisfecho. No es que Carla no hubiera sabido obrar su magia, es solo que yo estoy buscando algo mas, algo mas que solo sexo convencional. no se que es lo que busco, no estoy seguro. pero de lo que si estoy seguro es de que hace ya dos años que tengo relaciones sexuales y nunca me he sentido conforme. En mi opinión tiene que haber algo mas. mi cuerpo necesita mas placer. 

Miro de nuevo a Carla. La dejaré que duerma un poco mas, me levanto de la cama y me voy al baño. necesito una ducha y tal vez si me labo la cara con agua fría disminuya mi resaca. El agua caliente se siente bien. Me demoro ahí lo mas que puedo. El agua empiesa a enfriarse así que tomo una toalla y me envuelvo la cintura para cubrir mi entrepierna y salgo al vestidor que precede a mi baño. Escojo unos pantalones negros, una camisa roja a cuadros y unas zapatillas negras con la suela blanca.

-¿Abraham?-. La voz de campanas de Carla se deja oir a penas termino de vestirme.

-Aquí- Le dije mientras salia hacia el dormitorio. La observé. Sus rizos rojizos estaban enredados y formaban algo parecido a un nido de pajaros en su cabeza. Al verme sonrió. –¿Cómo estás?- le pregunté mientras me inclinaba para besar su frente.

-Bien –me dijo mientras un rubor de vergüenza teñia sus mejillas.

-Te espero para que desayunes en la cocina – le sonrreí y Sali de lahabitación para que pudiera vestirse tranquila.

Cuando bajé a la sala vi a mi hermano Tony. El tío estaba sentado en el sofa, desayunando y viendo televisión. Vestía una camisa blanca y unos jeans azules, y unas zapatilllas blancas. Cuando me senté junto a el me observó y sonrrió con curiosidad.

-¿Y bien?- me preguntó.

-¿Y bien que?- le respondí a mi vez.

-Cuentame ¿Qué tal?- me insitó con una sonrisa pícara.

-La chica es buena, peo no es lo que busco, realmente no es lo que busco en las chicas- Le dije sintiendome algo desanimado.

-Wow. ¿y que es lo que buscas en las chicas?-Me preguntó Tony.