Estaba en mi habitación, como era común. Eran las 3:30 Am, lo recuerdo perfectamente. Mis amigos siempre me comentaban que no trasnochara tanto ya que esto me hacía daño, además a las 3:00 am, se dice que es la hora en la que los espíritus o fantasmas salen más a menudo, en fin, yo como buen adolescente incrédulo lo hacía de todos modos.
Volviendo al tema, estaba yo en mi laptop, con la luz apagada y los auriculares puestos cuando de repente me entrar unas ganas inevitables de usar el baño. Me levanto, enciendo la luz, salgo de mi habitación y entro en el baño. Este tiene una característica que me parece un poco terrorífica y es que justo en frente del inodoro hay una ventana bastante alta para impedir que se vea desde afuera, que cumple la función de ventilar el baño.
Lo que sucede con esta ventana es que da al lavadero de la casa y ese lugar casi siempre esta oscuro, es decir, por la ventana solo se ve oscuridad. Cómo la imaginación humana es tan traicionera, siempre imagino cosas que me ven a través de ella, es por eso que hago uso del baño sin quitar la mirada de allí. En ese día, como siempre, mientras usaba el baño miraba hacia la ventana y esta vez, para mi pesar, vi algo fuera de lo normal, dos ojos con la pupila negra y el resto de un color amarillo que me miraban fijamente. Pensé que era mi imaginación otra vez, así que termine y empecé a lavarme las manos.
Cuando volví a mirar, seguían los mismos ojos siniestros mirándome, empecé a asustarme demasiado. Una sensación fría recorrió mi espalda, mientras trataba de cerrar el lavabo mis manos temblaban demasiado, puse mi mano derecha sobre el pomo de la puerta y lo gire lentamente, voltee hacia la puerta, terminé de abrirla y corrí rápidamente a mi habitación.
Estuve un rato pensando sobre lo ocurrido, hasta que el sueño empezó a manifestarse. Apague la luz, cerré la laptop y me dispuse a dormir.
Estuve unos minutos pensando en lo que vi y dije en mi mente: Fue solo mi imaginación. Lo que ocurrió después fue lo más aterrador que me ha pasado. Sentí que alguien estaba en mi costado izquierdo, cuando volteo para chequear, veo, los mismos ojos amarillentos, mirándome, luego oigo un tenue susurro diciéndome: Te aseguro que no fue tu imaginación.
Grité como nunca lo había hecho. Rápidamente entró mi madre al cuarto, encendió la luz y comprobé que no había nada ni nadie a mi lado, expliqué lo que paso a mi mamá pero nunca me creyó. Luego de ese suceso no volví a poner en duda nunca más lo que veo todos los días al ir al baño en la noche.
¿Tú sigues creyendo que esas cosas que ves en la oscuridad son solo tu imaginación?
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Creepypastas, Relatos de terror Y Conjuros
Spiritualeste es un libro para los amantes del terror y creepypastas, algunas de las historias no serán mías hací que créditos a sus respectivos autores, creadores de estar fantásticas historias, eso es todo, DULCES PESADILLAS