SAPIEN MAGNUS

Capitulo 1: Testamento

Para mayor disfrute escuchen los audios aquí presentes

Era un dia lluvioso en la casa de Filibert Cloudson, ya hace dos años que no había vuelto de su viaje. -"Él tenia asuntos pendientes que no pudo resolver años atrás"- le explicaba su mujer a sus trece hijos ya adultos. Era evidente que al esperar por tanto tiempo a su marido esta se quedara con la idea que le hubiera pasado lo peor, por eso esta decide con su pequeña fortuna hacer todo lo que esta en sus manos para investigar el paradero de su esposo. 

Hasta que una noche lluviosa del mes de noviembre, alguien toca la puerta. La señor Cloudson, estaba tejiendo una pijama para un nieto que recien habia nacido, pero cual no seria su espanto, al escuchar el ruido de la puerta sonando. En su interior se hacia la una pregunta que cada vez que la repetía en su conflictiva mente solo la ponía más nerviosa: 

-¿Quien toca la puerta a las 11:30 de la noche?

Su ya debilitado cuerpo por la factura que le pasaron los años,  no podía hacer el más mínimo movimiento, pero se llenó del valor que la caracterizaba en su juventud y se dispuso a ver quien era el que tocaba la puerta. Para su suerte ya ella contaba con luz eléctrica, ya que sus hijos era los que le hacían los arreglos a su casa. Esta enciende la luz y decide ir a la puerta a preguntar:

-¿Quien es?.

Pregunto la mujer con un aire de temor pero que lo disfrazaba con valentía. No recibió respuesta, ya por los nervios, empezó a recitar los pasajes del Santo Rosario, la Oración de la Cruz y el Ángelus pero de repente, la extraña figura hablo de manera calmada y serena y con una voz que la tranquilizaba, era su abogado personal, que estaba acostumbrado a hacerle bromas. La mujer se enoja de tal manera que casi se desvanece debido a su hipertensión y diabetes.

 Su abogado en un tono burlón le replicaba a cada rato:

- Jajajaj, tu creo que el valor de tu juventud ya no es el mismo de antes menos con la culpa que cargas con el asunto de Gabrielle Anderson.

La  mujer mayor le replicó: 

-¡No quiero hablar de eso, sabes que la culpa me carcome cada día de mi existencia. 

- Ah por cierto ¿A que rayos vienes hoy? No esperes nada de mi no te voy a dar de comer

El abogado respondió: 

- Jamas. Esta casa está llena de gente indeseables y de traidores, pero exceptuando a usted ya su hijo menor, todos son ratas traidoras que se atacan por la espalda. Yo no realizo tratos con ellos, su egoísmo los hace débiles y no le llegan a los talones de lo que alguna vez fue su marido.

Continuo diciendo el abogado:

- Hablando de su marido, ese es el tema al que vengo a tratar con usted señora. ¡Su marido está muerto!

La mujer le costó por unos instantes procesar la información pero, ya después, logró captar el mensaje, y se desvaneció dándose un golpe en la cabeza con el suelo. El abogado logra hacer que la mujer reaccione, y le vuelve a dar la noticia, la mujer rompe en llanto y le reclama por el cuerpo. Pero lo recibió respuesta hasta que el abogado le dice:

- Su esposo murió por culpa de una explosión que desintegró su cuerpo su cadáver ya no existe, pero por lo menos tuvo tiempo de escribir su testamento, que por cierto yo lo tengo, pero para leerlo necesito que todos sus hijos vengan y escuchen lo que escribió su esposo. No se porque el tomo la decision que escribio en el testamento sobre su fortuna y sus terrenos pero lo que si es seguro es que si tomo esa desicion es que algo malo pasa en su familia por eso es que el testamento pide la asistencia de todos sus hijos.

La mujer entonces tomaría el teléfono rápidamente y llamó a sus hijos para que le visitaran y les menciono el testamento. Rápidamente en menos de una hora ya todos los hijos estaban presentes en la casa excepto su hijo menor que ya recién casado y con un hijo recién nacido estaba en horario nocturno como miembro de la Policía Mundial. este detalle no pasaría desapercibido por los otros hermanos quienes empezaron a criticar a sus espaldas no solo a él sino a su esposa y a su hijo recién nacido, por lo que empezaron a decir chistes ofensivos y tildandolo como el  más inútil de los trece, ya que siempre lo consideraban como su sirviente personal y el mas inservible de los hermanos.

Esto hizo enojar a la señora Clodson, ya que la esposa de su hijo menor, se había ganado su respeto debidos a que fue el primer matrimonio que no fue arreglado por motivos de dinero, y Gabrielle la desafió, y  se sorprenderia ya que esa vez fue la nica que su hijo no fue sumiso con ella y se defendió a sí mismo y a su prometida además de que la belleza de esta no tenía comparación con las demás hijas de ella y la de las esposas también.

Paso el rato y mientras se leía el testamento, todos excepto la señora Cloudson, parecian que el mismo demonio los había poseído y querían asesinar al abogado con las palabras.

Anne, una de las hermanas, replicaba a los cuatro vientos:

- ¡Maldita sea ¡Cómo es posible que el testamento diga eso si nosotros somos los mayores lo merecemos más que ese mequetrefe,  hemos hecho mas que ese mierdecilla, ademas el es un ser inferior a nosotros como es posible que el testamento diga lo contrario, no es justo, maldito seas padre, maldito seas, Hubert. Yo solo espero que disfrutes mucho tu matrimonio y a tu hijo porque vamos a hacer que ese bastardo tuyo sea aun mas inutil que tu, y ademas crees que te saldrás con la tuya eh. Bueno empieza a disfrutar mientras puedas porque haremos de tu vida y la de tu esposa y tu hijo el mismo infierno. 

Mientras tanto los hijos asustados por lo que dijo Anne pero tambien poniendo se de acuerdo, se hiban a sus respectivos hogares mientras, al señora Cloudson repetía en su mente la ultima frase que su esposo escribió en su testamento: 

- "En él está la clave del todo, no lo arruines".