Verano

Año Nuevo

Del departamento era imposible llegar a la playa. Todo estaba colapsado, demasiados autos, demasiada gente, y al caminar nos demorariamos demasiado.. Así que, decidimos subir a una micro.

Nunca había sentido tanto contacto humano, tanto calor, proveniente de nuestros cuerpos. Pequeños centimentros me separaban de el.

Un chico, ni idea su nombre, ni idea de donde era. Nunca en mi vida lo había visto. Lo único que sabía de el en el momento, era que iba a la misma fiesta de año nuevo que yo.
Pero, ¿y si núnca más lo volvía a ver? Por qué porfavor, seamos realistas, las fiestas de año nuevo son masivas, Y conoces a gente de todas partes del país, que vienen para disfrutar el inicio de año, pero nunca más las vuelves a ver.

Sentía su respiracón.. tan cerca de mi.. tan cerca que no podía evitarlo, no podía evitar verlo, observarlo, claro que intentaba hacerlo de reojo, pero era tan difícil... tan difícil dejar de ver sus largas pestañas... sus labios opacos e hidratados... su pelo castaño... su tez calida y tostada...

-¡Dana nos tenemos que bajar aquí!

Mis pensamientos fueron interrumpidos.

-Dan que te pasa, tu te tenias que fijar, tu estas más cerca de la ventana...

-Si Dana, mejor gritale al conductor que pare, o si no tendremos que caminar como mil cuadras.

Y él gritó.

-¡Señor! ¡Nosotros nos bajamos acá!

Se abrieron las puertas, me dio la pasada y bajé del bus junto con mis amigas Agustina, Fernanda, Paz, Margo y Rebeca, y el novio de Agu, Vicente, y su amigo Raimundo, Y después de nosotros bajo él, junto con tres amigos, todos altos al igual que él.

Después bajo más gente que iba en otra dirección, pero él junto a sus amigos iban caminando justo detras de nosotros.

Cuando llegamos a la fiesta, fue la última vez que lo ví.