mismile

Perdida de la sonrisa

Si la noche hubiese comenzado diferente, o si algo hubiera cambiado, tal vez la historia que estoy a punto de contarte nunca hubiese pasado. Pero aquí estamos, tu sentado leyendo mi historia, y yo buscando entre mis recuerdos, aquellas experiencias y sentimientos que la vida decidió ponerme enfrente.

Mi nombre es Serene, es el hermoso nombre que mis padres decidieron ponerme, porque era una bebe muy tranquila, según mi tía, quien cuido de mi, dice que esa tranquilidad se torno en tristeza y soledad hace unos años, y si debo de admitir que fui así por un tiempo, pero alguien sumamente especial me ayudo a superarlo. De todas formas supongo que debo contar la historia desde el comienzo y ese fue  el  día que nací, ese día  mi madre se perdió de una función de  ballet que deseaba ver,  ya estaba cambiada y lista en el auto, cuando sintió que estaba por llegar,o si una bebe muy oportuna, por suerte estaba mi padre a su lado, y salieron disparados  al hospital. Fue un parto simple, si mucho dolor, según mi madre  y en cuanto pasaron la primera noche a mi lado, decidieron "Serene" como mi nombre, porque dijeron que no llore nada y que los deje descansar tranquilos. Aunque no estoy muy segura de si fue así o del cansancio no me oyeron. Bueno en realidad, si fui una niña tranquila, y mis padres también eran despistados, así que en definitiva ambos teníamos razón. 

Mi mamá, era una bailarina de ballet, decía que el baile era  apasionante y que debía disfrutarse de todas sus formas, con ballet aprendió estructura y perfección, pero cuando mas hermosa lucia era cuando se dejaba llevar por la  música, era hay cuando jugaba con ella, y me enseñaba un poco de lo que mas amaba.  

Mi padre por otro lado era contador, el era relajado, me dejaba jugar en la lluvia, y ensuciarme con barro, recuerdo un día cuando me asuste mucho por una tormenta, y mamá no estaba, corrí hasta su cuarto y me metí entre sus brazos temblando, el me sostuvo por un rato, y luego me alzo hasta una ventana desde donde se veía la lluvia, me dijo que no temiera, que mas bien escuchara el dulce sonido del agua al caer, que las tormentas eran vida para las plantas y los animales, que era el cielo realegrando vida el mundo. Esas palabras me quedaron grabadas, y esa noche no necesite a mi osito ted para dormir sin miedo, aunque he de confesar que aun así lo abrace.

Esos años, los de mi niñez fueron realmente felices, era una niña despreocupada, y alegre. De echo todos me llamaban SMILE, o PEQUEÑA SMILE, porque encontraba cosas divertidas por doquier, bueno creo que todos los niños son así, o la mayoría de ellos. La señora Eva, la verdulera de la cuadra siempre me decía chistes o me hacia cosquillas, para escuchar mi risa. Era una señora de tes oscura, con dientes muy brillantes, y una mirada dulce, no tenia hijos, por lo que me trataba como a una, a veces me regalaba una manzana, o algún caramelo, por lo que nunca llegaba a casa limpia.

Mi escuela estaba a dos calles después de la verdulería, con mis pequeñas piernas, el camino se me hacia muy largo, era pedregoso, con casitas a los costados, y muchos faroles que alumbraban de aquí para allá. Los lunes tenia que ir vestida para mi clase de baile, mamá tenía la fe de que siguiera sus pasos en cuantito a la danza, y así fue, pero mas que por pasión, hoy día es por los recuerdos dulces que me trae a la mente.

El día que todo cambio, es curiosamente el que menos recuerdo, siempre me digo que es para mejor. Íbamos para la presentación de mi clase, conduciendo el auto de papá,  yo me encontraba mal de la panza, y no quería ir pero..... no se, supongo que a ellos les causaba emoción, y alegría ver a su bebe por primera vez en un escenario. Yo tenia un bonito tutu, y unas sandalias rosas, mi pelo claro estaba atado en un lazo que me apretaba la cabeza, mi papá estaba muy guapo, con camisa y pantalón de vestir, se había peinado, yo nunca lo veía así, era una ocasión especial, mi madre llevaba un vestido largo, violeta con tiras, y el pelo recogido en un moño, sonreía mucho , y en su mirada se notaba la emoción. Por un segundo todo parecía perfecto, tan fácil solo una salida más, pero luego  vi todo en cámara lenta, una sacudida envistió en auto, que giro sobre si, o eso creo que paso, porque arriba y abajo se confundieron, los vidrio estallaron,  mi cabeza me dolía mucho, seria por un golpe, uno muy fuerte cerca de mi.

No recuerdo mas hasta un día después, recuerdo unas enfermeras, que me  decían que todo saldría bien, mientras me acariciaban el pelo y ponían algo en mi brazo, a un lado tenia a mi tía Patrice, que lloraba desconsolada en una silla, se sostenía la cara bajo las manos y secaba sus lagrimas con un pañuelo blanco. No recuerdo mucho mas que la sala fría y grande, una sensación de dolor en la cabeza, y que todo me daba vueltas. Días después me contaron lo que paso la noticia me afecto tanto que estuve una semana en el hospital, no podía comer y no dejaba de llorar, sentía tanto miedo y dolor que debían de pincharme con algo en mi brazo para relajarme, hoy en día se que eran tranquilizantes. Mis padres murieron, fueron envestidos por otro auto, el hombre estaba ebrio, solo apareció de la nada y se llevo a quienes mas amaba, ahora puedo contarlo sin tanta pena, pero cuando era joven realmente lo odie. 

Debido a esto, cuando mi tía me llevo a su casa, con su esposo, y su hijo, aunque  me trataban bien y me cuidaban no lograba reír, ni siquiera una chiquita, tenia muchas pesadillas, no lograba dormir, ni comer, y no tenia ganas de nada. Me costaba respirar bien, y temblaba, cuando eso pasaba me decían que me calme y que tratara de respirar hondo. Habia días en los que me costaba hablar bien, y me llevaban con una señora que me hablaba y me hacia dibujar, se llamaba Jasmin, era muy buena, y me ayudo a mejorar, era mi psicóloga.  Así estuve por algún tiempo,e incluso  ahora sigue siendo difícil. Pero incluso con ayuda y amor de mis tíos, no podía mejorar mucho...... Bueno hasta ese día, el día que llego a mi vida ella, era una mmm ¿persona? bueno es que no se si decirle como tal, fue mi mejor amiga, mi pequeño ángel, quien me enseño a sonreír de nuevo.