¿Quien me conviene? (Harry, Zayn, Niall y TÚ)

Capitulo #32:

Maratón (2/3):

Un dolor punzante atravesó todo mi cuerpo, terminando en mi cabeza con mas intensidad. Intente abrir los ojos, pero se sentían muy pesados y dolorosos. ¿Que me habrían hecho? ¿Me habrían golpeado? ¿Tocado? 

Puedo jurar de que estaba sentada y amarrada de pies y manos, ya que no podía mover ninguna de las dos. Abrí los ojos, encontrándome en una inmensa oscuridad, pero podía ver algunas que otras cosas. Como una cama matrimonio, la habitación no era mugrosa, como esas en las películas cuando tenían a alguien secuestrado. Que consuelo. 

Una puerta se abrió y alguien apareció, no podía verlo muy bien, ya que la claridad que entraba por esta, me lo impedía totalmente. La figura se acerco hasta un lado de la habitación, y comenzó a abrir cortinas, haciendo que la habitación se sumergiera en una claridad enorme. Tuve que cerrar los ojos, me molestaban. 

No se por cuanto tiempo los mantuve cerrados, pero sentí como alguien pasaba sus manos por mi rostro, haciendo que un hormigueo apareciera por donde sus manos pasaban, dejándolo palpitar. 

-Eres hermosa -se escucho una voz varonil y gruesa. -Liam hizo un buen trabajo trayéndola a mi. 

Abrí los ojos de golpes y me encontré con unos ojos claros, escaneándome por completo. Me sentí intimidada y nerviosa. Las palabras no me salían y preferí que fuese así. No quería meter la pata como siempre suelo hacer. 

-Esta pequeña atraería muchas personas a mi casino -volvió a hablar el hombre, que en este caso, como no se su nombre, y ni me importaría saberlo, lo llamaremos Frank. 

-Jefe, Liam ha llegado -dijo un hombre apareciendo por la puerta. Este se voltio para verlo. Ahora lo se, no puedo hablar porque tenía algo que me tapaba la boca, puta mierda. -dile que suba. 

Me moví en el asiento pero no podía, el se dio cuenta y me mostró una dentadura perfectamente blanca, junto con una sonrisa hipnotizadora. Hay por Dios _____!!!! Que es lo que te pasa? 

-No lo intentes, no funcionara, ademas te puedes hacer daño. Estas amarrada fuertemente y con algo especial, te puedes lastimar -dijo en un tono suave, como cuando mi madre trataba de protegerme de algo. Pero en este caso es mi secuestrador, o el jefe, o Frank, se supone que algo quiere conmigo, o algo quiere de mi. Puto Louis. 

Por la puerta apareció un Liam sonriente y despreocupado. Si me levanto de aquí lo aniquilo con mis propias manos. Como me pudo hacer esto? Es mi primo, y casi mi hermano. Estoy en un completo shock. 

-Jefe, Que le parece lo que le traje? -dijo señalándome y dedicándome una mirada pervertida. 

-No me quejo, te lo agradezco. Si no fuera por ti, hubiese perdido la oportunidad de haber conocido a esta hermosa criatura. -se acerco a una silla que había cerca de mi, la jalo y la puso frente a mi, Liam se coloco al lado de este, mirándome. 

-Que piensa hacer con ella? Porque tengo miles de cosas que yo, personalmente podría hacerle. -se relamió los labios y una corriente atravesó mi columna vertebral. El quería follarme? Soy su puta prima!! Llevo su maldita sangre en mis venas. 

-Y que quieres hacerle Liam? Te recuerdo algo, ella es mía, me pertenece. Y no permitiré que la lastimes -dijo Frank. 

-No pienso lastimarla, solo algo que le gustara, perdón, nos gustara a los dos -dijo esto ultimo mirándome de arriba hacia abajo, haciendo que me estremeciera. No podía sacar eso de mi mente, mis ojos se empañaron y mis párpados temblaba. 

-Quieres follartela, Es eso verdad? -se levanto y se puso frente a este. A pesar de ser un hombre bien definido, daba miedo. Creo que no pasaba de los 30 años. -No lo conseguirás, ademas de ser tu prima, sangre de tu sangre, no permitiré que te le acerques, te conozco muy bien Liam. 

Liam apretó sus puños y su mandíbula se tensaba. De la nada apareció otro hombre. Lo reconocí inmediatamente, porque lo había visto hasta en mis sueños. Era alto, muy alto, fuerte y con tatuajes en sus brazos. Sus ojos captaron los míos y mientras se dirigía hacia Liam y Frank, no lo despegaba de mi, debo de admitir que yo tampoco pude quitar mis ojos de el. 

Era tan lindo que daba miedo. Ellos se alejaron un poco de mi, y empezaron a hablar, o mejor dicho susurrar cosas que, desde mi distancia, no podía entender mucho. Pero, el grandote que acababa de entrar, el mismo que capturo mi visión, estaba frente a mi, y por nada del mundo despegaba sus hermosos y azules ojos de mi. Es normal que te llegue a gustar uno de tus secuestradores? 

Se separaron y vinieron a donde yo estaba, formaron un pequeño semicírculo a mi alrededor, así que, tenía tres pares de ojos mirándome. 

-Que quieres hacer con ella exactamente? -dijo el grandote, que en este caso, lo llamare Steve. Frank lo miro, como pensando que decir. 

Vamos decid, hasta yo quiero saber. Soy la secuestrada mas rara que existe, porque si fuera otra, estuviera en un mar de lagrimas y suplicando que no me maten o que no me toquen. 

-Sabes, tengo algo en mente, pero aun no lo empleare, y menos con una virgen -es lo que estoy pensando? 

-Puedo ser el primero? Por mi no hay ningún problema en ser su primera vez -salto Liam. 

Empece a hablar y moverme, pero ellos no entendían lo que quería decir, ya que tenía mi boca tapada. El grandote lo noto, y le dedico una mirada a Frank para tener su aprobación de destaparme la boca. Este asintió y Steve se acerco lentamente hacia mi y me quito, lo que parecía como un pedazo de tela. 

-Que quieres decir preciosa? -me pregunto Frank. 

-Ni en un millón de años me gustaría que mi primera vez fuese con un maldito maniático como tu -me dirigí hacia Liam. Estaba furiosa, escupía fuego y tiraba rayos láser por mis ojos. 

-Vaya, que habla tiene esta chica. Me agrada -dijo Steve, lo mire desconcertada y confundida. El solo se encogió de hombro y me dedico una hermosa sonrisa. 

-No te preocupes querida, este depravado nomas tenga a acercar, ademas, no soy un tipo malo. Solo quiero darle una lección a tu hermano -explico Frank. 

-Una lección? Como así? -dije. 

-Por no poner en la mesa a su hermana, no permito que las personas apuesten con personas, y mas si son menores de edad. Así que esto le va a servir como una pequeña lección. -Creer o no creer, esa es la cuestión. 

-Debo de creerte? -lo mire interrogante. 

-Para que me creas -le hizo señas a Steve para se acercara y me desamarrara las manos y los pies.

Mientras Steve me estaba desatando, no dejaba de rozar y acariciar mis manos o mis pies, y mucho menos dejaba de darme pequeñas miradas sin que nadie lo notara. Cuando ya había terminado, las moví libremente, para que la sangre pudiera circular mejor por mis venas. 

-Entonces, tengo una duda. Que pretender hacer conmigo? -dije levantándome y cruzándome de brazos. 

-Te quedaras aquí durante un tiempo, que se le haga tortuoso a tu querido hermanito -dijo Frank. 

-No me tocaran ni me lastimaran? -era algo que tenía que preguntar. 

-Claro que no, a menos que eso quieras -esta vez fue Steve quien hablo. 

-Claro que no quiero que me toquen, y menos tu -me dirigí hacia Liam -te quiero bien lejos de mi presencia. -el rodó los ojos y me dedico una sonrisa traviesa. 

-Bien, Estas de acuerdo en que le hagamos exima tu hermanito? -concluyo Frank. 

A ver, si hago esto, posiblemente a mi madre le de un ataque y pare en el hospital de nuevo. Pero hay que verlo de esta manera, Louis no lo volverá a hacer, y se volverá completamente loco cuando no aparezca. Esto era una oportunidad que no podía dejar pasar por alto, así que madre, lo siento, pero lo haré. 

-Bien hagámoslo -dije, con una sonrisa y una mirada llena de maldad. 

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Hola!!!

Segundo capitulo del maraton, dentro de poco subo el tercero

Bye!!♥</pre>