Pasó el tiempo y todo seguía normal (al menos para mí).
Un día mientras esperaba el autobús vi que venía caminando en el otro extremo de la calle, me sonrió mientras me saludaba. El en la tarde me pregunto si podía dejarme a mi casa cuál yo conteste con un si, que emoción saber que tu "novio" te acompañara hasta casa.
Al día siguiente tenía tantos nervios y estaba demasiado feliz, tocaron el timbre de salida y yo tan feliz lo busqué por todas partes, preguntaba si alguien lo había visto, hasta darme cuenta de que él nunca llegó. Chicos nunca dejen plantado a alguien, se siente demasiado feo :(.
