Sentada en la puerta que da al patio de mi casa en una noche tibia de marzo mirando las estrellas soñando a veces dormida otras despierta, esperando que por un milagro apareciera una leve luz a lo lejos.
Pero hasta ahora, a mis 15 años todavia no tenia la suerte de ver una estrella fugaz, solo en la television o en revistas, todavia no con mis ojos.
Mañana sera otra noche...