Seres de luz

TRISTEZA Y SOLEDAD

Tristeza y soledad

-Así que todos pensaban traicionar a su Jerarca – dijo Kek frente a todos los miembros del concejo.- me extraña de ti Fuyitaka, creí que eras uno de mis mas leales concejeros.

-No podría ser leal a alguien que asesinó a su propio hermano, para tomar un trono que no le corresponde.

-Acecinar es una palabra muy fuerte, digamos que simplemente, le quite una responsabilidad para la que no estaba preparado. – rió burlonamente- además por lo que veo ustedes ya lo encontraron o me equivoco.

Se dirigió a Nadeshiko y la tomo por el mentón y la miro fijamente a los ojos

-No encontraras nada en mi – le dijo ella –

-Entonces es porque aun no lo encuentras. Eso quiere decir que yo aun puedo apoderarme de el- dijo en tono triunfante.

-No podrás encontrarlo tan fácilmente.

-No? no lo haré solo, lo lograre con tu ayuda – dijo mientras la soltaba – permítanme mostrarles algo que me llena de orgullo haber encontrado y restaurado. Tráiganla – Ordeno

A donde ellos se encontraban se dirigieron dos entes vestidos con túnicas negras, se colocaron en el centro de la caverna mientras pronunciaban un conjuro y el lugar se lleno de neblina haciendo imposible distinguir nada.

-Eriol no puedo ver nada

-Cállate o nos van a descubrir

-Ese es Kek, su energía es muy grande y su aura es es…

-Siniestra – dijo Eriol preocupado

Cuando la niebla se disipo, en el centro de la cueva apareció una jaula, no parecía muy resistente, estaba hecha de trozos madera, pero hacia ver que en ella se encontraba mucha energía acumulada, como si tuviera vida propia.

-La jaula de los augurios – dijo el anciano – como has sido capaz de restaurarla, Argus la hizo mil pedazos.

-Ves mi querido Magnus, mi hermano no era tan fuerte como ustedes creían, y no solo la restaure sino que digamos que le agregue ciertos atributos. – Kek empezó a pasearse entre todos - Nosotros somos seres inmortales, poderosos, podemos gobernar el universo sin ninguna dificultad, pero ustedes se han empeñado en ayudar a los débiles y patéticos, humanos, seres incapaces de hacer algo por si solos.

-sabes Eriol talvez el no este tan equivocado – dijo Sakura – nunca le he visto mucha lógica a que tengamos que ayudar a los humanos.

-No sabes lo que dices. El mato a su hermano para apoderarse de un trono que no le pertenece. Eso no es nada bueno. - le dijo en tono de reproche

-Saben voy a ser condecentes con ustedes, no voy a encerrar a nadie en esa jaula, si terminan de una vez con esta absurda rebelión, - dijo en tono autoritario, dirigió su mirada a Toya que lo veía con furia – talvez deba acabar con ustedes e iniciar todo con una nueva generación, los jóvenes son mas fáciles de convencer.

-Nunca - dijo Fuyitaka – tú no mereces ocupar el lugar que tienes. Debe ser Argus el que lo haga

-Pues el no esta aquí y por el momento el trabajo es mió – le dirigió una mirada desafiante -

-No. Tu reinado llega hasta el día de hoy – dijo Fuyitaka mientras hacia un conjuro u juntaba sus manos para invocar una espada la cual puso en el cuello de Kek

-Por favor no seas tonto sabes que no puedes matarme con eso.

-Probemos que pasaría si lo hago luego de encerrarte a ti en la jaula de los augurios.