Frase 13.

8 2 0
                                    

Y ella se acostó en su cama, mientras lágrimas rodaban por sus mejillas. No podía hacer nada que la calmara. Aunque era así todas las noches, pero esta vez se sentía acabada, rota, inútil. Y no te atrevas a decir que no has matado a nadie, porque esa noche la mataste a ella.

~Frases~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora