Dos gotas de agua (Marcus Gunnarsen)

Capitulo 6

AISHA
Quisiera aprender a llevarme bien con Marcus, pero el no pone de su parte.
Después de lo qué pasó abajo, subí a la que sería mi habitación mientras esté aquí. En estos momentos extrañaba a mis padres y a mi mejor amiga Loren.
Me siento sola, triste.

- qué pasa? - dice Martinus mientras entra a mi habitación.

-Marcus !- digo en un sollozo muy bajo.

-Ya me enteré sobre el trato - suspira mientras me abraza. - de verdad que cosa tan más estúpida- pausa por unos segundos y deshace el cálido abrazo para sentarse a la orilla de la cama. - No toman en cuenta los sentimientos de los demás- concluye y sale de la habitación.

Me quede analizando lo que dijo por unos segundos, en realidad no había comprendido del todo. Quizás lo dijo por marcus y por mi.

La habitación de Marcus estaba a un lado de la mía, en la esquina y la de Martinus al lado de la de Marcus. Ya al tranquilizarme quería salir a tomar aire, aunque eso seguro me traía consecuencias.

Salí tranquilamente de mi habitación y no se escuchaba un ruido en lo absoluto, baje lentamente las escaleras para caminar por el puente mientras observaba el lago y los autos que iban pasando.

Llegue al campo de fútbol, era tarde, estaba haciendo demasiado frío y yo solo llevaba una sudadera, el lugar parecía estar solitario, iluminaban solo las grandes lámparas que ahí había.

Frote mis manos y las crucé poniéndolas en mi pecho, para agarrar un poco de calor, caminaba sin rumbo alguno y con la mirada perdida.

Un ruido me saco de mis pensamientos y observé una silueta que no estaba tan lejos de mi, me senté en una esquina de las porterías, restándole importancia a la persona que ahí se encontraba.

Mi vista comenzó a tornarse color obscura, mis ojos comenzaron a cerrarse y sentí que caí en el césped, me había quedado dormida.

MARCUS
Me encontraba en la cancha donde Tinus y yo entrenamos fútbol, estaba pensando sobre Aisha y yo. Es algo que tengo que hacer por el cariño que tengo hacia mis fans, no quiero perderlas.

Caminaba y caminaba, traía un balón en mano, el fútbol me hace olvidarme un rato de mis problemas, así que , porque no jugarlo?. Acomode la pelota para darle una patada hacia la portería, pero mire a una persona tirada en el césped. Me asusté! Quizás estaba muerta. Fui hacia ahí, y sentí que volví a respirar cuando confirmé que estaba dormida, era una mujer, traía una sudadera parecida a la de Aisha. A quien se le ocurre? estamos a -14 grados. Moví un poco su cabello que tapaba su rostro y era Aisha

QUE RAYOS HACE AQUÍ?

COMO SE LE OCURRE!

Esta podría ser una oportunidad para comenzar desde cero con ella, estaba dispuesto. La moví para despertarla, abrió los ojos lentamente y se sorprendió al verme, tenía la nariz, mejillas, labios y ojos de rojos por el frío. La abrace y bese su cabeza inconscientemente...
Oh noooooo