¡Adios operación rescate!

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Hace ocho horas estaba frente a un espejo, mientras mi hermana, Thalia, me cepillaba el pelo.

Cuando era pequeña, siempre me lo cepillaba, así que cuando vino y me lo pidió, me entro una gran añoranza.

-Ya esta-dijo Thalia.

Movi mi cabeza frente al espejo para ver como quedo.

-Acaba de recoger todo, te esperamos abajo-dijo lleno hacia la puerta.

-Espera-le dije.

Me levante y la abrace, Thalia se sorprendió. Pero yo lo necesitaba, mi vida a dado un cambio muy drástico. Empezando por volver a tener a Thalia conmigo, luego irme a vivir con mis tíos, que no veía desde hace años, y por ultimo empece por primera vez en mi vida el colegio, o mejor dicho, una cárcel con libros. No me malinterpretéis, no es nada malo, al contrario, fue a mejor, pero un cambio muy fuerte para mi gusto.

-Thalia, intenta que no te pase nada.

-Sky, querida hermanita, ¿te acuerdas de quien es la hermana mayor?

-Thalia, en serio, no te quiero volver a perder.

-Te prometo que volveremos aqui las dos, y veremos El Señor de los Anillos, las veces que te de la gana.

Sonreí ante la mención de mi película favorita. Salir de la habitación y cuando oí que bajaba las escaleras, me asome por la puerta y grite:

-Te tomo la palabra, ¡luego no intentes escaquearte!

Oí como se reía y dijo:

-Ya veremos.



Ahora me encontraba en el coche de Sally Jackson, sentada en la parte trasera. En el asiento de delante, Thalia, limpio los cristales empañados del coche y dijo:

-¡Uf! Esto promete ser divertido.

Le di la razón. Westover Hall parecía un castillo maldito.

-¿Seguro que no quieres que os espere?- preguntó Sally.

-No, gracias, mamá. No sé cuánto tiempo nos va a llevar esto. Pero no te preocupes por nosotros.-respondió Percy.

-Claro que me preocupo. ¿Y como pensáis volver?

Obviamente mi mejor amiga, listilla, salvo la situación.

-Todo irá bien-terció con una sonrisa Annabeth-. Nosotros nos encargaremos de mantenerlo a salvo.

-Muy bien, ¿tenéis todo lo que necesitáis?

-Sí, señora Jackson-respondió Thals-. Y gracias por el viaje.


Salimos del coche, después de que la señora Jackson pasara lista por si teníamos todo.

-Tu madre es estupenda, Percy-dijo Thalia en cuanto el coche se perdió de vista.

-Pse, bastante pasable-reconocio-. ¿Que me dice de ti? ¿Tú estás en contacto con tu madre? 

Oh, oh, problemas.

Thalia le dedico una inmejorable mirada fulminante, como se le iban a dar mal con toda esa ropa punk que lleva-chaqueta del éjercito rota, pantalones de cuero negro, cadenas plateadas- y, sobre todo, esos ojos azules, iguales a los míos, la única cosa en que fisicamente nos parecemos.

-Eso no es asunto tuyo, Percy...

Por Hades, yo le había contado a Percy que nos habíamos escapado de casa, y desde ese momento no sabia nada de mi madre, pero se me olvido decirle que estaba muerta.

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⏰ Última actualización: Jul 21, 2018 ⏰

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Skylar Grace y la maldición del titánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora