뷔, 정국 ; Ｋｖ

001

Kim Taehyung

Un chico se posó sobre el árbol más grande de allí, clavando sus grandes ojos en un pequeño pueblo que se encontraba a millas de donde el estaba.

Él era tan hermoso como la naturaleza. Sus grandes orbes azules como el mismo cielo relajaban a mucha gente. Su tez era morena clara, y su pelo de un castaño un tanto claro y puntas verdes que relucían como el mismo Sol. No aparentaba más de diecisiete años, y tenía veinte, lo que le haría lucir siempre joven. Su altura no sobrepasaba el metro setenta, y su cuerpo se hacia de lucir tan frágil, que parecía de porcelana, y enamoraría a cualquiera.

Era el encargado y semidios de la naturaleza, vivía protegiendo a los animales, plantas, e incluso especies no definidas que nadie conocía.

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Éste agarro una rama de un árbol para procurar no caerse, y luego de observar un buen tiempo el pueblo lejano, bajo de allí pisando la húmeda tierra donde habitaban las especies mas pequeñas de animales.

Se adentró muchísimo a lo que se hacía llamar el bosque; su hogar, y comenzo extrañamente a hablar con algunas plantas de su alcanze.

— Espero que tu día haya estado de maravilla, señora

Su voz era suave y ronca, lo suficientemente tierna para causar tranquilidad.

Acarició a la planta que yacía frente a él, y se levantó retirandose de dicho lugar.

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Cerca de allí, se encontraba el lago mas hermoso que uno podîa apreciar con sus ojos, una de las primeras maravillas del mundo que nadie conocía.

Era un lago tranquilo, vida vivía en él, vida entregaba.

El agua era transparencia pura, se podían apreciar todos los cristales y corales de todos colores que uno no se podria imaginar.

En los pies, la orilla de este lago, habían tanto plantas curativas, como pasto fluorecente.

Florecía con destello, brillaba en todo momento.

Las rosas de todos colores habían más allá del lago, y el Sol daba al agua resplandeciendo aún más la belleza que esta poseía.

Era el lugar favorito de Taehyung, era el mejor lugar para sacar una sonrisa, y borrar el estrés.

TaeTae conocía todos los lugares del bosque, todos los rincones que poseía, y todo lo que se encontraba.

Pero aquel lago era el que daba vida a todo ese mundo vegetal y animal, era el principal, y daría su vida por proteger ese simple pero importante lago.

Al llegar allí , acarició con su mano el agua, sintiendo vida en él.

Tomó una porción de agua y la restregó sobre su cara.

– Tal vez una lavadita  no vendría mal

Musitó Tae, desvistiendo poco a poco sus ropas hechas con una fina planta reluciente del bosque.

Adentró un pie a la cálida agua, y poco a poco ya se comenzó a meter completamente disfrutando de su pureza.

– No puede existir agua mas bella que esta, ¿cierto?

Algunas mariposas se posaron en unas flores y unas otras sobre el brazo de Taehyung.

A veces este se sentía solo, no mucha gente pasaba por allí para no destruir. Más que nada para buscar plantas curativas, talar árboles, u otros que realmente obstruía la naturaleza, como ocasionar incendios.

Mayoritaramente niños se acercaban al lugar, y por miedo a que puedan morir, Taehyung los sacaba a la fuerza – aunque los pequeños no sabían que este existía, ya que se camuflaba muy bien–.

Pero ese tema realmente no le importaba mucho, ya que había tanta vida en el bosque, y muchos animales eran sus amigos.

Era su deber proteger, aunque en esos días habían ocurrido cosas extrañas.

Sus ancestros mandaron a buscar recursos –como armas– al pueblo más cercano de donde se encontraba.

Taehyung sabía perfectamente lo peligroso que podría ser salir de su hábitat, pero sus dioses ancestrales le recordarom que podía defenderse con sus poderes.

Pero más que poderes, eran curaciones, y tenía un cuerpo frágil, por lo cual en algún tipo de batalla no tendría ventaja.

Aunque era casi imposible que estuviese en una pelea.

Le avisaron que al quinto día de esa semana –dia viernes– se dirijiera lo más pronto al pueblo a buscar.

Debía hacer caso, y poco conocía ese sector, pero debía cumplir.

Dos días le quedaban para partir ya a ese lugar desconocido que tanto temía, los humanos no pueden ser tan crueles.. ¿Verdad?.

Eso era lo que se preguntaba Taehyung cada vez que veía un humano cruzar su territorio, el bosque.

Pero tal vez estaba equivocado, tal vez todos los humanos eran malos... O solo algunos.

"¿Un niño inofensivo puede ser cruel?, si tienen una mente pura, ¿es posible eso?"

Por supuesto que si, pero para Tae, era algo desconocido.

Nunca había conocido a un humano en persona, y es lo que más y menos desearía por miedo a que le hiciera daño.

Faltaría poco para verlos de cerca, pero no para conocerlos por dentro.

Quisiera saber sus pensamientos, de que vivían.. Pero debía esperar.

Por mientras, siguió disfrutando de su baño, para ya esperar impacientemente el quinto día de la semana.