Eros [BTS]

#3 [Namjin]

(Jin es el top en este caso)

Hoseok fue el primero en salir dando saltos de la habitación donde habían estado grabando el regalo especial de 1 hora que todos los años hacían para ARMY por el aniversario del debut. Jungkook y Taehyung lo siguieron de cerca. Jin fue detrás de ellos, luego Yoongi y Jimin que comenzaron a susurrar mientras Namjoon los observaba siendo el último en la fila.

Yoongi y Jimin doblaron por un pasillo alejándose del resto y el líder lo encontró extraño antes de recordar que tenían una presentación en conjunto en la cual trabajar. No pudo evitar sonreír al imaginar la sorpresa que se llevaría ARMY y esperaba que le dieran mucho amor a Jimin porque sabía que él podía ser muy inseguro y duro consigo mismo si no salía perfecto.

Observó a Jin disminuir la velocidad de sus pasos y entrar al baño. Esperó que el trío que iba delante de ellos doblaran por el pasillo siguiente y aprovechó que ningún miembro del staff los seguía para entrar al baño detrás de él.

- Hyung... - habló después de que la puerta se cerrara.

- Hey. - fue lo único que dijo Jin sin dejar de mirarse al espejo y lavarse las manos.

Namjoon caminó hasta detenerse de pie a su lado y descansó la cadera en la superficie de cerámica gris con diminutas piedras negras y blancas.

- ¿Qué harás ahora? - preguntó dejando vagar sus ojos por el rostro del rubio.

- Nada. - se limitó a contestar.

Namjoon suspiró cruzándose de brazos.

- ¿Sigues enojado conmigo?

Jin cerró la canilla para que el agua dejara de correr y sacudió sus manos haciendo que gotas salieran despedidas por todas partes.

- Ya dije que lo siento. - suspiró el peliverde.

- No quiero hablar contigo, no ahora. - estableció Jin y se dispuso a salir del baño.

Namjoon evitó que se fuera parándose frente a él, impidiéndole el paso.

- Lo siento, hyung. ¿Cuántas veces tengo que decirlo?

- ¿Qué te parece unas... mil millones más? - preguntó dejando que sus ojos se encontraran después haberlo estado evitando por doce horas.

- De verdad lo siento. - susurró Namjoon. - Perdí la noción del tiempo y cuando me di cuenta ya era demasiado tarde.

- ¿Por qué no me enviaste un mensaje?

- Pensé que estarías durmiendo. - respondió sincero.

- Podría haberlo leído en la mañana. No puedo creer que me hayas dejado plantado de nuevo. - resopló.

- Hyung - suspiró el menor.

- ¡Es la tercera vez en un mes! - Jin levantó la voz, exasperado. - Ni siquiera estoy pidiendo una maldita cita, sólo quiero que pasemos más de 10 minutos a solas.

- Ahora estamos solos. - Namjoon metió las manos en los bolsillos de sus pantalones y tuvo que desviar la mirada cuando la molestia en los ojos ajenos se convirtió en rabia.

Se tropezó con sus propios pies cuando Jin tomó su camiseta con un puño y lo arrastro dentro del cubículo más cercano a la pared del fondo.

Se quejó cuando su espalda golpeó con fuerza contra la pared de azulejos blancos y observó sin decir palabra cómo Jin ponía seguro a la puerta negra y se giraba a mirarlo.

- Hyung... ¿Vas a matarme?

- Lo haré si no te callas.

Los labios ajenos se estrellaron con fuerza contra los suyos y dejó escapar un gemido de dolor. Probablemente ahora tenía un corte en el interior del labio.