En Mi Defensa

La salida del cielo y la entrada al infierno

Y así lo siento, no lo puedo negar ... ambos lugares los amo, pero me siento extraña.

Debo decir que el cielo, no siempre fue el cielo para mí. 

comenzando primero, porque no fue fácil, vivir en la ciudad y vivir alquilados es lo peor, aunque  era una simple niña, llevaba la cuenta de cuantas veces me había mudado para ese entonces eran 13 veces y cambiar de colegio  era la tercera vez, pero a pesar de tantos cambios, solo uno me afectaba.

"El descontrol hormonal"

Si, desde que nací, prácticamente convulsionaba, ¡Gracias a Dios, eso cambio!

Cuando estaba en segundo grado, me decían "la mona". El motivo muy sencillo, mi cuerpo es velludo por naturaleza, a pesar de ser mujer, y eso se debe al tratamiento que llevaba para evitar las convulsiones.

Pero tenia amistades, amistades que me defendían, que me querían y eso era algo bueno, el tiempo paso y me volví tan femenina como lo era una niña en esa época.

No era la típica chica popular, pero tampoco era la Nerd, o bueno  en mi colegio, eso no se veía ... todos eramos iguales y eso lo hacia lindo, por eso la Ciudad se volvió mi cielo.

Pero toda mi familia, Materna y Paterna estaban en un pequeño pueblo de otro estado y como dicen por allí Dios tiene un plan para todos.... y aunque el mio no lo he descubierto, se que me trajo a este infierno por algún motivo...

El infierno que actualmente Amo.

Aquí todos se conocen y todos conocen a mis dos familias.

Mi llegada, fue un "boom" para mis vecinos y una alegría inmensa, para la vieja mayor "Mi amada abuela materna".

Viviríamos con ella, por lo menos hasta construir una nueva casa para nosotros.

No voy a mentir, al llegar aquí extrañaba a mis amigos... y a mi novio... en ese entonces tenia a mi primer novio, Mi Pecosito... 

Con los días me fui acostumbrando y mientras le escribiera a mis amigos  y a él, todos iba bien.

Llegar al infierno, fue darse cuenta de que no todos los chicos y adultos son buenos.

Mi forma de vestir era de una chica sexy, me sentía libre, eso lo había aprendido en la ciudad.

"Ser Gordita No Te Quita Sensualidad, Solo Hay Que Saber Mostrarla" eran las palabras de mi pecoso cada día  que me sentía insegura, él siempre me dio seguridad emocional.

Al llegar al infierno seguí mostrando esa sensualidad y usando tacones altos, para ese entonces, mi fanatismo, estaba en RBD, eran mis actores y actrices favoritos, así como mis cantantes. por lo que quise seguir siendo esa chica que era en la ciudad.

"Que Ilusos fuimos" Creímos que esta mudanza sería como las otras solo unos cuantos meses.

En mi primer día de clases, como toda chica acostumbrada a la ciudad a un colegio privado, me coloque el lazo que siempre acompañaba mi uniforme del colegio.

Al llegar allí todos me miraban extraños, y era lógico, por ser la nueva.

-Mira parece una loca con esa cinta en el cuello.

-¿Quien es ella?

-Parece una loca... y es fans de eso bichos raros de rebelde, mira su Manilla.- murmuraban varias chicas mientras  esperábamos a que abrieran el salón de clases.

Ellas creían que no se oía donde yo estaba, pero las oía, sin embargo una parte de mi era optimista, esa que  aquella misma mañana  había recibido un mensaje.

"Que tengas un hermoso día, mi angelito... no te presiones, aprende tu nuevo colegio, conoce su estructura y tus clases, los amigos los haces con el tiempo Te quiero un mundo Te Extraño. Att: Tu Pecoso" 

Ese tipo de mensajes  te hacen optimista, al entrar al salón, me encargue de hablar con el  profesor asesor, debía tener mi nuevo horario, durante la clase, varios compañeros  se me acercaron  y allí fue cuando conocí a quienes se convirtieron en mis mejores amigos. 

Y que hoy en día no importa la distancia son mis hermanos de corazón.

Al pasar la asistencia y nombrar mi apellido, de los cuales debo decir que estoy orgullosa, no he conocido a nadie  que sea la mezcla de dos distintas familias como la mía o bueno si, pero el cuenta en mi paquete porque es mi hermano menor.

La entrada al infierno se dio cuando salí de clases, pues al salir  de la institución, mis compañeros quienes ya sabían mi apellido, tomaron botellas de vidrio y comenzaron a lanzarmelas  golpeando mi espalda y piernas con ellas, donde todas  se quebraban.

Debo decir que eso no se lo deseo a nadie, los golpes de las botellas oírlas reventar contra mi cuerpo, sentir como se cortaban mis brazos con los pequeños fragmentos que rebotaban mientras intentaba cubrir mi rostro y corría cuesta abajo buscando un refugio .

-Vete, otra de tu familia  no queremos, ustedes son malos, vete  y no vuelvas más y llévate a tu familia

Un Refugio que no encontré hasta llegar a mi casa... 15 minutos de tortura corriendo, 5 cortadas  en un brazo, 1 pantalón dañado, varios cortes en la espalda y las ganas de volver a mi sito seguro, a la cuidad  al lado de mis amigos  y mi pecoso.

al llegar a casa  un mensaje me alegro  mi noche.

"¿Como te fue hoy? cuéntame tu día mi angelito"

"Al Principio, lo de siempre... ser la nueva  y ser gorda no ayuda mucho y el resto del día peor ¿y que tal tu día mi pecoso?"

"Extrañando a mi angelito, pero bien... todos te extrañamos, todos han preguntado por ti, ya te lo he dicho que seas gordita no te hace  extraterrestre, te hace  diferente, bonita y sencilla... ¿por que peor?"

"Al salir de clases me lanzaron botellas de vidrio al cuerpo, y para el único que no soy extraterrestre es para ti, también los extraño muchísimo quiero volver a casa"

"A que Lugar te han llevado tus padres mi angelito, una cosa es que te lleven con ellos por trabajo, pero a un sitio seguro, no a donde te asesinen, vuelve a la ciudad mi angelito, prometo cuidarte con mi vida"

"Me trajeron a lo que es mi pueblo natal, donde viven mis dos familias, pero por lo que viví hoy diría que es más la entrada al Infierno"

Nunca supe ni entendí el porque de ese trato tan cruel, solo eramos niños de 13 años... que los llevaría a actuar así nunca lo supe y creo que no lo sabre...Así fue como pase del cielo al infierno en menos de dos días.

ah  y para lo que quieren saber mi nombre es secreto pero ... pueden llamarme

L!z