Vampire School (yaoi)

Cap 1: La escuela nocturna

Para Dimension_Galaxy y SergioAndres609

Narra Hikaru
Por fin una nueva vida donde puedo estar solo y sin problemas, pues mis padres nunca me quisieron, fui un estorbo para ellos, además de que en la escuela que iba antes, obviamente en clases matutinas, me golpeaban y humillaban pero no salía como esos chicos que no tienen sentido de vida y se suicidan, no, yo seguí adelante siendo más fuerte con cada golpe que me daban.

Soy Hikaru Takamura, cumplí los 16 años la semana pasada, mi cabello es rojo hasta el cuello, como todos tengo ojos negros, estoy en el mes de Julio, hoy es Lunes 23 y pues... ando entrando en la escuela nocturna que está fuera de mi mundo ¿Por qué? Bueno, al tomar el autobús y dirigirme para acá fue un revoltijo, casi vomito por la alta velocidad en que iba el conductor, al menos será la única vez porque habrá dormitorios y solo saldré cuando lleguen las vacaciones, que es mas o menos terminando Noviembre, eso quiere decir que tendré tiempo de celebrar la Navidad ya que volveré aquí en la quincena de Enero.

Mi uniforme consiste de playera blanca con mangas que llegan hasta el codo, encima de ella otra negra con botones que llegan hasta la muñeca, pantalones negros al igual que los zapatos, pareceré el típico chico emo pero tuvo que ser así.

Volviendo a lo que estaba, justo ahora estoy parado enfrente de las grandes rejas color negras, viendo también la luna que está en cuarto creciente todavía, a veces me pregunto ¿Cómo es que algunas personas pueden tener clases de noche? Cada quien su gusto.

No será difícil acostumbrarme a este horario, dormir de día sería algo bueno, más horas de sueño, dependiendo de cuanto dure en hacer las tareas que vayan dejando los maestros.

—¿Hola? ¿Hay alguien?— toco la reja y solo hay silencio, nadie está para recibirme, lo mejor es entrar para ver.

Abro lentamente la puerta, oyendo el rechinido de ella, la cierro con cuidado, doy una pequeña vista del largo camino que voy a dar, sí, son como las entrada de las mansiones, las rejas y luego caminas 100m del gran bosque hasta llegar a la entrada.

Dejé de pensar en eso y me puse a caminar, ni llevo 50m y ya me siento cansado, necesito ejercicio y con urgencia, oí el sonido de murciélagos ¿Hay criaturas como esas en una escuela como esta? No, es imposible, no debe de haber.

Me puse a correr como loco asustado, sin percatarme lo que había al frente de mí, pues por culpa de eso choqué con alguien, haciendo que me cayera, cerrando los ojos por el dolor

—¡Hey! ¡Fíjate por donde vas!— oí la voz de un chico, abro mis ojos, su cabello es color negro corto y ojos rojos

—No es mi culpa de que hayan murciélagos, además, también es tu culpa por no notar que venía— lo señalo

—¡Cállate!— me agarra del cuello de la playera, genial, otro acosador —Maldita escoria, te enseñaré con quien te estás metiendo— de seguro vendrán los golpes

—Golpeame si quieres, estoy acostumbrado a los maltratos— digo con una sonrisa victoriosa

—No, es otra cosa— me agarra de la muñeca y alza con fuerza mi brazo derecho.

Abrió su boca y clavó un diente o colmillo, no vi bien, dentro de él, duele mucho, definitivamente es peor que un maltrato escolar.

Se separa de mí rápidamente y escupiendo la sangre que me sacó

—Imposible, tú no puedes ser...— en su cara se reflejaba decepción —Maldición— dijo y desapareció, que chico tan raro, y lo peor es que me dejó una herida en el brazo.