Recuerdo que el día había terminado y me encontraba sola en mi pupitre, mi mente estaba en blanco y me esforzaba en recordar lo que paso, quizá tenga amnesia (pero todavía recuerdo como me llamo), de repente oigo el sonido del timbre que anuncia que las clases ya habían terminado.
Ahora que recuerdo, me había quedado dormida en clases de matemática y no porque estaba aburrida, sino porque estaba muy cansada debido a que la noche anterior no había dormido nada. Así que se lo dije al profesor y me dio permiso de dormirme (que buen profesor, si demasiado bueno para ser verdad)
Pero me dijo antes de cerrar mis ojos: -Profesor: Sabes Liz como tu profesor no debería dejarte dormir en clases aún si tienes sueño o no, ya que esa es la vida de un estudiante, pero ya que tu eres la segunda mejor en esta clase, te puedo dar ese capricho solo por ahora...
-Lo último que dijo mi profesor fue algo acerca de como era su vida de estudiante, pero en ese momento ya estaba en mi mundo. Pero ahora que estoy despierta y no hay nadie, es muy extraño ya que el timbre sonó después que me despertara así que, mis compañeros deberían estar aquí todavía. Y con esta jaqueca que tengo no soluciona para nada la situación...
Me levanto y salgo de mi salón en busca de la salida, me costó pasar en medio de tanta multitud de alumnos que había antes de la salida, pero por fin logre pasar (¡hurra!) pero había algo que me incomodaba y era el hecho de que no encontraba a ningún compañero de mi clase y ahora que lo pienso habían muchos estudiantes que me miraban como una extraña.
No le preste atención así que, seguí caminando hacia el autobús que me llevaría a casa pero me fije en algo que había en la pared, por un instante pensé que era una broma de mal gusto (ojalá hubiera sido eso) me empezó a doler la cabeza y me derrumbe en el pavimento y antes de desmayarme al fin pude recordar lo que aconteció ese día y solo sentí que me derrumbe...
...el resto es historia.2 Semanas antes
Era un día soleado como ningún otro, recuerdo que fue ayer navidad pero de la nada llegó el verano y con el trajo muchos turistas ansiosos por visitar las playas. Y entre esos turistas estaban los alumnos "ansiosos" (noten el sarcasmo) de la clase 2-B. Recuerdo que el año pasado fuimos a un bosque, pero esta vez era turno de ir a la playa, aunque estábamos en vacaciones todavía teníamos "clases" ya que este viaje valía la mitad de puntos en el período. Mientras me seguía quejando de mi desdicha en el autobús rumbo a una playa como cualquier otra, mis compañeros estaban hablando:
-Lucy: ¿Trajiste los fuegos artificiales Julio? -Julio: ¡Baja la voz Lucy! No ves que el profesor se dará cuenta. -Profesor: ¿de qué me daré cuenta? -Oscar: ¡De lo mucho que lo queremos profesor! -Todos nosotros en ese momento: -Eso ni tu te lo crees. -Profesor: ... -Nosotros: ... -Profesor: sigan en lo suyo...
-Después de esa incómoda escena todos siguieron en lo suyo y yo continuaba hundida en mis pensamientos, pensaba que Lucy, la chica más popular de la clase atraería demasiado la atención con su traje de baño (que envidia...), también estaba Julio, el rebelde del salón que había hecho hasta lo imposible para conseguir los fuegos artificiales sin que nadie se diera cuenta, pero quizá se le escapó Lucy y media clase, él era malo ocultando cosas
Y por último estaba Oscar, que por cierto era el que había dicho que todos queríamos al profesor, a primera instancia parece que es alguien distraído, pero las apariencias engañan (o eso me han dicho) ya que en realidad Oscar era el más inteligente de nuestra clase. Pensaba que el actuaba como estúpido a propósito para que su inteligencia pasará desapercibida, pero eso era inevitable.
Después de tantas reflexiones existenciales (que intenso), el autobús por fin había llegado a su destino. Así que comenzamos a desempacar y nos dirigimos a un hotel cerca de la playa (como era de esperarse era el hotel más "económico").
Como llegamos de noche no pasamos por la playa, así que nos quedamos en el hotel y tratamos de divertirnos un poco y aprovechar al máximo estos tres días y cuatro noches que pasaremos en esta playa como cualquier otra, aunque deseaba que algo fuera de lo común pasara...
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Historias Cortas
Short StoryCada uno de nosotros tiene sus propias historias, algunas reales y otras no tanto. Pero responde esto: ¿dejarías de disfrutar una historia sabiendo que es falsa? o tal vez ¿no te gustaría por el simple hecho de ser una historia real?. A continuación...