La palabra con A

Cap. 5: Don't Stop Me Now

Salió de la plaza y empezó a andar por la acera hacia la secundaria Morgan, a la que su hermano mayor asiste. La historia del coronel realmente le había conmovido, resultaba reconfortante oír algo positivo después de aquel deprimente opinión que había soltado el chico del mercado. Tim empezaba a pensar, quizás el amor simplemente depende de si es correspondido o no, así de simple.

Cuando llego a la entrada de instituto el reloj marcaba las 14:05. No se podía ver ni un alma, la escalera principal, el patio, todo estaba completamente desierto, como era obvio para esta época del año. Tim se acercó a la puerta, curiosamente estaba abierta. Una vez adentro vio a una sola persona en todo el pasillo, el conserje que solo estaba concentrado en limpiar las manchas del suelo. Este al ver a Tim le pregunta que quiere, él responde que busca a una profesora, el conserje le indica con el dedo a donde ir, Tim agradece de sigue su camino.

Llega a un salón, abre la puerta y entra. Allí se encontraba sola una mujer firmando unos papeles, concentrada en cada trazo que daba. Tim se acerca con la mano levantada en señal de saludo, la mujer levanta la mirada y observa al niño.

-¿Qué haces tú aquí?- le pregunta calmadamente.

-¿Usted es la profesora Marcela Domínguez?- pregunta Tim algo nervioso, la mirada seria de la mujer resultaba intimidante.

-Sí, ¿Quién pregunta?- dice la profesora alzando la ceja.

-El hermano menor de Jorge, él se tomó una foto con usted, me dijo que era la mejor profesora de aquí.- responde Tim sonriendo tímidamente.

La profesora al oír esto deja salir una pequeña sonrisa. La profesora Domínguez era una mujer estricta y seria con su trabajo, pero realmente amaba enseñar y ayudar a sus alumnos. Tenía una visión bastante clara con la vida, amarte primero a ti y luego al resto.

-Oh, ya veo.- dice la profesora enderezando su postura para ver de frente al niño. –Jorge me ha hablado de ti, ¿Cuál es tu nombre?-

-Timoteo, pero me dicen Tim.- dice mientras estrecha la mano de la profesora.

-Un placer Tim.- responde la profesora de buen humor. –Bueno, ¿en qué te puedo ayudar? ¿Vienes a pedir asesoría?-

-Algo así, necesito que me explique lo que es el amor.- dice Tim ya preparándose para tomar más valiosas notas.

La profesora Domínguez vuelve a levantar la ceja con una expresión de sorpresa. Asombrada por la curiosidad del niño, le pregunta:

-¿Y se puede saber por qué?-

-Es una investigación de la escuela, elegí un tema complejo para resolver y ser un gran detective.- dice Tim tan decidido como siempre.

Domínguez suelta una pequeña risa, la actitud de Tim era sorprendente incluso para alguien que había tratado con tantos niños en el pasado.

-Entiendo. Puedo decirte algunas cosas, aunque no es lo que suelo enseñar.- dice la profesora como si tratara de hacer una broma.

-Por favor, dígame, que es estar enamorado.- dice Tim con su cuaderno ya preparado.

-Es algo por lo que todas las personas pasan en algún momento de su vida, usualmente ocurre por primera vez en la adolescencia. Entonces las personas tienden a darle mucha estima, a decir que es lo mejor del mundo.- la profesora explicaba despacio y con voz clara, como si de una clase se tratara. –Pero el amor, en el sentido que tú lo preguntas, se trata de reacciones químicas. En palabras simples, todo está en la cabeza, ni corazón ni nada, el corazón solo bombea sangre. No es el cuento de hadas que la mayoría dice.