Cap 12: Epílogo

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Narra Aoki
Finalmente Hikaru y yo estamos junto en vida y muerte, eso creo, aunque lo haya hecho mío, a pesar de que han pasado muchos meses y vamos de viaje a su mundo de visitas, en lo cual no seremos recibidos, la madre de él se fue de viaje a otra parte, dejándolo solo a su custodia pero no le importó, con tal de tenerme fue más que suficiente para hacer otra familia en vez de esos tontos humanos, donde huir es lo mejor que hacen en vez de enfrentar una situación

—Aoki, ya para de desesperarte, ya vamos a llegar a mi casa— se dio cuenta, de seguro fue porque estaba moviendo mi pierna de arriba para abajo tantas veces y con desesperación

—Perdón, no puedo evitarlo Hikaru, quiero ver el lugar donde nos hospedaremos después de graduarnos— Hikaru suspira con pesadez con pensar en eso, creo que me pasé pero es algo difícil de pensar, me agrada el hecho de estar a su lado, sin mencionar que podré ser capaz de hacerle "eso"

—Tranquilo, ashh, Aki estaría mucho peor, que bueno que no lo invitamos— se golpea la cabeza y niega.

Aki está en la escuela, haciendo su meditación como método de vigilación hacia los dos, quiere ponerme a prueba si soy capaz de proteger en su mundo en lo que no está, Rei... ni se diga, enfrenta un castigo muy grave de su familia por perder a su destinado aunque no lo recuerde, va a pasarla pero muy mal

—Más bien que nos esté viendo desde lejos— sonrío y desvío la mirada, Hikaru preguntó de qué estaba hablando pero no le respondí, es mejor para mí dejarlo en suspenso a que se entere de que no es el único que se encuentra presente en los momentos.

El autobús humano se detuvo, Hikaru y yo no bajamos, para seguir con la vía hasta llegar a casa de él, ya no aguanto la emoción, es decir, estar en la vivienda de tu amado es un sueño que un futuro esposo no podría controlar, es como planear qué haremos, donde dormiremos, si tu amado se viste de maid, jeje, me muero con ver a Hikaru vestirse un día de ese modo, sacaría una cámara y le tomaría una foto. Fuera de eso, le enseñaría a nadar, con tal de que no vuelva a pasar con lo de ese día que trató de llamar la atención de Rei.

Llegamos, estaba muy feliz, finalmente en la casa de mi amado, pequeña pero algo es algo, entramos, ahora sí me emocioné, tenía cocina en plena entrada, supongo que eso sucede en muchas casas humanas, la sala junto a eso, en el piso de arriba estaba su habitación y la de sus horripilantes padres "Abandona hijos", es el lugar perfecto para vivir a su lado, solo queda que en la noche hagamos "eso" y ya, no puedo esperar

—Bueno, bienvenido a mi casa Aoki, disfruta de las vacaciones porque volveremos hasta el siguiente año— sí, hasta verano, ya que es la época donde los humanos salen más seguido, en invierno, se quedan en cama en sus casas, soportando el frío que entra por la puerta y las ventanas   

—Lo sé querido— abrazo a Hikaru—¿Qué quieres hacer hoy? ¿Andar acurrucados en la cama todo el día? Eso me encantaría— muestro una sonrisa, Hikaru trata de apartarme de él

—Claro que no amigo vampiro pervertido— que me diga amigo duele, lo usa para hacerme sentir fatal, típico de él—Tenemos que cocinar, preparar las cosas para la Navidad, decidí invitar a Aki a la fiesta y no empieces con quejarte, que ya sabes que eso me pone de malas— mira quien lo dice

—No creo que Aki quiera venir, admítelo, sólo somos tú y yo— lo abrazo más fuerte con una gran sonrisa 

—Te odio— ya sé que no lo dice en serio

—Y yo te quiero— 

—Lo que digas— oigo sus suspiro.

Llegó la época navideña, donde los humanos conviven con su familia, algunos salen, otros se quedan para estar junto a su árbol de Navidad, que es un pino decorado con esferitas de diferente material colgados de las ramas  y luces alrededor con la parte más importante: una estrella en la punta del árbol, al principio no le vi mucha importancia, pero con ver la luz que irradiaba de esas cosas, logré ver la razón por la cual todos de este mundo lo aprecian

—Aoki, no te quedes parado a ver el árbol, el pavo se va a quemar, te dije que después de 40 minutos lo sacaras, no 50— fue al horno y saco la comida que estaba apenas a carbonizarse, me salvé de una regañada de Hikaru 

—Perdón, trataba de entender más a fondo eso— señalo el árbol,que estaba en la sala

—Ustedes los vampiros no tienen Navidad ¿Verdad?— puso la comida en la mesa del comedor

—No todos, algunos los ignoran, otros le dan la importancia, en mi caso, Aki y yo vivíamos solos, nuestros padres no nos enseñaron eso cuando éramos niños— Hikaru se puso triste por mi explicación

—Ya veo, entonces tendrás Navidad conmigo y con Aki— me estremezco con lo último que dijo ¿Él está aquí?

—Hola hermano— entra a la casa, eso es predecir bien el tiempo cuando tu amado habla del tipo mencionado—Gracias por no invitarme a la fiesta y hay pavo para comer— babea con ver la comida 

—Y pasta— agrega Hikaru, sacando del microondas la pasta que calentó no sé a qué hora

—Perfecto, más para mí— esto no puede ponerse peor.

Hikaru, Aki, y yo comimos hasta no aguantar más, el que nos ganó por comer todo fue Aki, tiene un gran estómago, Hikaru fue el segundo en caer y yo fui el primero, todo esto me pasa por comer algunas galletas que Hikaru compró ayer y que las reservaba para hoy, no me resistí y comí muchas un tiempo antes de que la cena estuviera lista

—Ahora Aki, te mostraré las galletas que compré— estoy muerto, va a la cocina a checar la alacena, saca el paquete y suelta el grito —Aoki— me fulmina la mirada, muerto para la eternidad—No no vamos a hacer "eso" como castigo de comerte casi todas las galletas— bajo la mirada por eso y Aki se pone a reír ¿Tan mala suerte tengo?

—A ver cómo te las arreglas hermano— me susurra y palmea mi hombro mientras que Hikaru le invita las galletas restantes a Aki, todo esto me pasa por no tener resistencia a las cosas dulces.

Se hace más de noche, Aki se fue a dormir en el cuarto de los padres de Hikaru, yo me fui con mi amado a su cuarto pero antes de dar una pisada, sentí una fuerte carga eléctrica en mi cuerpo, no sé como le hizo pero Hikaru usó todas mis debilidades de vampiro alrededor de su habitación, con tal de que no me aprovechara de él estando dormido.

Rendido, me fui al cuarto donde estaba Aki, para irme a dormir. Me subo a la cama y me tapo con las sábana en la cual sostenía mi hermano

—Tuviste una pésima noche de Navidad— no hace falta de que lo diga

—Sí, y yo que tenía planeado hacerlo mío en plena Navidad, veo que fracasé con mi misión—me pongo a llorar como tonto 

—Ah, vamos, es madrugada de Navidad, tienes todo el día para hacerlo tuyo, así que, no te rindas ¿Ok?— mi hermano siempre busca el mejor modo de hacerme sentir mejor

—Gracias Aki— lo abracé, en ese momento se me ocurrió un buen plan para llamar la atención de Hikaru—Sígueme la corriente— susurré y entendió de lo que estaba hablando—Te amo, tanto que quiero hacerte mío hoy, ya que mi amado se encuentra dormido— miro la entrada, una aura oscura estaba saliendo desde el cuarto de Hikaru. Él entra abriendo la puerta con fuerza y con un extremo enojo en su cara

—¡Eres mío! ¿Entiendes?— mi plan funcionó a la perfección

—Sólo si quitas las trampas que dejaste en tu habitación— sonreí de forma burlona, obedeció a lo que dije, Hikaru y yo hicimos lo "nuestro" y terminamos durmiendo.

Hikaru, tal vez no tuviste un principio muy feliz, pero ya  me tienes a mí y a mi hermano para confiar, no dejaré que te pase la misma historia entre tú y Rei, te seguiré demostrando que soy diferente a él y a todos los que veas porque este amor comenzó cuando llegaste, cuando apareciste en: Vampire School.

FIN     

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Eso es todo, les gustó las historia, no hay segunda temporada pero lean las otras historias disponibles como: My Vampire, Apostando por el yandere y El canto de la esperanza, que está pensando cambiar el trama, o al menos el ambiente.                                                        

Vampire School (yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora