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Eran las 6:30 de la mañana, mi celular sonó. Era Zayn, necesitaba que lo viera en un lugar que ya teniamos acordado. Quería lo de siempre.

 -Voy hacía allá- Contesté.

Ultimamente creía que Zayn sólo me quería para eso, por una parte yo lo consideraba un amigo, pero creo que él me quería por convenencia, sólo era darle lo que él llamaba "medicina", yo lo llamaba un arma, un arma para que tu vida se destruya, lento pero efectivo.

-Aquí está lo que querías.

-Gracias, que linda. Lastima que tu padre te haya obligado a hacer esto.

-No menciones a ese tipo, ¿quieres? él no es un padre, no se le puede llamar así.

-No te pongas así, sabes que te quiero preciosa

-¿Me quieres?

-Eres lo que me hace feliz

-¿Yo? ¿O es esa cosa porquería que te metes?

-Vamos, no digas tonterías.

-Deja de decir eso, yo no digo ninguna tontería, Zayn ¿en verdad me quieres?

-Claro que te quiero.  Y te  voy a querer más si mañana haces lo mismo que hoy, enserio necesito esto.

-Eres un patán, sabes... si por mi fuera dejaría de vender esta cosa, enserio detesto esto.

-¿Y por qué sigues aquí?

-Por... ya te lo había dicho

-Oh, tu padre, cierto, ¿quieres escapar?

-Haría lo que fuera por escapar de esto

-¿Lo que fuera?

-Sí...

-Sé mía, te prometo que te liberaré de esto

-¿Ser tuya?...

Me interrumpió con un beso, debo admitir que para ser un mafioso besa muy bien, de los pocos besos que he tenido es el primero que me ha gustado, sólo que Zayn realmente es un patán.

-Sí, mía... ¿Qué dices?

-Yo...

-Vamos, yo sé que lo deseas.

-Lo único que deseo es ser libre.

-Déjame liberarte.

-No lo sé...

-Si no aprovechas me iré.

-Es muy difícil para mí ¿Qué no entiendes? Sí huyo, mi padre hará lo que sea para encontrarme

-Te protegeré, lo juro

-No me lo jures, no creo necesitarlo

-Bueno, como tú no aceptas, vendrás conmigo, sí o sí.

Me tomó de la muñeca, luego con su otra mano tomó de una manera brusca mi brazo y me hizo caminar por una oscura calle, conocía cada rincón del barrio pero este pasaje jamás lo había visto, al menos no lo recordaba.

-¿A dónde me llevas?

-No puedo decirte aún, sólo te digo que serás más feliz

Después de llevarme a la fuerza, me subió a su automóvil, me ordenó que guardara silencio durante todo el camino, no podía ver a través del cristal ya que era muy oscuro.

-Llegamos, espera hasta que te abra la puerta.

Esperé unos segundos hasta que me abrió la puerta del auto.

-Baja, hoy dormiremos aquí.

-¿Es tu casa?

-No, es de un amigo.

-¿Y tu casa?

-No creo que me acepten de nuevo ahí.

-¿problemas?

-Algo así.

Zayn se acercó al timbre y tocó, un muchacho rubio abrió.

-¿De nuevo aquí Zayn?

-Sí, sólo que ahora estoy acompañado-Me miró-

-¿Quién es ella? -Susurró el rubio-

-Una amiga

-¿Amiga? ¡Ja! Vamos Zayn, no me digas que sólo es tu amiga, ambos sabemos que no

-Esta ves es diferente, ella es una fuerza opuesta a mí. No es fácil de controlar.

-¿Chica ruda?

-Algo así, pero bueno -dejaron de susurrar- necesito que nos dejes dormir aquí, por lo menos unas 6 noches.

-¿Seis? Vaya...

-¿Puedes?

-Sí, eso creo. Pasen

-Ven linda. Pasa.

Me tomó de la mano y entramos a la casa del rubio, sentía miedo, por lo regular no suelo tener miedo, siento que hay emociones en mí que en ocasiones ni yo misma puedo controlar. Para ser honesta, creo que esto es un secuestro, Zayn está en asuntos muy extraños, no digo que yo sea inocente pero él en verdad me asusta.

-Tengo una habitación disponible-dijo el rubio

-Una... ¿ya escuchaste bonita? sólo hay una habitación para ti y para mi

-Yo... -me quedé paralizada del miedo y lo nerviosa que estaba-

-¿Qué pasa? ¿Acaso tienes miedo? Sabes... es mejor que me tengas miedo, vete acostumbrando.

-Zayn... tú no eres así.

-Por supuesto que soy así y no sabes de lo capaz que soy. A veces suelo ser un monstruo, al menos eso me han dicho-Suspiró- Pero no te preocupes hermosa, no te haré daño, lo prometo.

El chico de la casa nos indicó donde estaba el cuarto donde pasaríamos la noche, los nervios me recorrían todo el cuerpo y no paraba de temblar, Entramos a la habitación, cerraron la puerta y ahora no sólo tenía miedo, ahora también pavor.

Zayn se sentó en la cama y se quedó profundamente dormido, eso me alivio un poco, yo me acosté en el suelo ya que solo había una cama, no podía dormir ya que era presa del miedo, me preguntaba lo que podía pasar si Zayn despertaba, pensaba en mi padre, en lo que me haría si se enterara que no vendí toda la droga que me dio.

Cuando me estaba dando sueño algo me alarmó, era un sonido, era Zayn, estaba llorando, me confundí bastante al escuchar su llanto ¿Qué le sucedía?

-Odio mi vida- Lo oí decir en silencio. Me hice la dormida para que no se apenara de la situación- ¿Linda, estas despierta? -dijo aún llorando-  Mira, es tonto pero, odio todo de mí, se supone que un hombre no llora, al menos eso me ha dicho mi padre, pero es imposible para mí, odio que me traten como si no valiera la pena, sé que pensarás que soy muy rudo pero no, yo no quiero ser así, sólo quería estar a tu lado un momento, quiero un poco de compañía, solo eso... pero ya no importa, seré fuerte, lo haré por ti, descansa hermoso ángel, no es para que tú estés en el suelo, Te pondré en la cama, así dormirás mejor.

Me sostuvo con tanta ternura, me colocó en la cama y me cubrió con una frazada me dio un tierno beso en la frente y me susurró: "Eres hermosa, vales mucho, más de lo que imaginas" Y después salió de la habitación.

Fin Capitulo 1.

Más de lo que imaginas ~Zayn y tú~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora