1.

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De fondo puede oír las sirenas de una ambulancia ¿la policía? realmente no puede deducir cuál es cuál, hay gritos y personas a su al rededor, siente unas manos ajenas intentando detener el sangrado en su estomago, su vista es nublosa, no puede ver con exactitud que esta pasando.— chico no cierres los ojos, por favor.— dice una mujer pero la orden se ve difícil de obedecer.

Finalmente Doyoung cierra los ojos.

Pero sigue escuchando las voces de fondo, lo que él supone son los camilleros, levantándolo y regañándose entre ellos por no tener suficiente cuidado, la mascarilla que le ayuda con el oxigeno, la voz de quien cree es un doctor "ya es tarde, su tipo de sangre, no quedan donadores de ella, a menos que aparezcan por lo menos diez personas con su tipo en menos de una hora."

cuando se siente ser llevado de urgencia escucha personas llorar descontrolados y gritando ¿acaso son sus padres? ¿quien les aviso? ¿como llegaron tan pronto? la cabeza comienza a punzarle, el dolor hace que deje de sentir las voces al rededor así que.. ¿es el final?

Y parecía que iba a ser otro día normal.

Están llorando. No ve, ni siente nada pero ha vuelto a oír, esta en un lugar oscuro ¿se quedo ciego?

Es su madre, estaba llorando, entre el murmullo puede claramente oír "esto no esta pasando, él despertara, él no ha muerto."

Y siente una lagrima caer, de pronto ha vuelto a sentir su cuerpo, llevándose una mano hacia el ojo lagrimeando, una luz brillante y cegadora invade sus ojos, ha vuelto a ver, pestañea varias veces pero es un jardín con paredes de cristales, rodeado de plantas y un hombre de cabellos castaños le sonríe, esta bebiendo una taza de algo.

— ¿cómo estas Doyoung?— pregunta el extraño, lleva un traje blanco y se puede ver claramente una tiara encima de su cabeza.

— un poco adolorido.— dice mirando su estomago pero no hay nada allí y él también esta con un traje blanco.— ¿qué esta sucediendo?

— has sido asesinado, ven aquí, toma asiento.— Doyoung camino hacia una de las sillas de madera, viendo que había otra taza más con un liquido de color azul.

— ¿esto es el cielo?— el extraño quien Doyoung cree es un ángel, sonríe.

— algo parecido, todavía no he decidido enviarte allí.

— ¿he sido realmente malo?— pregunta curioso, no recuerda haber hecho maldades a lo largo de su vida ¿quizás por no convidarle golosinas a su hermano mayor?

— no se trata de eso, mi nombre es Jaemin, soy un ángel que vela por quienes han muerto injustamente, soy quien decide que camino debes tomar pero he visto tu trayecto de vida e inevitablemente una lagrima se me ha caído, siempre sucede cuando un alma tan bondadosa y llena de amor como la tuya deja el mundo humano, y desearía poder volverte a la vida pero tu hilo ya esta cortado, ni siquiera los médicos pudieron alargarlo.— Doyoung observaba como unas plantas enredaderas iban de a poco creciendo, con intensidad trepando las paredes de cristales.— hable con él, y hemos decidido darte un ultimo adiós.

— ¿un ultimo adiós?— el ángel tomo la taza con liquido azul en sus manos, viendo el contenido.

— solo si quieres, puedes negarte también, un ultimo adiós consiste en volver por un momento a la vida, seras capaz de hacer todas las cosas que quieras, es un pequeño obsequio para que seas feliz antes de cerrar los ojos por siempre, abrazar a tus seres queridos, reír fuerte y comer tu comida favorita. No hay una vida en el cielo Doyoung, una vez que el tiempo finaliza, cruzaras la puerta y ni siquiera tu conciencia sera capaz de oír nada más.

Twelve O'clock JOHNDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora