Una historia de un grupo de amigas que cambia a otro lugar un poco más grandes. Sucesos extraños ocurrirán en sus vidas. Y más de una pelea entre ellas. ¿Volverán a estar unidas?
Podría ser o empezar por "Erase una vez" pero esto no empieza así. No es un cuento de hadas.
Todo ocurrió en una casa de pueblo. Bastante rústica por fuera y por dentro. Esta casa era bastante pequeña pero acogedora. Era de dos pisos. En su planta más alta, dos habitaciones y un baño, y en la planta baja el salón o sala de estar, una cocina comedor y el baño. Su pasillo principal daba a esas tres habitaciones y las escaleras.
En sus exteriores había un pequeño patio que daba a la entrada de casa y la salida, en está casa se salia por la puerta del patio.
Allí residía un matrimonio desde casí 32 años. Pues sobre los 27 años la mujer tuvo un embarazo pero no un embarazo de solo un bebé como solía ser en casi todos los matrimonios. Pues el anuncio de que no era un solo bebé le dieron bastantes emociones a los dos. Pensando nombres llegaron a la conclusión de esperar a saber su género. Y después de tanto esperar. Llegaron a saber que en el vientre de aquella mujer albergaba dos pequeñas mellizas. De nombres elegidos Alisa y Alisson. Pero después de aquellos momentos tan felices ocurrió una desgracia.
Pero esto no empieza desde ahí, desde el nacimiento de estas mellizas en el 7 de agosto en 2001.
Esto empieza en un pueblo justo en 2016. En un pueblo de Cáceres. Bastante pequeño para los que eran de ciudad. En aquel pueblo había un grupo de amigas singular. Pues en aquel pueblo no había mucha gente nada más que 325 habitantes. De esos habitantes había más hombres que mujeres. Pero casi todos los habitantes eran ancianos. Había poca juventud en aquel pueblo.
Las únicas jóvenes que quedaban en aquel lugar decidieron en grupo irse a vivir aun gran ciudad donde la juventud abundaba, pero los crímenes y muertes acechaban.
Tras tantas vueltas las chicas decidieron dar sus respuestas. Que a todas ellas era afirmativas de irse a vivir a Madrid.
Alisa no era una respuesta afirmativa ni negativa. Ella decidió ir con ellas para estar al lado de su única familia.
Pero su hermana, tras la muerte de sus padres en aquel accidente en su viaje a Sevilla por cuestiones de negocios con su empresa, Alisson no fue la misma. Carlos su ex novio rompió con ella por su estado frío y despreocupado. El creía que el amor de ella hacia él, había muerto por completo aunque los primeros días comprendio su estado, los meses pasaron y su relación había cavado fondo. Tras aquel accidente Alisson no era la niñita alegre y extrovertida de siempre, se había esfumado por completo. Más esa ruptura nunca le había afectado. Aunque Carlos siempre la hubiese hecho feliz. Pero impidio esos sentimientos y no volvio a verle jamás.
Por parte sus tres amigas lo tenían claro, sobretodo la chica de cabello rosado de ojos celestes, su novio Alex estaba en el lugar donde vivirián por unos meses. Ella tenía bastantes ganas de besar sus labios y abrazarlo de nuevo.
Por parte la morena vería de nuevo a su padre, por cuestiones familiares que ella no nos quiso dar, sus padres se habían divorciado.
Y al contrario Katia la pequeña pelirroja de ojos verdosos quería estar con ellas. Todas eran inseparables. Eran una familia a pesar de las peleas que a veces surgían.
El verano transcurría rápido, todas listas y tenían todo lo que llevarían a su destino.
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Yo me estaba preparando para hoy. En esta ocasión llevaba una falda vaquera de un azul grisáceo, un top azul y blanco el cual enseñaba el ombligo y el pirsing que este llevaba.
Mi hermana Alisson iba con unos vaqueros cortos y una camiseta negra con una marca "Mägo De Oz" uno de sus grupos favoritos de rock. Las dos llevababamos unas sandalias negras a juego.
Solía tardar bastante en arreglarme. Primero la ropa tardaba aproximadamente 10 minutos en elegir y luego 5 minutos para vestirme. Aunque como mi hermana decía tardaba como media hora para vestirme. Esta vez tarde menos por que ya había elegido el día anterior.
- ¡Liah nos vamos!--decía la menor que en la entrada esperaba cansada de esperarla.
Tuve que peinarme lo más rápido que pude. Claro que rápido era quedar bien peinada no como hacia ella de pasarse el peine y ya. Baje rápido por los gritos de mi hermana o mas bien sus quejas de siempre.
- Ya estoy quejosa-decía con un gran suspiro.
- Vamos eres una tardona --decía Ali reprochando.
Alisa la miro con las mejillas infladas haciendo pucheros como un bebé.
- Si, si vamos enana -decía la rubia burlandose de sus reproches infantiles.
Las mellizas salieron de casa, yo tome mi móvil y marque el número de Neli mientras montaba en el coche. Ali por su parte se sentó en el asiento del conductor y puso las llaves del coche para encender el motor.
Cuando al fin Nelia contesto alce la voz sin gritar y le dije un "¡Buenos Días!"
- ¡Buenos días! -contestaron a unisono las chicas.
- Buenos días Alisa -dijo la voz de un hombre tras el móvil de Nelia.
- Buenos días chicas y Richard- decía Ali bastante concentrada.
- ¡Ricardo!-dije alzando un poco la voz.
- Luego dices por que me burlo de ti enana-decía burlón.
- Calla gigante.
- ¿Ya salieron? -intervinió Katia.
- Si ¿y vosotros? -dijo Ali.
- También. Nos vemos allí.
- Si. Adiós chicas y cosa humana.
- Adiós pitufo sin remedio.
- Ca...-colgó Nelia.
Aunque tardamos mucho en llegar me pude poner a pensar en todo lo pasado. La muerte de mis padres, como conocí a mi ex novio Lautaro y como las conocí a ellas. Paso tanto desde esas cosas. Solo 1 año desde la muerte de mis padres, 3 años desde que rompí con Lautaro y 6 años desde que conocí a las chicas. Todas las cosas que habían pasado y más.
Cuando conocí a Ricardo y Sebastian ambos eran mellizos. Y bueno en verdad ellos me trataban como su hermana menor puesto que en verdad ellos eran mis hermanos por parte de padre. Mi padre había quedado embarazada a una joven por error. Nosotras eramos menores que ellos por 2 años. Mi madre al respecto de ello los cuido a esos dos revoltosos junto a nosotras.
Con tantas vueltas en mi cabeza cerré mis ojos lentamente y apoyada en la ventana me dormí en un profundo sueño.