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Terminaron la primaria, y ella, decidió, dejar todas las cosas malas atrás.
Olvidarse de las burlas, de los recreos que pasó sola, de todo, y especialmente de Federico. Queria empezar de nuevo, y creyó que lo iba a conseguir, pero que ilusa fue.
Cuando entró a la secundaria, las cosas empeoraron en la escuela, pero se había hecho amigos que no la dejaban sola nunca, que estaban siempre para ella al igual que ella estaba para ellos.
Y gracias a eso, el primer año, no fue un año tan malo dentro de todo.
Ese año, conoció a dos chicos.
El primero, fue Alex.
Un chico divertido y simpático, del que ella creía se había hecho muy amiga, pero de eso voy a hablar después.
Y el segundo fue Matías.
Se conocieron en un grupo al que ella asistía desde hace un par de años.
El era el chico nuevo del grupo, y desde el primer momento, hubo algo en el, que a ella le llamo la atención.
Su sonrisa, su carisma, y la forma en la que parecía quererla.
Todo fue lindo desde un principio entre ellos dos.
Empezaron hablando como amigos.
Y de apoco las cosas se volvieron un poco más "serias".
Un día, en uno de los encuentros de su grupo, estaban viendo una película, cuando de repente, sus manos se encontraron, y de a poco, y con mucha timidez, se tomaron de las manos por primera vez.
En realidad fue una tontería, pero para los 13 años que ella tenía, era como tocar el cielo con las manos, nunca había sentido algo así.
Después de eso, hablaron mucho, y el la invito a tomar un helado.
Fue una tarde maravillosa.
Ella se divirtió mucho.
Nunca había disfrutado tanto un helado como lo hizo esa tarde.
Al poco tiempo, hablando, el le pidió que sea su novia, y ella, por más que se moría de ganas de ser su novia, le dijo que no, y dijo lo más bobo que había dicho en su vida... "mis papas no me dejan".
Después de decir eso, se sintió la persona más estúpida del mundo, y no lo dijo por poner excusas, lo peor, es que lo dijo de verdad.
Habría deseado haber dicho cualquier otra cosa, pero en su inocencia no se dio cuenta.
Ella, creyó que el se iba a ir, que ya no iban a hablar más, pero no, el, le dijo que la iba a esperar. Y ese fue el error de Juana, creerle, creer que el iba a esperarla, pero que ilusa fue.
Ellos siguieron hablando como siempre.
Pero poco tiempo después, hablando con el, el le contó que estaba mal porque había que terminado con la novia.
En ese momento, el corazón de Juanita, se partió en dos.
Pero por más que quiso, no pudo decir nada, sólo se limitó a darle consejos y decirle que todo iba a estar bien. El no se imaginaba, que Juana, estaba a punto de llorar.
Pero por más que quiso llorar, no lo hizo, y no porque no quisiera, si no, porque no le salía el llanto, sólo era ese incómodo nudo en la garganta.
Juana, como una tonta, creyó, que ahora si iba a tener oportunidad.
Como siempre, ella era una niña ilusa.
Volvieron a hablar, parecía que todo iba a volver a ser como antes, pero se equivocó, al poco tiempo se llevó una sorpresa nada agradable.
Descubrió que su "mejor amiga" Martina se estaba hablando con el desde hace un tiempo.
Juana estaba muy triste y enojada, no entendía como Martina, su amiga desde 3° grado, podía haberle hecho eso sabiendo cuanto le gustaba Matías. Y no entendia, porque Matías se comportaba asi.
Nuevamente, sintió ese horrible nudo en la garganta pero no era llanto, esta vez, era rabia, mucha rabia.
Estaba muy enojada, no quería volver a verlos nunca.
Y ahí, es cuando entra Alex, el era el payaso del curso, siempre hacía chistes, era tan gracioso y simpatico.
El se acercó a ella junto con Caro, le preguntaron que le pasaba, y la defendieron.
Ella no hablaba mucho con Caro, pero comenzó a hablar mucho con Alex.
Ella creyo que quiza, Alex estaba interesado en ella, pero fue un error.
El solo se acercaba a ella cuando habia tarea, o exámenes, o algo  hacer para la escuela, ella lo ayudaba, el obtenía una buena nota, y despues, desaparecía.
Era como si ella solo fuera su amiga cuando habia tarea, pero Juana en ese momento, no se dio cuenta, lo noto al siguiente año, cuando el ya no estaba en la escuela.
En realidad, eso no significo mucho para ella, en realidad, no le gustaba mucho. Era una pequeña atracción pero hasta ahí.
Ese año, termino mal, el bullying, hizo que Juana, comenzara con problemas de anorexia.
Su madre se dio cuenta, e intento ayudarla, y lo logro, por un tiempo.

El amor es  idiotasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora