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Mientras que pensaba y caminaba por las secciones del supermercado un chico que iba igual de despistado que yo, choco conmigo, al caer note que traía el uniforme del personal y había tirado un par de bolsas llenas de naranjas

- No te parece de mal gusto chocar con los clientes distraídos señooor- alargue la ultima palabra, intente leer el nombre de su placa pero era demasiado extraño y termine mirándolo con cara de confusión

Tome un par de naranjas y luego tome la mano del chico, quien me la ofreció para ayudarme a levantar, al estar de pie le entregue las naranjas que recogí

- Kunpimook- dijo soltando una risita - Es un poco complicado, en especial porque lo escribieron junto a mi apellido en la pequeña placa, es como un revuelto de letras- termino y se dispuso a recoger las naranjas

- Pues, Kunpimook, me parece que tendré que llamar al manager ya que al parecer- dije revisando mi bolsa- Rompiste mis tarros de fideos y no hay mas en las repisas- note como su sonrisa se desvanecía a una cara de asombro

- No por favor! no quiero problemas apenas llegue hoy y- y, por favor no diga nada- se levanto dejando las bolsas que acababa de llenar otra vez, hacia gestos exagerados y note como sus mejillas se sonrojaban - Hay mas en la pequeña bodega de atrás, si quieres me puedes acompañar para que sepas que no te estoy mintiendo- dijo cabizbajo mientras jugueteaba con sus manos

- Esta bien, pero no te asustes- tome su barbilla y lo obligue a mirarme, sus ojos se notaban cristalinos intentando contener un par de lagrimas - Mi intención no era que te preocuparas, a veces mis bromas se pasan de la raya- le sonreí y le ayude con el par de bolsas

Pasamos por la sección de frutas donde dejamos las naranjas y luego nos dirigimos a la parte de atrás del establecimiento, habíamos estado hablando en el camino, así que me sentía mas tranquilo siguiéndolo, no me adentre mucho y espere Kunpimook en la puerta hasta que volvió cabizbajo y con las manos vacías

- No quedan mas fideos, lo siento- levanto rápidamente la cabeza y me miro contento - En mi casa tengo fideos si quieres puedes venir conmigo, mi turno ya acabo y... No se solo digo, si quieres- dijo y se sonrojo

- Esta bien, kun, o mook? Te puedo decir pimoo?- Dije sonriendo con una mano en la cabeza mientras me sentía como un estúpido por decir tan tontos apodos

- Solo dime Bambam o Bam- se rió- Es mas corto, espérame afuera de la tienda, me vestiré y podremos irnos a mi casa, si los fideos que ibas a comprar eran tu almuerzo, te debes estar muriendo del hambre- sonrió y salio de la bodega con una mochila hacia el baño del establecimiento

Salí y me senté en el anden, saque mi teléfono, ya casi eran las 5 de la tarde, note que tenia 4 mensajes de Jinyoung y 3 llamadas perdidas, ¿porque siempre silenciaba mi teléfono?

" Sigues en tu casa gigante?" "Piensas traerme de comer?" "Mis madre estaba en casa y me dio de comer, si hubiera tenido que esperarte ya me habría desmayado del hambre" "Siquiera estas vivo?! ¡responde Yugyeom!

Luego de leer los mensajes le respondí con un "Estoy bien, cuando pueda te llamo, no es una historia para contar a la ligera"

Alguien toco mi hombro, era Bambam, me levante y comenzamos a caminar hacia su casa mientras que intentábamos conocernos mejor, aquella tarde iba de maravilla, esperaba poder ver a Bam mas seguido después de esto



Intocable (Yugbam) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora