El Club de los Corazones Rotos {}Stranger Things.

Carta Perdida Dos.

¿El dolor que le intercalaba el corazón era más fuerte que sus poderes?

Se preguntaba Eleven todas las noches antes de cerrar sus ojos.

Era innegable los sentimientos que se iban acumulando cada día en su pecho tras pasar el tiempo. Ya no soportaba estar encerrada en aquel lugar al saber que se encontraba tan cerca de Mike Wheeler pero a la vez tan lejos...

Sí. Él era el problema, el enigma y el conflicto por el que su corazón estaba apunto de explotar.

No soportaba el hecho de verlo en su cabeza llorando o cuando la llama todas las noches, rogando por una señal de que ella estuviera bien y, el testigo de ello era luna y  las estrellas irreales  que aparecían en el cielo todas las noches.

Como en ese instante.

Eleven se encontraba tumbada en su cama, escuchando los grillos cantar y el bajo volumen del televisor que veía Hopper. Aunque lo más probable es que él ya se había dormido. Era tarde, tal vez las 11:30 para ser exactos y a pesar de eso, ella no podía dormir siquiera un poco por seguir pensando en aquel chico de cabellos rizados. De momentos se le venían a la mente ciertas ideas para poder escribirle una carta a Mike.

Durante aquellos meses que había estado viviendo con Hopper. Aprendió muchas cosas nuevas y dos de ellas fue ampliar su vocabulario y, aprender a escribir. Ahora podía escuchar a la gente hablar y entender a su conversación. Eso era demasiado genial.

Ella se paró, se dirigió al escritorio que Hopper le había traído tres semanas antes, buscó entre los cajones hojas blancas y un lápiz o bolígrafo por lo menos. Para su suerte encontró lo que necesitaba, se sentó frente al escritorio y escribió sin siquiera pensar el nombre de él...

Querido Mike:

Al principio tenía demasiadas ideas para escribir en la cabeza, sin embargo, de un momento a otro parecía que alguien se las había robado. Frunció el ceño y miró por unos cuantos instantes a las hojas en blanco donde se supondría que estarían las palabras. Enojada, agarró la hoja de papel al mismo momento de romperla y tirar los restos al suelo.

No sé que escribir, ni siquiera sé como debería empezar...

Escribió, lo leyó una y otra vez hasta que le llegó a agradar como iba su carta.

¡Mierda! No sé como debería empezar a describir lo que siento en este momento. Espera... ¿Qué es mierda? Solo lo escribo porque fue lo que más me queda y aparte porque Hopper lo dice seguido. ¿Me lo puedes explicar cuando regrese, Mike?

De acuerdo, empecemos de nuevo.

A pesar de que sé que estoy a salvo, al ansiedad de estar a tu lado me carcome mis pensamientos cada vez que pienso en ello... Un fuerte dolor se apodera de mi corazón, ¿sabes a lo que me refiero, Mike? Tan solo darme la idea de que yo sea la única que sufra entre los dos, duele.

No quisiera que ninguno de los dos olvide lo que alguna vez vivimos juntos, los momentos agradables que tenemos los dos y es por eso mismo que te pido que no me olvides...

Sí, lo que leíste.

No me olvides.

Sé que es difícil comprender lo que te pido, porque sé que tú no tienes el corazón para hacerlo. Porque estoy segura que llegué a ser tan especial en tu vida que no podrías llegar olvidarme, porque sé que me amas, porque sé que estas tan aferrado a mí como de ti y es por eso que tú también tienes insomnio todas las noches...

Estoy aquí, Mike.

Sé que no me ves, ni siquiera sabes que estoy tan cerca de ti.

Pero yo sí, porque te escuchó todas las noches y no sabes las ansias que tengo de volver a verte.

Estoy aquí, Mike.

Nunca te abandonaré, porque siempre estaré aquí para ti.

Solo te pido un poco de tiempo y pronto estaré a tu lado porque te amo...

Es una  promesa.

                                                                   - Eleven.