Capitulo LI

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Con delicados y lentos pasos ella subía la escalera con una bandeja en sus manos, en la cual llevaba el desayuno para dos personas, abrió la puerta de la habitación con el pie, ya que sus manos estaban ocupada, Kendall la miro y se acomodo bien en la cama, preparado para disfrutar un rico desayuno con __________.

-Ya esta - le dijo ella depositando la bandeja en la cama, Kendall se movió un poco haciendo un espacio en la cama.
-Siéntate - le ordeno y ella obedeció tímida.


Juntos comieron entre risas y conversas, en una ocasión Kendall le dio un bocado en la boca a _________ lo que hizo que esta agachará su cabeza avergonzada. Sintió como unos dedos de posaron en su mentón, obviamente eran los dedos de Kendall, quien levanto su rostro y deposito un hermoso y tierno besos en sus labios, __________ sabía que en algún momento iba a pasar de nuevo y ahora estaba pasando.
Los labios de Kendall eran suaves y esponjosos, si ella pudiera los besaría hasta que el mundo se acabe, pero eso era completamente imposible. Agradeció que la bandeja ya la hubieran puesto en un mueble porque o si no, ya estaría todo desparramado en la cama.
El beso que comenzó tierno, ahora se estaba convirtiendo más pasional, solo se dejaban llevar por lo que sentían.
  Kendall la tendió en la cama quedando el encima de ella, siempre procurando no aplastarla. Hace mucho tiempo que no besaba a una mujer como lo estaba haciendo ahora.

-Ke...Kendall - susurró ________ entre sus labios, sabía que si no detenía aquello, podrían pasar a una etapa mucho mas sería, y ella no estaba segura de hacerlo - Ken...dall - este la miro a los ojos como diciendo "Que" - creo que estamos yendo muy rápido.
-Perdón - esté se paró de la cama, tendiendo una mano a _________ para ayudarla a levantarse, ella acepto.
-No tienes porque disculparte....fue algo de los dos.
-Tienes razón....espero no haberte pegado el resfriado - ella sonrió, negando con su cabeza, se estaba preocupando de ella y era, muy hermoso su gesto protector.
-Bueno me tengo que ir, deberías de acostarte, aquí parado dudo que te puedas sanar - le recomendó ella.
-Eso haré

Solo soy una empleada (Kendall Schmidt y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora