a fan |m.c|

11

Me tocaba a mí.
No doy más de los nervios asique me largué a llorar sin haberlos visto todavía, que ridícula soy a veces.

Entré y ellos se giraron a mí y me sonrieron. Me quede en shock y me largue a llorar más fuerte, fui caminando hacia ellos despacio hasta que todos me abrazaron. No lo podía creer, si esto es un sueño por favor que nadie me despierte porque por fin me sentía en mi hogar por primera vez.

Nos separamos y yo lo único que hice fue mirar a cada uno de ellos hasta que me detuve en Michael. Fui hacia él y lo abracé con todas mis fuerzas a lo que Mike me correspondió.

Nunca me sentí tan bien, sentí que estaba abrazando a mi mundo. Era sólo él y yo en ese momento.

-Te amo muchísimo, sos lo mejor que me pasó en mi miserable vida. - Dije y por primera vez no a un póster, ni a la pared, sino que a la verdadera persona que me hace tan feliz.

-Yo también te amo. -Me dijo Mike y me sonrió. -No llores nena, ¿quieres?. Está todo bien.

Asentí y me limpié las lágrimas, después de eso le entregué mi carta. Él la tomó y me miró. -Gracias, la leeré en cuanto pueda.