Encontrada.

5

Trataba de zafarme de su agarré pero me era imposible, era un hombre y obviamente es más fuerte que yo, no sabia que hacer, no tenia nada que hacer.

Hasta escuchar esa risa que creo haber escuchado antes, solo una vez y andaba rondando por mi cabeza como un vagamundo si casa, por mi mente.

Algo se tranquiliza en mi y a la vez un gran enojo. Cuando ya ve que estoy algo calmada me suelta de su agarre.

—¡QUE RAYOS CREES QUE HACES! — le espetó muy furiosa.

—Nada solo te quiera dar un susto —diciendo en un tono burlón.

—Buen susto el tuyo que casi me da un ataqué cardíaco—tocando mi pecho de una forma dramática—Y por qué razones me das estos sustos, chico qué ni su nombre conozco — mientras el seguía riéndose de mi casi muerte.

—Es que vivo allá — señalando una gran casa.

—Aahh entiendo... entonces esa es una razón para matarme del susto, ¿tu nombre?.

—mi nombre es Jacob Berman, un gusto — estediendo su mano de manera formal

—Alisson Miller, mucho gusto - le sigo el juego.

Los dos lo hechamos a reír ya que era un poco gracioso y poco por qué casi me mata del susto hace unos minutos, este punto de estar a casi media noche hablando con prácticamente con un desconocido conocido.

—y que haces tan tarde por aquí.

—es que venia de una salida al cine, y por loquillos nos toco la última tanda, y cuando venia de camino un chico llamado Jacob nose si lo conoces pero decidio darme un gran susto que casi me hago el 2, y tu?

—se ríe ante mi comentario—sólo esta tirado en el pasto y te vi, y pense que si te llamaba, te irias coriendo, así que ésta fue la mejor opción de agárrate de desprevenida.

— y que hacias en el pasto, tan tarde, ya, no me digas que eres vampiro, y tu compañero te recojerian en una nave de ovnis-.

—¡Qué! estás loca de veras que si, como relacionas un vampiro con alíen — dice estallando de risa.

—ahaha si, no, no estoy loca—digo frunciendo el ceño.

—no te enojes Alisson, solo fue broma, ¿quieres sentarte en el jardín conmigo?— me invita, halandome hacia su casa.

—¡Que!, no, esta muy tarde ya... y de seguro mi madre se enojara si llego tarde.

— tu madre no es problema, niña.

—¿por qué crees que mí madre no es problema?- contraatacó rápidamente.

—por que ella salio con mi madre.

—ohh, yo no sabia, y nuestras madres se conocen?— cuestióno.

— mm si, que crees que tu mama se quedaría esperándote en el sillón, con enredadores en la cabeza, una crema para la vejez, y sus lentes —ironiza.

— mmm bueno, no, pero si vives tan cerca, nuestras madres son amigas, ¿por que nunca antes te he visto o no he oido de ti? Aunque si crei aver visto tu cara antes.

— mm quizás tu madre no se queda en su habitación trancada, haciendo tarea, leyendo, viendo tv, tratando de aprender a tocar algún instrumento, y cantado a todas hora— Dijo mientra enumeraba con su dedo.

—¡¡Mierda!!—digo en un susurró.

—¿Que paso? Alisson.

— Mmm como sabes todo eso de mi?— Le respondo algo suave ya, me estaba por volver las ganas de dormirme.

—Tu mama, siempre dice todo lo que haces...

—Hasta mis cosas vergonzosas—interunpo.

—Hmm.. creo que si, no se, no le preto mucha atención cuando nuestras madres hablan.

—Okey. Creo que ya es hora de irme a casa, o no?

—Si, hablamos mañana entoces Ali, Descansa.

—igual—mientras lo despido con mi mano sigo mi camino hacia mi casa.

Solo en cuestión de minutos ya estaba adentrada en mi casa, esta organizada, de seguro mi madre ha hecho los deberes cuando llego hoy.

Subo las escarelas hacia estar en mi habitación, esta hecha un desastre, bueno siempre lo esta, aun asi con las ganas de dormir que tenia me animo a recogerla, pero primero quiero ir al baño.

me dirigí hacia allá, recojo mi toalla, me despejo de toda mi ropa y me envuelvo en ella, salgo por el pasillo, abro la puerta, y la cierro detrás de mí , me entro a la ducha, si que me hacia falta, luego de terminar, voy a mi habitación, me pongo mi pillama de rayita roja, para luego ponerme en acción.

Pongo musica, en un radio de mesa que me regaló mi padre, lo tengo en la misma mesa que he decorado para mi latop, pongo una musica clásica, es relajante, si que lo es, primero ordeno mis zapatos, luego mi ropa, mis libros, y tiendo la cama, ya terminando muy rapido, se había olvidado despolvar mi guitarra y mi piano.

me dirigí hacia ello que estaban en un rincón, tenia mucho sin tocarla ya que me desilusióno, no lo se tocar, y pagar a un profesor seria mucho dinero y mi madre y yo no lo podemos pagar, pero mi padre me lo regalo, llore, significo mucho para mi, sin tener como comprarla, lo hizo solo para que yo pudiera lograr mi sueño.

Conecto el piano, y lo arreglo.

Tocó suavemente las teclas, y ellas se encargan de hacer una hermosa melodia, y mi manos siguen sin pesades alguno, a seguir la melodia, era hermosa, ni tengo la mínima idea de donde surgen solo se que estamos mi teclado, mi sentir, yo sin poder alguno de parar...

Son esos momento por el que darias todo por quedar ahí, solo ahí, donde encuentras una relajación interna y hasta externa, cierro los ojos, lagrimas salen de mis ojos, al ver un imagen borrosa, yo en un escenario, hay es donde me siento feliz compartiendo lo que amo y hacer lo con el corazón.

Y aquella simple melodía quedó estancada en mis latidos haciéndose una.