Capítulo 03

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Sebastián llego, tan imponente como siempre, pero sobre todo atractivo. No había ninguna mujer que le dijera que no.
Como de costumbre, llevaba un traje negro con su corbata roja. Bien peinado, alto, bronceado de envidia, ojos oscuros, un lunar debajo del labio, porque su lema era "El que quiera ver mi circo, me quiere ver a mi, por lo tanto, tengo que verme bien"
Mas de una vez tuvimos encuentros cercanos. Las noches en las que hacíamos "lluvia de ideas" para el circo, solo era una excusa para acostarnos. Extrañaré sentir sus grandes manos sobre mi cuerpo. Su boca calida que siempre recibía a la mía.
Su aroma a pino. Cualquier persona que se acueste con él es como si lo hiciera en el mismo cielo. Pero bueno, lo que fácil llega, fácil se va.
- Buenos días - saluda el moreno - Yo se que es un mal momento, pero les agradezco que hayan venido. El día de ayer, en el ultima show, un par jefes de pista de distinguidos circos se hicieron presentes. Y para su suerte, los quieren a ustedes, por separado obvio, un circo quiere a Tiff, otro a Colton, etc, etc. Pasen a mi oficina uno por uno, les daré su carta de presentación, en ella vendrá que circo los escogió, en donde y cuando los verán. Y no se les olvide, ¡sean felices! - finalizó Sebastián, se toco el saco, nos dedicó una sonrisa y volvió a su oficina.
Por un lado me alegro, siento un peso menos, pero, ¿empezar de nuevo en otro circo?,  solo ruego a Dios que no sea Neon Circus, ya sería el colmo.
Así paso la mañana, cada uno de nosotros  fue con Sebastián y daba la carta de presentación. A Carmen la escogió "Palvin Brothers", le irá muy bien.
- Sanji, ¿cuando tienes pensado ir con Sebastián? Eres el único que falta- me regaña Carlotta, la asistente y nueva amante de Sebastián.
- Un minuto - digo sacando la cajetilla de cigarros y saca uno, me lo pongo entre los labios, busco el encendedor, mierda. No lo encuentro. Le echo un vistazo rápido a la pelirroja alado mío, me fulmina con la mirada. Lo encuentro divertido de alguna forma. - Apresurate, Sebastián y yo tenemos una cita después de esto - dice mientras se cruza de brazos
- Oh, disculpame, no me perdonaría si llegan tarde a su "cita" - digo mientras prendo el cigarro.
Entro a la oficina de Sebastián, esta sentado en su escritorio leyendo unos documentos.
- ¡Sanji! Por un momento pensé que no vendrías, ¿que tanto hacías? -
- Lo de siempre, no encontraba mi encendedor - digo encojiendome de hombros. - No quiero robarle mas tiempo a tu cita -
- ¿Hablas de Carlotta?, descuida, ella sabe que eres mi favorito, affetto - dice mientras se saca la corbata
Hmm, esa corbata que tanto placer nos dio. Siento un cosquilleo recorriendo todo mi cuerpo, tranquilizate, Sanji.
- Recuerdo el primer día que llegaste, mi padre estaba aún a cargo de este lugar, yo tenía 14, mientras que tu solo eras un pequeño de 9 años, con miedo hasta de su propia sombra, pero ahora, mirate Sanji, estas irreconocible- sentencia Sebastián.

~ Affetto: Cariño, sweetheart. ~

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