Oliver y su punto de vista *Capitulo especial*

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-¡Olly!~grito Lizzie en cuanto reacciono, lloraba pero tenía una gran sonrisa plasmada en su rostro~estás bien, te extrañé muchísimo
-y yo a ti enana~dije, yo también la extrañé y a su extraña forma de ser~ven y dame un maldito abrazo
Así lo hizo, Shawn corrió a buscar a una enfermera y al doctor Albert, mi pequeña hermana no me abandono y es por ella que me levante y claro por mis sueños, por mi familia y por la única chica que me vuelve completamente loco Nicole Benson.
-enana, estoy feliz por Shawn y por ti
-¿qué tanto viste Olly~dice separándose de mi, me quedo callado~Oliver...
-desde que empezó a cantar~digo ya vencido por su mirada inquisitiva.
-¡ay Olly! ¿Por qué no hablaste?
-no quería interrumpir.

Llego el doctor y una enfermera, la misma que estuvo cuando desperté por un rato, sacaron de ahí a Lizzie y a Shawn para poder hacerme las revisiones necesarias.
Estando ya a solas me revisan la presión, pupilas y sacan sangre, también revisan otras cosas, no le doy importancia, solo quiero salir del hospital y volver a la vida, pero está al parecer tiene otros planes para mi...

-Oliver, eres fuerte y te admiro~dice el doctor Albert~siendo joven lograste despertar sin tanto problema...
-...pero~cuestiono temiendo lo que dira a continuación.
El doctor toma un suspiro y me ve fijamente a los ojos
-muchacho, tienes parálisis temporal en tu espina dorsal, eso significa que no podrás caminar por un tiempo, lo bueno es que solo te afecto de la cadera hacia abajo puedes mover todo de la cintura para arriba
-¿y mi cerebro cómo está?
-tendre que llevarte a rayos X para poder averiguarlo, relajate un poco, te traeran comida y luego iremos a la sala de rayos x
-mis...mis padres y mi hermana ya saben de la parálisis~digo preocupado, imagino a Lizzie llorando histérica, a mamá tratando de calmarla aún sintiéndose ella de lo peor y a papá tratando de mantener la calma por ambas y darme apoyo aunque él sea sienta peor que ellas~¿ya les dijo?
-aún no, pensé que usted querría decirles, pero si prefiere la enfermera Donovan saldrá a darles la noticia

Con sinceridad no sé que hacer, me calló y lo pienso, no quiero ver la reacción de Lizzie y su mirada de culpa por haberse bajado, recuerdo que un día ella estaba llorando y me hablaba
-Olly, detesto que estes así por mi, no debí bajarme~escucharla decir eso me rompia el corazón, quería abrazarla pero una fuerza mayor me lo impedía~te extraño mucho, debí ser yo y no tú, tú que tienes todo arreglado y una vida por delante, lo siento mucho Olly, espero puedas perdonarme.

Oir eso me partió el corazón, el alma me sentí muy frustrado por no poder levantarme, por no tener la fuerza para abrir los ojos y abrazarla para que supiera que todo iba a mejorar, antes de seguir luchando me sentí muy cansado...demasiado y deje que esa estúpida y odiosa fuerza mayor me arrastrara de vuelta a la oscuridad y soledad de donde sea que estaba.
-quiero que se los digan por mi, pero que sea aquí
-muy bien~dice el doctor Albert, la enfermera asiente y sale~podrán venir después de que comas, después podrán venir y te ayudarán a bañarte luego de que se vayan tus visitas y de hacerte el enfacelograma

El doctor me deja solo, maldición aquí queda mi vida, no sé si podré volver a jugar o caminar, eso me preocupa y siento como mis ojos arden, suelto un par de lagrimas y recuerdo a un personaje de los libros de Lizzie creo que se llama Will Traynor, Lizzie hizo que viera la película con ella y creo entender porque quería terminar con su vida, no sé si Nicole se va a quedar conmigo o se ira porque no soy capaz de ir con ella a...a ningún lado ni siquiera seré capaz de movilizarme a cualquier lugar sin una silla de ruedas.
La puerta se abre y Lizzie entra, nuestros ojos conectan y una lagrima rebelde se me escapa, los ojos de Lizzie se cristalizan, quiero calmarla decirle que todo irá bien pero no puedo no tengo la voz para decirlo veo la culpabilidad en sus ojos y no resisto siento el nudo en mi garganta y es mi punto de quiebre lloro como no lo he hecho nunca, Lizzie llora conmigo no soporto verla llorar por algo de lo que no tiene la culpa.

El chico de enfrente |S.M| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora