Me desperté con un sudor abundante mientras mi pecho subía y bajaba, otra vez las malditas pesadillas. Tomé mi celular y miré la hora, 5.00 a.m.
No había dormido nada y el insomnio se apoderaba de mi, decidí levantarme y hacerme un té.
Luego de esperar que el té este a una temperatura adecuada para mi, me senté en mi cama y tomé mi móvil para chequear mis mensajes, los cuales todos eran de Alex deseándome buenas noches, no le iba a contestar, así que opte por bloquear el móvil.
Estuve una hora pensando en como mis heridas del pasado nunca habían sanado, que todavía seguía mal, esas pesadillas me iban a atacar por el resto de mis días y realmente, no sabia que hacer. Imágenes recorrieron en mi mente y una lágrima corrió por mi mejilla, estoy mal.
Me afectó de alguna manera que aquel chico pensara que le iba a hacer algo a Erick, seria incapaz, pero lo entiendo, no iba a enfadarme porque realmente entendía de aquella situación. Así que lo pensé un par de veces y estaba decidida de encontrarme con aquel niño y su ¿hermano? no lo sé, y pedirles disculpas.
Miré el reloj de mi celular y ya eran 6.30 a.m, estaba dispuesta a empezar el día con una caminata, luego me vendría a bañar e iría a la plaza, no estaba segura de encontrar a aquel niño, pero no me rendiría hasta encontrarlo.
Tomé unas leggings acompañadas de unos tenis negros con una camiseta floja, esto estaba bien para una caminata ligera.
Salí hacia afuera y los rayos de luz mañaneros me dieron en la cara, me limite a achinar los ojos, aspire el aire fresco de la mañana y me dispuse a caminar.
Desde niña amaba estar afuera, con la naturaleza, tirarme en el pasto, jugar, correr, sentir el aire, pero todo cambio desde aquel día. Aleje aquel pensamiento y me concentre en mi caminata mañanera.
Luego de llegar sudada a mi casa me dispuse a darme una ducha para luego desayunar, tenia el estomago vacío. Decidí ponerme mis convers blancas con un jean y una camiseta. Ya luego me encamine a la cocina para tomar un jugo de naranja acompañado de tostadas con queso, mi estomago lo necesitaba.
Luego de desayunar, baje las escaleras y me encamine hacia la plaza para buscar a aquel niño. Tome asiento en una hamaca y comencé a balancearme, que lindo sentimiento.
Esperé allí 1 hora, eran cerca de las 10 de la mañana y decidí que me tendría que ir, mañana podría volver tal vez, que digo, mañana llegan mis padres a mi casa y tendría que estar todo bien ordenado, ellos no se iban a quedar allí ya que mi espacio es muy reducido, pero vendrían a saludarme y almorzar conmigo.
Abrí la puerta de mi departamento y me tire en el sillón, tomé mi movil y vi que tenia 5 llamadas perdidas de Analía, mi mejor amiga. A ella la conozco desde pequeña, sabe todo de mi y yo todo sobre ella, cuando decidi venir a la universidad de Boston no dudo en venir conmigo, ella lo es todo para mi y yo para ella.
Me dispuse a llamarla, ella nunca llamaba tan temprano, a ella le gustaba despertarse tarde a causa de las fiestas, es muy amante de eso, no digo que yo no lo sea, pero siempre suelo pasar de esas cosas.
—Lia
—Jess, te he estado llamando.
—¿Sucedió algo?—. dije mordiéndome las uñas
—No para nada, bueno si, era para decirte que esta noche voy por ti, ya sabes, Joseph hace una fiesta en su casa y necesito que vayas, por favoooooor.
—Lia, sabes que no me van mucho las fiestas.
—Solo un rato, lo prometo, sabes lo mucho que me gusta Jos, si algo va mal, nos vamos, pero si nos divertimos, nos quedamos.
—Esta bien.
—Bueno, esta tarde iré por tu casa y decidiremos tu atuendo, llevo opciones desde mi casa, porque si es por ti igual vas de jean.
Rodee los ojos.
—Bueno lia, te espero.
Corté.
No me apetecía mucho ir, pero por las amigas una hace cualquier cosa, que va, necesitaba salir un rato después de todo.
Después de almorzar y dormir como por 5 horas, me decidí a levantarme y bañarme. Tendría que secarme y alisar mi cabello, otra razón por la cual no me gustan las fiestas, el trabajo que te lleva arreglarte para después terminar con los pelos hechos una esponja.
Luego de terminar de hacer todo eso me tire en mi sillón, a los segundos sentí unos toques en la puerta, Lia.
—He traído maquillaje, esta vez no te salvas.
Solté una risita.
—Lo que debo hacer por ti amiga, esta me la devuelves—. dije apuntándole con el dedo.
—Bueno, mueve tu trasero y vamos a probarte estos vestidos—. dijo con un brillo en los ojos.
Me limite a sonreír, ella era mi mejor amiga, después de todo, ella hacia todo por mi y yo todo por ella.
—Traje 3 opciones para ti, uno azul, otro blanco y uno negro.
—¿Y tu que te pondrás?
—Oh, ya veras—. dijo triunfante.
Luego de probarme los vestidos, opte por el negro, eran todos ajustados, no era mi mayor gusto pero esta bien. Lia me extendió unos tacones, gracias a dios no eran tan altos, amaba mis convers, era lo mas cómodo del mundo.
Mientras me retocaba el cabello con la plancha, Lia apareció con un vestido rojo precioso, le quedaba muy bien, ella tenia una gran figura.
—Te ves asombrosa amiga—. dije sonriendo.
—Bueno, ven para aquí que te voy a maquillar un poco.
Hice una mueca y accedí, me delineo por arriba del ojo, un poco de rímel y un labial rosa.
Me mire al espejo y dios, como 3 cosas te cambian tanto el aspecto.
Llamamos a un taxi y nos dirigimos a la fiesta de Joseph, en el camino pude ver cuanta emoción llevaba Lia, realmente ese chico era importante para ella.
Pagamos el taxi y nos bajamos, la musica se podía oír desde calles atrás, habían luces colgadas en la entrada y simplemente entramos, el olor a sudor y cerveza inundo mis fosas nasales.
—¿Que te parece si tomamos algo para adecuarnos?
No me parecía mala idea, con un par de medidas de vodka estaría mas divertida.
—Claro.
Nos acercamos a una mesa donde había todo tipo de bebidas que te podrías imaginar, tomamos un par de medidas de vodka y ya nos integramos a la disco.
Ahora me sentía mejor, estaba mas relajada.
Luego de bailar unas 8 canciones, Lia me pidió ir afuera para encontrar a Joseph y accedí.
—Quiero encontrarlo, no lo he visto y es su propia fiesta.
—Tranquila, por aquí debe estar.
Me di la vuelta y ahí estaba Joseph, inconscientemente sonreí, pero luego mire a su lado y se me borro la sonrisa, allí estaba, el hermano de Erick y el mas buscado por las chicas de la universidad, todo se aclaro en mi mente, con razón su cara se me hacía conocida.
Que noche larga se me viene, pensé.
Holaaaaaaaa, nuevo capitulo, ojala les este gustando.
