13 de Junio de 2008.
-Vamos ______ -Decía mi mejor amiga Valeria- Solo una noche, nada más unas cuantas cervezas y es todo, y después nos vamos al departamento. No seas mala, di que sí, ¿sí? –Me miraba con cara de perrito y yo detestaba que hiciera eso-.
-¡Valeria! Sabes que tengo que despertarme muy temprano mañana, iré a visitar a mi abuela, recuerda que soy la única que la visita últimamente –Era inútil gastar palabras con Valeria. Fuese lo que fuese que le dijera, no entendería-.
-¡Hace mucho que no salimos juntas!, solo vamos a comer y al cine. Y todo por tus estudios –Hacía demasiadas muecas-.
-No seas así Valeria, sabes que me importa mucho terminar mis estudios, si no, ¿de qué viviré? Aparte ni sales conmigo nada más, también estás con tu novio y yo solo haciendo mal tercio allí.
-Puedes vivir de tus rentas –Sonrió-.
-¿Cuáles rentas? –Dije deteniéndome y la miré-.
-Es un decir, y salgo con ustedes porque no pienso dejarte amargada en el departamento, te saco para que te diviertas y todo eso que nunca haces –Rió-.
-Tonta, ándale, que llegaremos tarde al cine –Caminábamos por las calles de la ciudad como niñas que nunca habían salido, bueno, yo me sentía así. Al menos me divertía-.
-Wow, mira a ese chico. Es lindo –Miré hacia enfrente y él estaba junto con otros chicos, me miró y sonreía hermoso- Háblale, se nota que le gustaste.
-Vamos Valeria, si me acaba de mirar.
-Amor a primera vista corazón –Seguimos caminando y sonó de pronto mi celular-.
-¿Hola? –Dije desconociendo el número-.
-¿Sí? ¿Hablo con la señorita Rodríguez?
-Si, discúlpeme un momento –Tapé la bocina- Vale, compra los boletos, en un momento te alcanzo –Regresé a la conversación- ¿Sí, soy yo, diga?
-Soy el doctor Carter, del hospital Miracle. Lamento informarle que la señora Mary Carrizales, ha fallecido hoy por causas naturales. Tiene que venir a reconocer el cadáver e informar a sus familiares más cercanos. Mi más sentido pésame señorita –Estaba paralizada. ¿Mi abuela? Dios, hace unos cuantos momentos estaba hablando de ella y de repente… No lo puedo creer. Sin más que pensar rompí a llorar-.
-¡______! ¿Qué tienes? –Decía Valeria yendo hacia mí-.
-Mi… abuela…-La abracé- Tengo que ir al hospital –Se encontraba cercas, iría corriendo- Tengo que ir –Valeria pronunciaba varias palabras pero yo no pensaba nada más que en mi abuela Mary. La solté inmediatamente y corrí hacia la calle-.
-¡______! ¡Espera! ¡______! –Las lágrimas me cegaban la vista, volteé a la derecha y ahí estaba el chico mirándome confundido. Y cuando miré hacia atrás, Valeria grito algunas palabras. Volví mi vista hacia enfrente y fue cuando todo pasó-.
Mi vista se había nublado por mis lágrimas, y se obscureció por completo cuando sentí un gran impacto en mi cuerpo. Sentí un gran golpe en mi costado derecho y de pronto estaba en el aire, y más tarde en el suelo. Escuchaba muy a lo lejos los gritos de Valeria. Pero no entendía nada. Cada vez se hacían más y más lejanos. Hasta que todo quedó en silencio. Me levanté rápidamente y vi mi cuerpo tirado en la calle. Dios, ¿Había muerto? Estaba mirándome completamente desconcertada. ¿Qué pasó? Recordé todo muy rápido. Mi abuela. Llegó una ambulancia por mí y se llevaron mi cuerpo. Vi como lo hacían y repentinamente éste me tomó de nuevo.
No podía abrir los ojos. Quería hacerlo, pero no podía. Mis pies, mis manos, mis dedos. Todo mi cuerpo no respondía para nada. <A urgencias ¡rápido!>. Escuchaba a un hombre decir. Sentía que recorría algo cerca de mi pierna y creo que estaba perdiendo mucha sangre.
Al fin había abierto los ojos, pero todo había obscurecido completamente. A lo lejos, veía una tenue luz, y sin pensarlo dos veces caminé hacia ella.
