Gran contratiempo

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POV ZAYN

Después de haber escuchado esos disparos y gritos, Lorus y yo salimos de la casa con la intención de saber de donde venían, empezamos a correr guiándonos por tal agonizante sonido, y fue ahí como después de unos minutos pudimos ver lo que ocurría, no me lo esperaba y me quedé estático en el sitio,  detrás de unos arbustos, eran unos 10 hombres armados con poderosas y afiladas espadas desenvainadas apuntando a una chica, no es normal pero lo es aún menos al darme cuenta de que la figura que estaba malherida, era la chica que conocí hace a penas unas horas, Deria era su nombre. Sabía que no tenía oportunidad pero tuve un impulso de ir a por ellos, pero fue ahí como gracias a la rapidez de Lorus pude quedarme parado.

- Espera, ¿Estás loco? hay muchos, no vas a poder y menos desarmado. - Me dijo Lorus agarrándome fuertemente el brazo hasta el punto de dolerme.

- ¿Y qué esperas, quedarme sin hacer nada? - Contesté con la rabia que tenía acumulada.

- Eso es lo que quiero - iba a reprocharle pero fue ahí cuando siguió hablando - Tú no vas a hacer nada, pero yo sí. - Me dio una brillante sonrisa y me soltó, me quedé confundido sin saber que decirle, obviamente sabía que Lorus era fuerte y hábil con el arco, pero habían unos 10 hombres armados hasta los dientes, sus flechas no lograrían atravesar tal coraza. 

- Sé lo que piensas pero como ya me has dicho, no me conoces... - Dijo esto último dándome dos pequeños golpes en el hombro.

Deria seguía malherida, estaba arrodillada en el suelo, una de las personas levantó la espada con la intención de cortarle el cuello pero fue ahí cuando Lorus, con un rápido flechazo le dio de lleno al enemigo haciendo que cayera lastimado al suelo. Los demás miraron al lugar donde había salido la flecha y prosiguieron a acercarse mientras se protegían con los escudos, pensé que estábamos perdidos pero cuando estaban a punto de llegar, Lorus saltó a por uno de ellos dándole en el ojo con la punta de la flecha. Los otros no tardaron en reaccionar y atacarlo pero él con gran habilidad fue esquivando cada uno de los golpes, uno tras otro. Ahí no acabaría la cosa ya que uno de los más grandes le fue por la espalda y elevó su espada contra Lorus, creí que le iba a dar pero fue ahí cuando con una velocidad alarmante el chico cogió la espada de unos de los cadáveres y bloqueó su ataque, cogiendo de nuevo una flecha e incrustándosela en la pierna, cayendo al instante. Estaba maravillado por tal combate, al saber que mi amigo estaba encargándose de cada hombre sin problemas. Esquivaba y atacaba, apuntaba y disparaba, era simplemente increíble, pero fue entonces cuando salieron más refuerzos y en ese momento creía que estaba perdido. 

- Mmhp... Más diversión - Murmuró Lorus haciendo que se me erizara la piel, para mi sorpresa a medida que avanzaban corriendo hacia su posición, él se mantenía paralizado, cerrando sus ojos

- ¡Cuidado! - Grité con todas mis fuerzas, ya no me importaba que supieran donde me encontrara, ahora solo me preocupaba de Lorus.

Ya estaban muy cerca de él y no pude evitar sentirme asustado por lo que ocurría, creí que estaba acabado pero me equivocaba. De un momento a otro abrió los ojos, ya no eran unos pardos ojos marrones, ahora tenían un color verdoso, me sorprendí y los hombres también pero no eso no impidió que se pararan. De pronto Lorus sacó una flecha, sentía el poder que desprendía, era una sensación cálida y protectora. Una luz del mismo color de sus ojos lo envolvía y acompañaba, y entonces ocurrió, soltó la mano que tensaba la flecha y ésta salió disparada directa al centro de los enemigos, éstos saltaron por los aires produciendo así grandes explosiones y una muerte inminente para cada uno de ellos. Lorus me miró aún con esos ojos, pero enseguida perdió la fuerza y cayó al suelo de rodillas, salí de mi escondite y fui a ayudarlo.

- No, no te preocupes por mí, ella te necesita más - Me dijo en un tono adolorido

Asentí y caminé en dirección a Deria, ella tampoco se había perdido la gran batalla y miraba con asombro cada uno de los movimientos que se realizaban. La ayudé a levantar, fui a ver a Lorus pero éste ya estaba levantando y con los mismos ojos de siempre. No quería preguntarle aún sobre lo que pasó, esperaba llegar a casa para que lo dijera todo.

- Gracias, de verdad gracias... - Habló Deria con un rostro bañado en frescas lágrimas.

- No hables, te cansarás más - Le contesté con un tono de voz suave y armonioso. Lorus nos siguió todo el camino sin decir una palabra, en realidad, nadie decía alguna.


Nota de la autora

Hola de nuevo gente, sigo con la promesa de subir capítulo los martes, a pesar de que éste sea más corto pero eso sí, es mucho más intenso que los demás, aún quedan muchas cosas por aclarar..¿Por qué hay una extraña relación entre Deria y Lorus? ¿Se conocerán? ¿O habrá algo escondido? 



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