El joven alfa Yuri Plisetsky uno de los mejores patinadores mundialmente que tenia un caracter muy poco amigable, aun asi era deseado por muchas, pero su corazón le pertenecia desde hace 5 años a un lindo omega.. Yuuri Katsuki.
No se habia confesad...
Después del incidente de hace un momento con Víktor estoy un poco ansioso y quiero estar encerrado en casa pero... estar con yurio me agradada mas de lo que pensé, me hace sentir tranquilo y el aroma que tiene es suave, aunque es solo mi amigo siento que talvez...
—Es aquí cerdo—se detuvo el ruso frente a un restaurante un tanto lujoso
—He? tan rápido llegamos?—se veía un poco desconcertado el omega
—De que hablas? Si hemos caminado por media hora, para ti eso es rápido?
—Enserio? Vaya... —bajo la mirada avergonzado
—Oye cerdo... estas bien? desde hace un rato estas un poco raro, sucedió algo malo?—le hablo dulcemente al omega
—Que?.. ha claro! Estoy bien—levanto su cabeza de golpe—vamos a entrar tengo frío
—Está bien—lo tomo de la mano para entrar al restaurante.
Me sentía un poco nervioso ya que yurio seguía tomando mi mano, realmente no me desagrada pero me tomaba por sorpresa que lo hiciera ya que el casi siempre era demasiado reservado con la gente, sinceramente me gusta que yurio sea así conmigo.
—Vamos entra al elevador cerdo—soltó la mano del menor para tomarlo por el hombro y entrar.
—Si... —tenia las mejillas sonrojadas por la acción del alfa.
Al llegar al piso donde cenaremos me sorprendí, era muy bonito y había una vista realmente hermosa.
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—Que te parece cerdo—el rubio miro al menor con una sonrisa.
—Es realmente increible —tomo ambas manos del mayor y le sonrió con un hermoso brillo en sus ojos color chocolate.
—M-me alegra que te gustaría, vamos a pedir nuestra mesa—se había sonrojado por la hermosa expresión que habla hecho su cerdito.
Al terminar de pedir nuestra mesa que estaba cerca de ese gran ventanal tomamos asiento y esperamos a que tomaran nuestra orden.
—Que desean ordenar? —se acerco una mujer que se veía muy amable
—Yo quisiera de platillo fuerte un pelmeni de postre un blini y un te negro por favor —respondió el de ojos chocolate
—Está bien y usted joven?
—Un borsch, un cake Praga y un cafe porfavor—contesto pero no me quitaba la mirada al menor
—Entendido enseguida lo traeré—se alejo la mujer con una sonrisa
—O-oye yurio....
—Si?
—P-porque m-me miras tanto—estaba muy nervioso ya que el alfa lo mira de una manera "seductora"
—Porque?...bueno es porque.. —se levantó un poco de su asiento para acercarse al oído del chico—realmente me gustas cerdito ~—se alejo lentamente para poder admirar la cara del japonés ruborizada y los ojos abiertos de la sorpresa, y eso le provoco una sonrisa al ruso.
