Es triste cuando al ver un mensaje tuyo, la causa de ese haya sido uno mío, saber que cada que te hablo, a ti no te importe, que yo sea una mínima influencia en tu vida.
Para mi eres como una estrella, dando su fuerte y brillante luz contra el mundo, una estrella que su luz durará algunos años. ¿Y yo? Una simple estrella ya detetiorada que su luz casi se termina, con la pequeña ilusión de que algún día llegue a ser igual que tu, pero tristemente ese día jamás llegará.
Al ver a las demás chicas, especialmente al ver a la chica de la que tú estás enamorado, me siento mal, mi sonrisa desaparece al saber que nunca podré competir contra eso, saber que si lo llegó a hacer, perdería contra ella al instante.
Intento sorprenderte, pero cada intento que hago, solo empeoro las cosas. No puedo acercarme a ti cuando tengo oportunidad, y eso realmente me pone triste, ya que me siento como una estúpida cobarde y eso me hace arder por dentro.
No puedo ver ni escuchar nada, ya que todo me recuerda a ti y solo a ti. Tu abundas en mi mente, eso es perfecto para mi, ya que eres como una fuerte droga que me aleja de mi maldita realidad por un momento, y eso lo aprecio ya que me alegras por un rato, pero en el momento en que acaba ese lindo y adictivo efecto, mi sonrisa desaparece, se esfuma completamente.
Mi amor por ti es muy fuerte y sé que me hace mal, pero no puedo controlarlo, eres una de las mejores cosas que han pasado por mi vida, ya llevo viendote y estando enamorada de ti durante algunos años, y apenas comienzo a hablerte, al menos eso me hace sentir algo mejor, ya que por fin quise conocerte un poco más.
Y pensar que comenzamos a hablar por una tontería, que loco ¿no?
Te amo querido, pero quiero que lo veas por ti mismo, sin yo tener que decirte nada.
Espero algún día poder abrazarte sin problema.
Me haces daño, y mucho, pero tú logras alejarme de la realidad; cosa que solo una persona había logrado, pero contigo es diferente, me distancias aún mas, lo cuál se siente muy bien.❤
