final

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Unas cuantas horas habían pasado desde que Clint se había ido, el menor se encontraba preocupado paseando por la habitación con una playera de Clint por que últimamente todo le quedaba apretado por su abultado vientre, el mayor llego al rededor de las 3 de la mañana un poco ebrio y con un evidente olor a perfume femenino.
- que horas son estas de llegar Clinton… -hablo molesto el menor al rubio que se fue directamente al sofá de la habitación.- Clinton te estoy hablando! -el ya mencionado rodo los ojos suspirando pesadamente.
- y tu quien eres para cuestionarme? Te recuerdo que no eres nada mio… -el menor iba a decir algo pero eso último le dolió, mucho a decir verdad.
- ya se que no soy nada tuyo pero no lo hagas por mi, hazlo por tu hijo, él va a necesitarte cuando nazca… -el menor se dirigió a su cama y se subió para acostarse.
- ya se pietro, mi hijo me necesita, lo hará cuando por fin nos libremos de ti…-el mayor dijo aquello sin pensar y el platinado no pudo aguantar las ganas de llorar, comenzó a dejar salir sus lágrimas como si fuesen cataratas, se sentía un idiota, se comportaba como uno, si no fuese tan idiota quizá ya tendía una relación con Clint, si ambos dejasen el orgullo de lado posiblemente serian una pareja.
- y por que no te largas de una vez, eh? No te necesito para nada! Eres un estorbo nada mas igual que este bastardo! -el menor se levantó furioso llorando y se dio unas palmadas suaves en el vientre.
- quieres que me vaya? Bien! Me largo! No voy a estar soportado tus estupideces… -el menor se quedo callado mirando al mayor totalmente sorprendido, desde hacía muchísimo que no le gritaba y menos le había dicho que se iba, el miedo rápidamente lo invadió, no lo decía que enserio, solo estaba molesto, las lágrimas bajaron con mas fluidez al ver como Clint tomaba su chaqueta listo para salir.
- que mierda haces? Vas a abandonarme con este bastardo!? -grito el menor sujetando los costos de su abultado vientre a lo que el mayor se acerco molesto tomando sus muñecas con brusquedad.
- no vuelvas a llamar así a mi hijo -al menor se le llenaron los ojos de lágrimas y empujó al mayor con fuerza.
- te odio maldito imbécil! Me arrepiento cada día que pasa de haberme acostado contigo! -dijo furioso dándole al mayor una bofetada, este estuvo a punto de devolver dicho golpe pero se detuvo al ver como el menor se cubría, suspiro pesadamente y se apartó caminando a la puerta de la habitación.
- dormiré en mi habitación… cuando ambos estemos mejor hablamos… -fue lo último que dijo el mayor antes de salir de la habitación, se sentía atraído por el platinado, lo quería, él le iba a dar un hijo, lo lógico seria casarse y vivir juntos, tener mas hijos, era lo que normalmente se hacía, pero al parecer pietro no estaba nada contento con la llegada de su hijo y él pequeño iba necesitar a alguien que lo ayudara en todo, seria un difícil estar al pendiente de él niño pues su trabajo lo mantenía muy ocupado pero ya se las arreglaría, caminó hasta su habitación la cual no había pisado hace meses, se dejo caer en la cama tratando de dormir mientras en la habitación del menor vibraba su celular en el piso pues se le había caído al ponerse nuevamente la chaqueta, el Palatinado se percató de esto y se acerco tomando el aparato entre sus manos donde se leía claramente "laura" con un corazón al costado del nombre, quien era esa tal laura y por que le llamaba a su hombre, si, SU hombre! Clint era suyo llevaba a su hijo en su vientre le había entregado todo su corazón incluído y no iba a dejar que cualquier perra tomara su lugar, enojado y llevado completamente por los celos deslizó su dedo por el aparato para contestar la llamada.

-hola? -dijo tratando se que sus celos no se notaran- hola pajarito te llamo para decirte que ya arregle las cosas que me pediste para lo de la casa y me tomé la libertad de comprar una cuna para el pequeño, no te molestes, si? Es un regalito para él.- La voz de la chica sonaba dulce y amable, feliz y al parecer muy emocionada por la llegada del pequeño
- no soy Clint, él esta dormido… tu quien eres? -pregunto borde.
- oh… mi nombre es laura soy amiga de Clint… de echo sere su vecina muy pronto y probablemente la niñera -la muchacha río de manera tierna y pietro sintió su sangre hervir de rabia, esa perra no iba a cuidar a su hijo.
- oh seras nuestra vecina, niñera quizá no pues yo mismo quiero cuidar de MI hijo- trataba de hablar lo mas normal posible pero la rabia invadía su cuerpo.
- oh? Creí que Clint no estaba contigo… ya sabes… de pareja… y Clint me dijo que necesitaba ayuda con el pequeño y yo me ofrecí… me contó todo lo que pasó… tu indiferencia al bebé y esas cosas… yo no puedo tener hijos por un accidente que tuve hace mucho tiempo y en verdad quiero cuidar a uno, Clint me dio esa oportunidad… es muy gentil conmigo… me muero por tener a esa cosita en mis brazos, me imagino que será tan guapo como su padre un pequeño de ojos verdes mirando todo con curiosidad por que todo sera nuevo para él… gracias pietro… no tienes que fingir se que tu no estas muy feliz con la llegada del pequeño pero yo te prometo cuidarlo bien… nunca va a molestarte más… -la chica sonaba feliz y pietro sentía una presión en su pecho, esa perra quería a su hijo y seguramente a Clint, ellos eran suyos! Ambos.
- fingir? Yo no estoy fingiendo, no te voy a dar a mi hijo y menos a su padre por que lo amo y ambos se quedarán conmigo, somos una familia ahora… quiero casarme con él y darle muchos muchos hijos y ninguna perra como tu va a cambiarlo, entiendes? -dijo enojado y la chica soltó una risita.
- bien trate de hacerlo por las buenas… ahora escúchame, sabes de quien son los besos que Clint siempre lleva marcados? Son míos, lo que hueles en sus camisas es mi perfume -pietro volteo al montoncito de ropa sucia de Clint y se acerco tomando tembloroso una de las camisas color vino para acercarla a su nariz y inhalar, efectivamente el suave olor de un perfume femenino se encontraba en la camisa, su corazón se estrujaba con fuerza y las lágrimas se acumulaban en sus ojos, esa… perra le estaba robando a Clint… pero como te quitan algo que ni siquiera es tuyo?.
- y tu familia pronto será mia por que tu fuiste un idiota, Clint nunca va a olvidar lo que le dijiste al pequeño y ese pequeño necesita una madre y sabes quien será? Yo! Es mi bebé ahora, que crees que piense de ti el pequeño cuando entienda las cosas? Cuando sepa que le dijiste estorbo, bastardo y que incluso querias abortarlo? Te va a odiar pietro… así que solo damelo… tu puedes seguir con tu vida como lo planeas, sin… problemas con patas… -no podía creer que Clint le hubiera contando todo a esa maldita mujer, esa zorra quería quedarse con clint y también con su hijo… no iba a permitirlo de ninguna manera.
- escúchame bien tu, zorra… Clint es mio, adivina a lado de quien duerme? Del mío… yo de le daré un hijo no como tu maldita estéril, en este momento ire a meterme a la cama y haré que me haga suyo de nuevo y tu no podrás impedirlo… -no permitió que la chica le contestara y colgó apagando ese molesto aparato para salir echo una furia de la habitación dejando ahí el celular.
- Clint… -hablo suave entrando a la habitación del mayor subiendo a la cama lentamente- Clint… no puedo dormir… abrazame… -pietro podía tener un tono demasiado inocente que obligaría a cualquiera a obedecerlo- nuestro bebé quiere a su papi cerca… -se acurruco en la espalda del mayor y este se giro para abrazarlo suavemente.
- aquí estoy… -murmuró ronco haciendo que el menor escondiera su cara en su cuello inhalando profundamente.
- Clint… no me dejes…  -las manos de pietro de sujetaron del cuello de Clint acercándose a besar los entre abiertos labios de este a lo que clint no se opuso correspondiendo el beso pasando su mano por la espalda del menor para pegarlo mas a su cuerpo, todo lo que el abultado vientre ajeno le permitía, lentamente se fue levantando para acomodarse sobre el menor posando sus manos a cada lado de la cabeza de este mientras las finas manos ajenas se sujetaban de sus hombros, la ropa rápidamente comenzó a estorbar y aun que fue difícil convencer a pietro de quitarse la camiseta finalmente lo logró y pudo admirar a su hijo moviéndose en el interior de su "madre" sonriendo se acomodó entre las piernas del platinado ayudándole a colocar una almohada en su cadera para tener un mejor acceso a su entrada, ya totalmente lubricado y listo comenzó a adentrarse en él con cuidado escuchando los suaves gemidos del menor que al poco se volvieron gemidos descontrolados mientras lo embestía con fuerza tratando de ser cuidadoso, el bebé se movía con entusiasmo como si estuviera feliz, sus cuerpos se acoplaban perfectamente y aun que solo podían estar en esa posición por el embarazo del menor realmente lo disfrutaban, pietro gemía y lloriqueaba mientras el padre de su hijo se movía en su interior hasta que sintió ese líquido caliente en su intimidad llenándole por completo y fue lo único que necesito para correrse en su abultado vientre jadeando con desesperación mientras el mayor hacia lo mismo acomodándose a su lado, había tenido sexo con Clint… se sentía tan feliz de haber echo el amor con Clint, eso sentía pietro por él… amor… cerro sus ojos abrazándose a su acompañante para dormir entre sus brazos olvidando por completo esa molesta llamada anterior… no iba a permitir que esa zorra se quedara con su familia.

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⏰ Última actualización: Oct 30, 2017 ⏰

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