¿Alguna vez te has preguntado como se conocieron tus padres?
Camus un tímido y estudioso chico francés que recién se ha mudado a Grecia conoce por accidente a Milo, quien sin saberlo se convertirá en el amor de su vida.
Basado en la película "Saint...
-¿te gustaría ir al cine esta noche?...entonces pasare por ti a tu casa- hablaba un joven peliverde al teléfono, después de colgar la llamada miro por la ventana hacia la calle, -¡papá! ¿Y el auto?-
-se lo preste a tu hermano, salió con sus amigos- respondió un hombre que se encontraba leyendo un libro sobre el sofá de la sala
<porque justo hoy> pensó el chico -¿y va a volver hoy?... ya sabes, me refiero a que si no va a ser uno de esos días en los que regresa a las cuatro de la mañana-
-esta vez prometió volver temprano, ¿Por qué preguntas? ¿Saldrás a algún lugar?-
-pues tenía planeado ir al cine con... - el joven pensó un momento antes de continuar –...una amiga-
-una "amiga" ehh- respondió el padre con una ligera sonrisa –podrías esperar a que llegue tu madre y pedirle que te lleve-
- ¿Qué me lleve...mamá?- dijo el chico con un gesto de disgusto, es cierto que su madre era una mujer diferente y a muchos de sus amigos les agradaba su forma de ser, pero no lo llevaba a ningún lugar desde que había dejado de ser un niño pequeño, a él ya no le gustaba ir acompañado de "mami", aunque no podía decirle nada al respecto porque se ofendía muy fácilmente y lo último que queria era hacer enojar a su madre; eso trajo a su mente una pregunta que siempre había tenido ¿cómo es que su padre y su madre habían terminado juntos? Si eran tan diferentes, ella es orgullosa, jactanciosa, imprudente e impulsiva, mientras que su padre es "calmado" por decirlo de alguna forma, aunque algunos dicen que es un hielo sin emociones.
Siempre había querido preguntárselo, aunque nunca se había dado la oportunidad, tal vez este era el momento, ya que estaban solos y no tenía nada que hacer -papá ¿puedo preguntarte algo?-
-por supuesto-
-¿Cómo te enamoraste de mamá?-
-pues yo... es una larga historia-
-tengo tiempo- dijo el joven sentándose al lado de su padre; al ver que su hijo no lo dejaría terminar de leer hasta que le contara todo, opto por cerrar el libro y dejarlo sobre la mesita de centro.
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Todo comenzó una tarde de verano, él era un joven esbelto, de piel muy blanca, cabello color verde viridian y ojos de color violeta, se había mudado junto con sus padres desde Francia hacía una semana, estaba sentado en la orilla de su cama admirando una fotografía que tenía de él junto a su querido amigo Surt, cuando su madre Serafina se asomó por la puerta abierta de su habitación
–hijo, desde que nos mudamos te pasas todo el tiempo encerrado en esta casa, ¿Por qué no sales a divertirte un poco? A unas calles de aquí hay un parque, sería bueno que fueras así podrías conocer a los chicos de la colonia-
<tal vez mi madre tenga razón, salir a caminar me vendría bien y me ayudaría a despejar mi mente> pensó el joven. Mientras caminaba por la calle al doblar una esquina, no vio venir a una chica pelirroja en su patineta y ambos chocaron cayendo al suelo –fíjate por dónde caminas- dijo ella molesta
