Green Eyes

Epílogo. (No es Carta)

Hola, mí nombre es Valeria y yo soy Green Eyes.

Erick, el chico que me ha gustado desde primer grado de primaria, ese chico de ojos azules, dientes blancos, cabello de color negro oscuro, él es amigable, inteligente y sobre todo hermoso. Él no ha cambiado nada, pero lastimosamente he sido un fantasma para él.

He intentado hablar con él, pero soy tímida, Andrés y Alejandra me dieron una idea, hacerle cartas con el seudónimo de "Green Eyes".

Después de muchas cartas le dije que quería verlo a la cara, que el supiera quién es Green Eyes, y, hoy es el día, estoy muy nerviosa, pero nada impedirá que no vea, ni siquiera mi cobardía.

Cuando llegue a la escuela lo ví jugando basquetbol con sus amigos, y, también ví a Sara cuando le dio una bofetada a Erick porque él no vendría a la fiesta de Halloween que Sara preparó.

En la escuela él no le dijo nada y se fue a su casillero, me fui detrás de él sin que lo notará, pensarán que soy una acosadora pero lo hago por amor, muchos piensan que soy la sombra de Erick, ya que siempre lo sigo pero muchos entienden mí motivo.

Volviendo al tema, Erick fue a su casillero, creó esperaba una carta mía, yo también esperaba una sonrisa al ver una carta mía, pero como ya saben, no le daría porque lo veré hoy en la noche.

7:30 Pm, no podía creerlo, salí de mí casa y fui caminando por la calle hasta llegar a la escuela, ahí vi a Sara, mí cuerpo temblaba, no sabía que hacer, el miedo me estaba comiendo viva, hasta que me habló.

—Te odio. ¡No puedo creer que Erick se haya fijado en alguien como tú! —Su miraba me escaneaba fijamente con mucho odio, y poco a poco se alejó lentamente.

Fui caminando hasta llegar a Starbucks, pero, una extraña fuerza no me permitía entrar, el miedo había vuelto a invadirme, por las razones de que quizás el no fuera, o quisiera volverme a ver en su vida, o no ser lo que él esperaba.

Suspire hondo y me llené de valor, abrí la puerta viendo a todas las personas disfrazadas, todas las miradas se posaron en mí, porque... Yo era la única con ese disfraz en el lugar, si se preguntan cuál es, es un disfraz de ángel con un antifaz, pero nos estamos desviando nuevamente.

Todo dio un giro de 185° grados, Erick estaba ahí, sentado en una mesa para dos, no traía antifaz ni una máscara de monstruo, sólo estaba ahí con un disfraz de pirata y un loro en su hombro, me armé de valor y me acerqué a la mesa, conté hasta tres internamente y solté mis palabras.

—¿Puedo sentarme contigo? —Dirigí mi mirada hacía sus hermosos ojos azules.

—Tú debes ser Green Eyes, claro que puedes sentarte. —Dijó, mientras me mostraba su sonrisa de blancos dientes— ¿Cuál es tú nombre?

—Me llamó... V-Valeria. —Con mí mano derecha lleve mí cabello detrás de mí oreja.

—¿Qué tal si empezamos de cero? Sin cartas ni nada, sólo palabras.. ¿Te quitarías el antifaz?

Asentí con la cabeza y con ayuda de ambas manos me lo quité y lo dejé encima de la mesa, no supe en que momento pasó, pero sus labios estaban sobre los míos, ese beso hizo que se avivaran mis sentidos y hubiera una explosión de mil estrellas dentro de mí.

—Hola. —Sonreí.

—Hola. —Correspondió la sonrisa.

Está historia no hubiera sido posible si no fuera por @@MinKathleen muchas gracias.