No. 6 Beyond

Los días de Shion

Estaba lloviendo. La lluvia, casi parecía niebla.

Sin embargo lluvia es lluvia y esta empapaba las calles oscuras y a las personas sin sombrillas.

Antes de entrar en su casa, Shion pasó ligeramente la mano por su cabello, dejando gotear la resplandeciente melena blanca, para su sorpresa, estaba más mojado de lo que se imaginaba. El frió viento nocturno de la primavera lo recorrió desde la cabeza hasta la planta de los pies, debía calentarse pronto o podría resfriarse.

Lo sabía. Pero continuó parado frente a la puerta, incapaz de moverse. Sentía el cuerpo pesado y no quería enfrentarse a su madre aún.

La puerta trasera era de madera. La pintura se estaba desprendiendo y ya mostraba señales de antigüedad, a pesar de las muchas veces que Shion había sugerido reemplazarla, Karan siempre se negaba.

Esta está bien. Es robusta y sólida, además, ¿No crees que tiene un toque especial? Pienso que es mucho mejor que esas horribles puertas de metal.

Su madre estaba preocupada por el costo de una renovación. Pero tal vez, realmente no le importaba esa pequeña molestia; tal vez ella realmente estaba encariñada con aquella desgastada puerta de madera. Shion lo entendió, así que nunca habló de reemplazar la puerta de nuevo

Tenía razón en un sentido. La gruesa puerta de roble emanaba un ambiente que no se encontraba en las elegantes puertas de acero de colores vívidos. La perilla redonda de latón también continuaba firmemente en su lugar.

Esta puerta no ha cambiado nada desde que Shion y Karan se mudaron a Lost Town desde su residencia en Chronos (A decir verdad, habían sido exiliados, no se les dio otra opción de residencia fuera de Lost Town. Pero extrañamente ni Shion ni Karan sentían alguna clase de añoranza por esos viejos tiempos) De hecho, la casa completa había cambiado muy poco.

Más de un año había pasado desde la destrucción de la ciudad Estado No. 6. Aún reinaba la confusión, mientras tanto, todo el mundo seguía andando a tientas en la búsqueda de cómo residentes y no residentes de No. 6 podrían adaptarse a este nuevo entorno sin murallas.

Etiquetas como: "Los de adentro" y "los de afuera"  habían echado raíces y cada uno veía al otro como un extraño que hablaba un idioma distinto. "Los de adentro" se dieron cuenta de que habían sido controlados de manera hábil y rígida, por lo que apreciaron su liberación de una sociedad de vigilancia, pero al mismo tiempo, insistían en no perturbar el estilo de vida abundante y cómodo al que estaban acostumbrados. Por su parte "los de afuera" criticaron mordazmente los crímenes de No. 6, la cual había sido construida con miras hacia la prosperidad de sus habitantes, pasando por encima de "los de afuera", quienes se unieron para exigir una distribución equitativa de la riqueza y una compensación por los abusos que habían sufrido.

Actualmente, con el Comité de Reestructuración al mando, No. 6 (por supuesto, había voces que pedían un nuevo nombre para la ciudad, pero nadie podía perder el tiempo considerando nombres. También estaba el tema de las relaciones entre ciudades; por el bien de la convivencia, No. 6 todavía se llamaba de esa forma) buscaba restablecer la paz y el orden; establecer rápidamente cuerpos gubernamentales, judiciales y legislativos eficientes.

Por el momento, utilizarían las instituciones del viejo gobierno de No. 6. Designarían al Bloque Oeste como una zona especial y acelerarían el establecimiento de los sistemas de suministro esenciales para los habitantes. Construirían una fuerza de policía temporal para disolver el ejército y mantener la paz.

Había doce miembros del Comité de Reestructuración, ex residentes de No. 6 y ex representantes de cada bloque. Bajo el Comité había doce Subcomités, con un miembro del Comité al frente de cada uno.