Yin: Una sombra entre luces

Capitulo 1

Erase una vez un mundo de luz plena, todos sus habitantes emitían luz pura, todos, excepto dos de ellos. Eran gemelos, un chico y una chica. El nombre del chico era Sam, el hermano mayor, la chica se llamaba Rosie, su querida hermana menor; eran huérfanos.

Jamás en este mundo había nacido un niño que no emitiría luz, era algo inexplicable y aterrador para los doctores y para sus padres. Existían rumores de que dos seres sin luz acabarían con todo lo conocido los doctores les sugirieron a sus padres que los mataran justo allí, ambos no dudaron ni un solo instante y se negaron a esta opción, optaron por una más difícil.

Tomaron a los gemelos y los llevaron fuera de esa ciudad, ellos sabían que, si los líderes del mundo descubrían este nacimiento, sin pensarlo acabarían con la vida de ellos junto con la de los niños. Los llevaron a un pequeño poblado olvidado por los líderes y los dejaron frente a una casa, la cual se veía decente, dejaron una nota junto a ellos que decía...

-Ellos son Rosie y Sam, nuestros pequeños sin luz, los dejamos en sus manos, por favor, permitan que sean parte de su hogar-

La casa pertenecía a una familia de estatus económico medio-alto, sus nombres eran King e Elane, ellos tuvieron un hijo el cual murió hace algunos años atrás por una extraña enfermedad. Al ver a los gemelos llorando frente a su puerta sintieron un profundo dolor y una gran consternación, se asustaron al darse cuenta que no emitían luz, aun así, no podían dejarlos afuera, ellos sabían cómo cuidarlos; también eran conscientes de los rumores, pero eso no les importo en lo más mínimo, se miraron el uno al otro y tomando a los niños los llevaron dentro. Sacaron una cuna la cual pertenecía a su hijo y la llevaron a la habitación.

Elane los estaba bañando y se percató de algo; Rosie no paraba de llorar, tenia una marca en la espalda baja, más que una marca parecía un tatuaje. Ese tatuaje para nosotros simplemente sería una luna menguante, pero para los habitantes de un mundo donde nunca se hacia de noche, un mundo el cual no había una sola pizca de oscuridad, donde en el cielo solo se veía un sol radiante... Ese tatuaje no tenía ningún significado para ella. Por otro lado, Sam se mantenía calmado, no emitía ningún sonido, aun siendo gemelos eran algo distintos. Elane les dio de comer y los llevo a la habitación, los puso dentro de la cuna y Rosie aún seguía llorando, se quedo observándolos, en ese momento Sam toco a Rosie con su manito y en ese instante el llanto incansable se detuvo, Elane se sorprendió, levantó a Sam y Rosie empezó a llorar nuevamente; Elane miró fijamente a Sam y le pareció ver algo extraño en sus ojos y justo en ese momento se vio un destello dentro de esos ojos claros, quedo sorprendida y lo observo nuevamente pero no ocurrió nada, pensó que se estaba volviendo loca, lo puso a lado de Rosie nuevamente y ella enseguida dejo de llorar, eso le seguía pareciendo extraño pero le restó importancia.

Como en este mundo no salía la luna, sus habitantes dormían cuando llegaban a casa y sentían la necesidad. Y de este modo Elane y King dejan a los gemelos en la cuna y van a dormir.

Habían pasado dos horas, los gemelos se mantenían en silencio, Elane y King aún dormían. Se oyó un sonido extraño proveniente de las paredes de la casa y en ese preciso momento, algo nunca antes visto en este mundo atravesó la pared como un fantasma. Una criatura...más bien un ser de oscuridad pura, se acercó imponente a la cuna, estaba observando a los gemelos, al principio sólo era un tumulto de oscuridad sin forma, pero mientras los observaba fue tomando forma humana, un brazo se formó y acercó su mano al interior de la cuna y con ella acarició suavemente el rostro de Rosie y mientras lo hacía profirió estas palabras...

-No puede existir luz sin oscuridad detrás de ella, no puede existir oscuridad sin luz en frente de ella, ni siquiera en este mundo colmado de luz, Tú mi pequeño retoño, serás el inicio de todo, crece y ven a mí, mi pequeña Yin -