Amphitryon. BTS

17.

A la mañana siguiente, cuando EunJae despertó, abrazo al profesor Jeon por la espalda, disfrutando del extraño aroma que despedía el muchacho.

Sin conocer el motivo, EunJae sonrió, por primera vez en demasiado tiempo la chica podía decir que se sentía en casa. JungKook bufó cuando sintió a la joven inmiscuirse en su territorio y se giró para mirarla.

Suspiró y puso los ojos en blanco.

— ¿Por qué tan temprano? — Preguntó, sin embargo, no pudo evitar sonreír.

Enredó los dedos en el cabello de la chica y comenzó a acariciar su cabeza con cariño.

— Eres increíble, bebé.

EunJae sonrió y se acercó al joven para besarlo sutilmente en los labios.

— Buenos días, profesor. — Musitó la chica, con picardía.

JungKook acrecentó su sonrisa y abrazó a EunJae, para comenzar a besar su cuello.

— Buenos días.

Y a pesar de que ambos deseaban hacer el amor de nuevo, estaban conscientes de que no sería posible dada la situación, se encontraban en la habitación de las muchachas y presentían que JeHwa no tardaría en llegar.

Ambos, pues, decidieron ponerse de pie y comenzar con su día un tanto decepcionados.

JungKook comenzó a vestirse, mientras EunJae lo miraba desde el borde de la cama.

— ¿Cómo puede alguien ser tan hermoso? — Preguntó la chica.

JungKook negó con la cabeza y abotono sus jeans.

— Tal vez no sea humano. — Declaró sonriendo.

EunJae negó con la cabeza sin conocer la verdad detrás de aquellas palabras, tenía que admitir que estar al lado del muchacho la hacía tremendamente dichosa y que cualquier cosa que hiciera o dijera el chico, la llevarían al cielo o al infierno.

Cuando Jeon salió de la habitación, para dirigirse a la suya y alistarse para el nuevo día, se giró hasta la puerta de la chica y esbozó una sonrisa.

— Kang JeHwa, espero que hayas disfrutado tu vida. — Farfullo, al tiempo que posaba la vista en la habitación de Kim NamJoon.

(****)

Taehyung despertó inquieto, apenas había logrado dormir, pues en toda la maldita noche no le había sido posible borrarse a Hoseok de la cabeza. El beso que el mayor le había dado lo tenía demasiado aturdido, tal vez atónito. Lo peor que le podía suceder en ese momento era tener que admitir que le había gustado.

Se dio un golpe mental y negó enérgicamente con la cabeza. No eso no podía ser posible. Iba a ser un verdadero suplició tener que ver al chico durante aquel día.

Se puso de pie, de mala gana y se miró al espejo, había una pequeña mancha en su pantalón de chándal, Taehyung bufó, tener que masturbarse pensando en un hombre no era algo que le agradará demasiado.

(*****)

JeHwa se puso de pie cuidadosamente, luchando por no despertar al profesor, miró al hermoso hombre que yacía en el lecho y sonrió. Estaba enamorada de Kim NamJoon como nunca imaginó enamorarse.

Tomó su pijama y comenzó a vestirse para volver a su habitación; NamJoon se removió entre las sábanas, frunciendo el ceño aturdido por la escandalosa luz que le daba de lleno en los ojos.