Gorrión apenas voló tres metros hasta pararse en un árbol. No tenía ni idea de cómo y dónde conseguir una lágrima de rosa, es decir ¿Las rosas lloran? Le parecía un tanto absurdo, pero si la Luna se lo había pedido debía de ser real. Abrió las alas otra vez y se dirigió al pueblo más cercano.
Lo primero que hizo fue buscar un arbol para pasar la noche, se decantó por un roble muy robusto y de vegetación tupida. Después empezó a buscar algo de lo que no tenía ni idea.
Llevaba dos días buscando y no sabía nada. La mayoria de la gente se alejaba al ver que sabía hablar, y los que se quedaban no le aportaban nada nuevo. Entonces escuchó una voz.
-Eh pajarito, ven un momento._ era una señora mayor muy arrugada, sentada en un banco.
-Dígame.
-Conozco una leyenda que podría ayudarte a encontrarclo que buscas. Si me ayudas, te la contaré
No parecía muy seguro. Es decir ¿Una leyenda? pero también era lo único que había descubierto.
-¿Qué es lo que quiere?
- El panadero de la tienda de en frente hace unos bollos buenísimos, pero no tengo dinero para comprar uno, y al ser tan vieja tampoco lo puedo robar, así que lo vas a hacer tú.
- ¿Sólo eso? ¿Y me ayudará?
Ella asintió. Vale, robar no le hacía mucha gracia, no estaba bien, pero era por una causa mayor.
No fue muy difícil, nadie se fija en un pájaro, y los bollos no eran muy grandes. Se coló mientras el hombre no miraba y cogió uno. La mujer se tomó su tiempo para comerse el bollo, chuparse los dedos y suspirar.
- Vale tu has cumplido tu parte. Dice la leyenda que si mantienes la estrella polar a tu derecha encontrarás un valle iluminado únicamente por la luz de las estrellas. En él crecen las rosas mas hermosas que por la noche, cuando habren sus pétalos, lanzan al cielo los sueños que poblaran las noches de los niños. Si algunas rosas pueden llorar sólo pueden ser esas.
Gorrión le dio las gracias y volvió a su árbol. El día siguiente tenía un viaje muy largo.
ESTÁS LEYENDO
Sólo te pediré Cuatro Cosas
Fantasy¿Te acuerdas de cuando eras pequeño y creías en los gigantes y las hadas de los cuentos? ¿Te acuerdas de cómo sonreías al escuchar "y vivieron felices y comieron perdices"? Pues yo voy a intentar que vuelvas a creer en esas hadas y esos gigantes, po...